Un repunte de la tosferina causa desde junio m¨¢s de 1.100 casos y 42 hospitalizaciones en ni?os

Las comunidades aut¨®nomas han detectado desde finales de primavera un s¨²bito incremento de casos de tosferina en ni?os, que ya suman de junio a septiembre m¨¢s diagn¨®sticos que en los tres a?os anteriores juntos. En total, seg¨²n los datos disponibles, 1.162 personas, en su mayor¨ªa ni?os, han contra¨ªdo este a?o la enfermedad y al menos 42 menores han requerido ser hospitalizados ¡ªcerca de la mitad de comunidades no han informado sobre este dato¡ª, aunque todos ellos se han restablecido y no se ha informado de ning¨²n fallecimiento.

La tosferina es una enfermedad infecciosa causada por una bacteria muy contagiosa por v¨ªa respiratoria, la Bordetella pertussis, que supone un grave riesgo para la vida de los lactantes si no est¨¢n vacunados. Los s¨ªntomas se desarrollan en dos fases. La primera, que suele durar una o dos semanas, puede confundirse f¨¢cilmente con un catarro u otras infecciones respiratorias, ya que causa congesti¨®n nasal, fiebre baja y tos leve ocasional. A partir de la segunda semana, suelen empezar los s¨ªntomas m¨¢s graves, especialmente ataques de tos r¨¢pidos, violentos e incontrolables.

¡°Desde el punto de vista cl¨ªnico, esta tos pertusoide en accesos es muy caracter¨ªstica. Quien la escucha una vez, no la olvida¡±, ilustra Cristina Calvo Rey, presidenta de la Sociedad Espa?ola de Infectolog¨ªa Pedi¨¢trica (SEIP).

Estos episodios se van haciendo m¨¢s frecuentes a medida que pasan los d¨ªas, en ocasiones provocan v¨®mitos y acaban por causar dificultades respiratorias que pueden derivar en la muerte del beb¨¦. ¡°En los lactantes menores de seis meses, la enfermedad presenta mayor riesgo de complicaciones (neumon¨ªa y encefalopat¨ªa) y de mortalidad¡±, sostiene un comunicado del Instituto de Salud Carlos III.

Josefa Masa Calles, especialista del Centro Nacional de Epidemiolog¨ªa (CNE), se muestra sorprendida por el incremento de casos registrado. ¡°Esper¨¢bamos un aumento despu¨¦s de la pandemia y las medidas de confinamiento, que redujeron la circulaci¨®n de este y otros pat¨®genos respiratorios. Pero ha sido llamativo el volumen de casos y, sobre todo, lo r¨¢pido del incremento. No ha sido un fen¨®meno exclusivamente espa?ol, sino que ha ocurrido tambi¨¦n en la mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos. Afortunadamente, la incidencia est¨¢ en descenso desde finales del verano¡±, afirma.

A diferencia de la mayor¨ªa de afecciones respiratorias, m¨¢s comunes en invierno, la tosferina suele aumentar su incidencia durante los meses calurosos. ¡°Es una enfermedad que suele provocar brotes en los campamentos de verano, actividades infantiles... Tiene un componente estacional¡±, a?ade esta epidemi¨®loga.

Gipuzkoa y especialmente su capital, San Sebasti¨¢n, ha sido la zona m¨¢s castigada por la enfermedad este a?o, con m¨¢s de 300 casos. Las alertas saltaron a principios de junio, cuando decenas de ni?os de corta edad empezaron a llenar las consultas de los m¨¦dicos de atenci¨®n primaria y a acudir a los servicios de emergencia, lo que llev¨® a las autoridades sanitarias del Pa¨ªs Vasco a publicar una circular para los profesionales sanitarios.

En esas mismas fechas, otras comunidades tambi¨¦n detectaron un incremento de casos. Arag¨®n, por ejemplo, notific¨® a finales de junio un brote comunitario que por entonces ya acumulaba 24 casos en la provincia de Zaragoza.

EL PA?S ha solicitado esta semana a todas las comunidades los datos de incidencia y hospitalizaciones por tosferina en sus centros sanitarios. De las que no han contestado ¡ªAndaluc¨ªa, Arag¨®n, Baleares, Cantabria, Canarias, Castilla y Le¨®n y Murcia¡ª, este diario ha obtenido los datos de casos del Bolet¨ªn Epidemiol¨®gico Semanal del Instituto de Salud Carlos III, aunque este no informa de las hospitalizaciones y, por tanto, no es posible saber tampoco si se ha producido alg¨²n fallecimiento en estas comunidades.

Pa¨ªs Vasco (386 casos), Catalu?a (185), Arag¨®n (129) Andaluc¨ªa (125) y Madrid (102) son las comunidades que han sufrido m¨¢s casos. Por hospitalizaciones, entre las comunidades que han ofrecido este dato, Madrid es la m¨¢s afectada, con 19. De ellos, 10 han sido en beb¨¦s menores de un a?o y ocho lactantes con menos de cuatro meses de vida. ¡°Dos casos presentaron neumon¨ªa como complicaci¨®n de la enfermedad¡±, seg¨²n la Consejer¨ªa de Sanidad.

Catalu?a y Comunidad Valenciana, con siete hospitalizaciones cada una, son las dos siguientes m¨¢s afectadas. Pese al gran n¨²mero de diagn¨®sticos, el Pa¨ªs Vasco solo ha registrado tres hospitalizaciones. Esto se debe, seg¨²n las fuentes consultadas, a que cuando los t¨¦cnicos de salud p¨²blica investigan a fondo un brote y el entorno familiar y social de los positivos, suelen diagnosticarse m¨¢s casos leves ¡ªespecialmente entre ni?os ya mayores, adolescentes y adultos¡ª que en condiciones normales pasar¨ªan desapercibidos. Por el contrario, aquellas comunidades que han investigado en menor medida los brotes tienden a diagnosticar m¨¢s los casos graves de beb¨¦s que llegan a los hospitales.

En los a?os anteriores a la pandemia, Espa?a sufri¨® una notable incidencia de tosferina, con un gran impacto sobre la poblaci¨®n infantil de menor edad, seg¨²n un documento del Instituto de Salud Carlos III. En total, entre 2011 y 2019, fueron diagnosticados m¨¢s de 43.000 casos, de los que cerca de 7.000 requirieron hospitalizaci¨®n y 42 fallecieron, pr¨¢cticamente todos ellos lactantes.

¡°La gravedad de la tosferina se centra en los ni?os peque?os menores de dos o tres meses, que son los que pueden cursar con gravedad. En el resto de edades no es una enfermedad grave¡±, explica Cristina Calvo Rey.

La importancia de la vacunaci¨®n

Todos los expertos consultados insisten en la importancia de la vacunaci¨®n como estrategia clave para proteger a los lactantes. Seg¨²n un documento del Ministerio de Sanidad, la primera dosis de la vacuna se administra a la madre durante las semanas 27 y 36 de la gestaci¨®n. ¡°La sangre del cord¨®n umbilical de los reci¨¦n nacidos de madres vacunadas frente a la tosferina presenta mayor cantidad de defensas en comparaci¨®n con los reci¨¦n nacidos de madres no vacunadas¡±, explica el documento. Posteriormente, el beb¨¦ recibir¨¢ dos dosis a los dos y cuatro meses de vida, una de recuerdo a los 11 meses y otra a los seis a?os.

Cristina Calvo Rey se felicita de que ¡°las coberturas vacunales en gestantes y lactantes en Espa?a son altas, lo que ha conseguido que los casos de tosferina grave en ni?os peque?os pr¨¢cticamente hayan desaparecido, por lo que es clave concienciar a la poblaci¨®n de la importancia de esta vacuna¡±. Seg¨²n datos del Ministerio de Sanidad, el 97,9% de los ni?os nacidos en 2020 en Espa?a fueron inmunizados frente a la tosferina en su primer a?o de vida ¡ªla vacuna, conocida como DTPa, es combinada y tambi¨¦n protege frente al t¨¦tanos y la difteria¡ª, porcentaje que es del 85,4% en el caso de las gestantes.

Pese a esta gran efectividad a la hora de proteger a los lactantes, la actual vacuna no evita que se sigan produciendo brotes, aunque con casos m¨¢s leves de la enfermedad y normalmente en ni?os de m¨¢s edad. ¡°Es una vacuna que protege bien en los primeros a?os, pero posteriormente decae su efectividad. Los ni?os a partir de los seis o siete a?os son m¨¢s susceptibles de contraer la infecci¨®n, aunque afortunadamente ya sea de forma leve. Esto es lo que explica que la enfermedad se siga comportando de forma estacional. Hace a?os hab¨ªa otra vacuna que proteg¨ªa m¨¢s, pero ten¨ªa m¨¢s efectos adversos. Deberemos convivir con esta situaci¨®n hasta que no haya otra totalmente eficaz que interrumpa definitivamente la circulaci¨®n de la bacteria¡±, concluye Josefa Masa Calles.