Portugal intenta salvar una sanidad p¨²blica en estado cr¨ªtico
El Gobierno renuncia a la gesti¨®n directa del Sistema Nacional de Salud y crea una direcci¨®n independiente para combatir el desbarajuste actual, que forz¨® la dimisi¨®n de la anterior ministra
Portugal ensayar¨¢ un nuevo modelo de gesti¨®n de la sanidad p¨²blica, que pretende rescatarla de la situaci¨®n cr¨ªtica que atraviesa. El nuevo estatuto del Sistema Nacional de Salud (SNS) elaborado por el Gobierno contempla la creaci¨®n de un equipo directivo independiente, que no tendr¨¢ que rendir cuentas a nivel pol¨ªtico. El decreto-ley que lo regula fue promulgado a mediados de septiembre por el presidente de la Rep¨²blica, Marcelo Rebelo de Sousa, y entrar¨¢ en vigor este s¨¢bado 1 de octubre. Al frente de la direcci¨®n ejecutiva del SNS, una especie de CEO del sistema, estar¨¢ Fernando Ara¨²jo, hasta ahora presidente del consejo de administraci¨®n del hospital de S?o Jo?o, en Oporto, considerado un modelo eficaz frente al caos que se vive en algunos grandes complejos de Lisboa.
Ara¨²jo, un m¨¦dico que se ha decantado por la gesti¨®n sanitaria, considera que uno de los problemas del sistema es una continuada financiaci¨®n precaria, que se desplom¨® durante la crisis de 2010 y que se recuper¨® solo parcialmente en los a?os de bonanza debido al estricto control de los presupuestos que han ejercido todos los ministros de Finanzas del primer ministro, el socialista Ant¨®nio Costa, preocupado con recortar la deuda y el d¨¦ficit p¨²blicos desde que lleg¨® al poder en 2015. Ara¨²jo tampoco compart¨ªa algunas decisiones de la anterior ministra de Sanidad, Marta Temido, que trataba de suplir la falta de personal con horas extraordinarias y el refuerzo con personal externo, sobre todo en las urgencias. ¡°El problema de los gestores pol¨ªticos es que a veces cometen la imprudencia de, en sistemas complejos, optar por soluciones populistas. Dar m¨¢s dinero sin una estrategia clara y una planificaci¨®n adecuada no resuelve las limitaciones y puede crear nuevos problemas¡±, escribi¨® en un art¨ªculo en el Jornal de Not¨ªcias.
El SNS pag¨® 530 millones de euros por horas extras en 2021, una cifra que no deja de crecer desde 2018. Adem¨¢s, la desigual retribuci¨®n que reciben los sanitarios de los centros (25 euros por hora extra) y los ¡°tarefeiros¡± (contratados externos para un servicio), que pueden percibir hasta 100 euros por hora, ha agrandado el malestar del personal.
Marta Temido, que se convirti¨® en la ministra mejor valorada de Portugal por su actuaci¨®n durante la pandemia, dimiti¨® hace unas semanas tras encadenar varios episodios cr¨ªticos. El que activ¨® su renuncia ocurri¨® el 30 de agosto, cuando falleci¨® una embarazada de 34 a?os mientras era transferida entre dos hospitales p¨²blicos de Lisboa. Esa misma tarde Temido present¨® su dimisi¨®n ante el primer ministro, Ant¨®nio Costa, que la hab¨ªa apadrinado para afiliarse al Partido Socialista hac¨ªa un a?o y hab¨ªa llegado a verla como posible sucesora en los d¨ªas en que la ministra se gan¨® el aplauso de los portugueses. ¡°Fue un episodio de una gravedad tal que era necesario una responsabilizaci¨®n personal¡±, observ¨® d¨ªas despu¨¦s Temido, tras pasarle la cartera a su sucesor, el eurodiputado y m¨¦dico Manuel Pizarro.
Este verano tambi¨¦n fallecieron dos beb¨¦s en distintos hospitales con las urgencias ginecol¨®gicas cerradas, lo que puso el foco sobre la falta de personal en el ¨¢rea de obstetricia y neonatolog¨ªa. Otra especialidad m¨¢s que se agrietaba. Las denuncias colectivas (a veces con dimisiones en bloque) por la sobrecarga de trabajo se repiten desde hace meses por el pa¨ªs.
Hace 10 a?os el gasto p¨²blico en sanidad toc¨® fondo en Portugal. El Estado, intervenido entonces por los halcones de la austeridad (Comisi¨®n Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional), transfiri¨® apenas 7.500 millones de euros para la actividad sanitaria de 2012. Un machetazo que agravaba los recortes de 2010 y 2011. Se necesit¨® un cambio de gobierno y una d¨¦cada para que la sanidad p¨²blica recuperase el m¨²sculo financiero anterior a la primera crisis del siglo XXI. Desde 2015, cuando accedi¨® al Gobierno el Partido Socialista, el presupuesto ha crecido hasta superar este a?o los 13.500 millones de euros.
El Observatorio Portugu¨¦s de los Sistemas de Salud contabiliz¨® un aumento de 30.000 sanitarios respecto a 2016, pero tambi¨¦n una ca¨ªda de la productividad, favorecida por los efectos de la aplicaci¨®n de las 35 horas semanales y el aumento del absentismo, que lleg¨® al 20% de la plantilla durante la pandemia. Carreras profesionales mal pagadas (un cirujano con 30 a?os de experiencia cobra menos de 1.800 euros) y de imposible conciliaci¨®n familiar disparan el descontento y la desmotivaci¨®n del personal.
La gran paradoja es que el sistema se agrieta ahora que hay m¨¢s m¨¦dicos y m¨¢s dinero que hace una d¨¦cada. Y lo hace de lo peque?o a lo grande. Faltan desde almohadas en algunas urgencias a camas en hospitales que obligan a acumular pacientes en pasillos. Algunas listas de espera de cirug¨ªas superan los dos a?os. M¨¢s de un mill¨®n de personas no tienen m¨¦dico de familia asignado. Una cifra que mejora la de hace una d¨¦cada (1,8 millones), pero empeora la de los ¨²ltimos seis a?os.
Eduardo Costa y Joana Pestana, investigadores de la Nova School of Business and Economics de Lisboa, analizaron los datos desde 2015 a 2021, cuando se pas¨® de 751.000 a 1,13 millones de portugueses sin m¨¦dico propio. ¡°Esto no significa que los centros proporcionen peor atenci¨®n que en 2015. Hay factores que contribuyen a explicar este fen¨®meno. Por un lado, los nuevos m¨¦dicos contratados pueden no colocarse en las unidades con m¨¢s carencias y por otro, el aumento de la poblaci¨®n mayor y m¨¢s necesitada de cuidados hace que se reduzca el n¨²mero de usuarios por m¨¦dico¡±, sostiene Costa en un correo electr¨®nico.
La situaci¨®n en la atenci¨®n primaria se agravar¨¢ si se jubilan los 1.800 m¨¦dicos que podr¨ªan hacerlo entre 2022 y 2024. El medio millar de licenciados que se puede incorporar cada a?o al mercado no bastar¨¢n para sustituirlos. Este es uno de los cambios que quiere introducir el Gobierno. ¡°Es inaceptable que alumnos con buenas notas en la ense?anza secundaria sean privados de acceder a cursos de medicina por la restricci¨®n de numerus clausus¡±, afirm¨® el primer ministro, Ant¨®nio Costa, en una reciente entrevista a la CNN Portugal, donde record¨® la ¡°lucha¡± para ampliar plazas, que cuenta con las reticencias de las universidades y de la Ordem de M¨¦dicos (el colegio profesional).
Portugal se ha convertido en uno de los principales exportadores de m¨¦dicos y enfermeros, que buscan mejores condiciones laborales en otros pa¨ªses. La presidenta de la Ordem de Enfermeiros, Ana Rita Cavaco, calcula que unos 20.000 enfermeros trabajan en otros pa¨ªses. ¡°En este momento no hay paro en Portugal¡±, explicaba en un correo, ¡°pero las condiciones que les ofrecen no son dignas para la profesi¨®n: contratos de cuatro meses y menos de mil euros al mes, un salario que es el mismo cuando llevan 20 a?os de experiencia¡±.
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