Las onc¨®logas que han creado una escuela para ense?ar a vivir con c¨¢ncer
Recorremos el Servicio de Oncolog¨ªa del hospital universitario Ram¨®n y Cajal de Madrid con su equipo, un grupo de especialistas, casi todas mujeres, que despliega su lado m¨¢s humano a trav¨¦s de la Escuela de Pacientes, donde ofrecen asesoramiento m¨¢s all¨¢ de los tratamientos m¨¦dicos
Cuando se diagnostica un c¨¢ncer, adem¨¢s del tratamiento, las operaciones, la quimioterapia o la radioterapia, surgen mil problemas relacionados con la cotidianidad. Como afirma Mar¨ªa Eugenia Olmedo, onc¨®loga especialista en tumores tor¨¢cicos, la supervivencia del paciente es cada vez m¨¢s alta, por lo que debe aprender a convivir con la enfermedad y sus secuelas: ¡°Para lograrlo, necesita herramientas con las que defenderse en la esfera personal, en campos como la nutrici¨®n, el ejercicio f¨ªsico..., pero tambi¨¦n a trav¨¦s de conocer realidades distintas como las de otros pacientes en la misma situaci¨®n¡±, detalla.
Por eso, en 2018 el hospital Ram¨®n y Cajal de Madrid inaugur¨® su primera Escuela de Pacientes, un espacio de encuentro entre los afectados y los profesionales de las distintas disciplinas que intervienen en sus tratamientos. En ella se ofrece asesoramiento en aspectos psicol¨®gicos ligados a la enfermedad, en cuidados para el d¨ªa a d¨ªa o en burocracia.
Actualmente, la escuela cuenta con tres ramas, dedicadas a pacientes con alguno de los tres tumores m¨¢s diagnosticados en Espa?a: adem¨¢s de la que fue pionera en este hospital, dedicada a personas con tumores de mama, han puesto en marcha recientemente la escuela para pacientes con tumores tor¨¢cicos ¡ªespecialmente de pulm¨®n, y que capitanea Olmedo¡ª y la de colorrectales.
Pilar Garrido, la jefa del Servicio de Oncolog¨ªa del hospital, afirma que esta escuela es una de sus principales fortalezas de un departamento que destaca por la excelencia en la asistencia y la investigaci¨®n, representada esta por el Instituto Ram¨®n y Cajal de Investigaci¨®n Sanitaria (IRYCIS). No en vano, esta ¨¢rea de Oncolog¨ªa ha logrado cuatro de las 13 acreditaciones CSUR con las que cuenta el hospital, una designaci¨®n del Sistema Nacional de Salud que se entrega a los centros, servicios y unidades de todo el pa¨ªs que destacan por su calidad en alguna disciplina.
Pulsa el ¡®play¡¯ para recorrer el Servicio de Oncolog¨ªa del hospital Ram¨®n y Cajal junto a su equipo. Contin¨²a leyendo para conocerlos personalmente
Pero los miembros del servicio no solo destacan la excelencia, tambi¨¦n subrayan el compromiso con los pacientes y su dedicaci¨®n. En todas las conversaciones surge la palabra ¡°orgullo¡± cuando se les pregunta por este equipo eminentemente femenino, tanto en las consultas como en los laboratorios o en las aulas con los pacientes. ¡°En plantilla solo hay cinco hombres; el resto somos mujeres¡±, detalla Garrido.
Recorremos las dependencias de este puntero Servicio de Oncolog¨ªa junto a Garrido, a tres de las doctoras dedicadas a estos c¨¢nceres que est¨¢n al frente de la escuela y al veterano jefe de Anatom¨ªa Patol¨®gica, la unidad responsable de analizar los tumores para conocer no solo c¨®mo trabajan, sino por qu¨¦ decidieron seguir este camino y qu¨¦ les hace seguir adelante.
Pilar Garrido Lo?pez
Jefa del Servicio de Oncologi?a Me?dica
Afirmo que sigue habiendo un techo de cristal en Medicina¡±
Pilar Garrido (Madrid, 61 a?os) es una buena conocedora del Ram¨®n y Cajal. Lleg¨® a este hospital al acabar la residencia, hace 32 a?os, como especialista en tumores tor¨¢cicos, una disciplina entonces incipiente. ¡°He tenido el privilegio de vivir c¨®mo situaciones de c¨¢ncer que antes no ten¨ªan opci¨®n, ahora cuentan con muchas¡±, se?ala. Desde hace un a?o dirige el Servicio de Oncolog¨ªa M¨¦dica, donde cada d¨ªa se esfuerza por ofrecer la mejor asistencia. ¡°Sientes presi¨®n por disponer del n¨²mero suficiente de profesionales para dedicarle a cada paciente el tiempo que necesita. Y t¨² debes ser capaz de convencer a quien toma las decisiones de que requieres una plantilla suficiente¡±, confiesa.
Esta lucha constante entre recursos y pacientes no es la ¨²nica que lidera Garrido. Tambi¨¦n tiene muy presente la desigualdad entre sexos en la Medicina. ¡°Tenemos que estar ah¨ª, hombres y mujeres, visualizando que nosotras tenemos m¨¢s dificultades en la carrera profesional, porque afirmo que sigue habiendo un techo de cristal¡±. Lo suyo no son meras palabras. Garrido ha sido la primera mujer en presidir la Sociedad Espa?ola de Oncolog¨ªa M¨¦dica y fue presidenta del Consejo Nacional de Especialidades en Ciencias de la Salud, y ahora ejerce de coordinadora en Women for Oncology (ESMO W4O), instituci¨®n europea centrada en potenciar la igualdad de oportunidades en el desarrollo profesional para las mujeres onc¨®logas.
En el Ram¨®n y Cajal ejerce, adem¨¢s, como codirectora del ¨¢rea de c¨¢ncer del IRYCIS, y profesora universitaria. Todas esas funciones absorben las horas de esta especialista que rasca tiempo para leer. ¡°Me apasionan Antonio Mu?oz Molina y Almudena Grandes¡±, precisa. Su afici¨®n por la literatura y la historia la llev¨®, de estudiante, a plantearse otras opciones profesionales: ¡°Pensaba que iba a dedicarme a la Filosof¨ªa, aunque ahora, pens¨¢ndolo bien, creo que no hay mejor lecci¨®n filos¨®fica que estar en una consulta de oncolog¨ªa¡±, explica.
Noelia Mart¨ªnez J¨¢n?ez
Onc¨®loga especialista en c¨¢ncer de mama
Invito a mis pacientes a casa y hacemos cenas. Depositan su confianza en m¨ª¡±
El entusiasmo recorre las palabras de onc¨®loga Noelia Mart¨ªnez (Astorga, Le¨®n, 49 a?os), quien combina su actividad asistencial e investigadora habitual con la docencia en la Escuela de Pacientes, a la que acuden aquellas con c¨¢ncer de mama. Esta fue la primera escuela en ponerse en marcha en el hospital, en 2018. ¡°El de mama es el tumor m¨¢s frecuente. Una de cada ocho mujeres lo va a padecer¡±, puntualiza esta especialista, que asegura que, muchas veces, las pacientes llegan sin informaci¨®n sobre esta enfermedad, c¨®mo superarla o c¨®mo convivir con ella. ¡°La gente conoce el lazo rosa, pero cuando le toca en primera persona hay mucho desconocimiento¡±, se?ala. Por eso, en ese espacio com¨²n para afectados y profesionales explican qu¨¦ es la patolog¨ªa y todo lo que supone en su d¨ªa a d¨ªa.
La larga supervivencia de sus pacientes con c¨¢ncer de mama hace que las acompa?e durante muchos a?os, lo que lleva su relaci¨®n m¨¢s all¨¢ de la de m¨¦dico-paciente, incluso fuera de la consulta y la escuela. ¡°Desarrollas una uni¨®n personal que hace que tengan tu n¨²mero de tel¨¦fono, que vayas a sus domicilios¡±, explica. Una familiaridad que deriva en amistad. ¡°Es m¨¢s, invito a pacientes a casa y hacemos cenas. Depositan su confianza en ti, necesitan una ayuda y yo se la puedo dar¡±, confiesa. La fotograf¨ªa es la otra gran pasi¨®n de esta astorgana. Lleva una peque?a c¨¢mara digital ¨D¡±con buen objetivo¡±, aclara¡ª en el bolso y, si viaja, se echa la r¨¦flex. Cuando le preguntan por su estampa favorita para fotografiar lo tiene claro: ¡°Tenemos una casita en Alcossebre [Castell¨®n] y esas puestas de sol y esos amaneceres los tengo grabados en mis fotos y en mi retina¡±.
Reyes Ferreiro
Especialista en ca?ncer de colon
Es enriquecedor escuchar las vivencias de los pacientes¡±
Un problema de salud hizo que la onc¨®loga Reyes Ferreiro (Caldas de Reis, Pontevedra, 40 a?os) fuera consciente de ciertas carencias del sistema sanitario. ¡°Al estar al otro lado te das cuenta de que muchas veces las consultas se quedan cortas¡±. Por eso, durante su baja, esta especialista en c¨¢ncer colorrectal pens¨® en 2022 en llevar la Escuela de Pacientes que tanto ¨¦xito hab¨ªa tenido en el c¨¢ncer de mama a los enfermos afectados por los tumores colorrectales.
Revela Ferreiro que en estas sesiones los docentes tambi¨¦n se llevan ense?anzas. ¡°Para nosotros es muy enriquecedor escuchar sus vivencias, nos ayudan a entender su d¨ªa a d¨ªa¡±, se?ala esta especialista que siempre ha estado ligada al Ram¨®n y Cajal, donde ha realizado su residencia. ¡°Es un centro en el que te sientes muy arropada y en el que puedes ofrecer al paciente los tratamientos m¨¢s novedosos¡±, celebra.
Reyes reconoce la importancia del sistema de salud p¨²blico, especialmente despu¨¦s de haber realizado una estancia formativa en un hospital privado en EE UU. ¡°Estaba acostumbrada a c¨®mo se hacen aqu¨ª las cosas, donde ponemos el mejor tratamiento sin cuestionar el coste. All¨ª, con la primera paciente que vi, me llam¨® la atenci¨®n que le ofrecieron varias opciones con sus correspondientes facturas para que ella eligiera, y se decant¨® por una que se hab¨ªa dejado de aplicar en Espa?a por obsoleta¡±, recuerda esta onc¨®loga que dej¨® sus estudios de piano en el conservatorio para dedicarse de lleno a la Medicina a los 18 a?os. Aunque ya casi no pulsa las teclas del que tiene en casa, s¨ª que tiene claro que aquellos a?os le han servido en su carrera posterior. ¡°La constancia y la perseverancia me han ayudado en esta profesi¨®n tan exigente¡±, revela.
Mari?a Eugenia Olmedo
Onco?loga especialista en ca?ncer de pulmo?n
Tratamos tambi¨¦n la parte emocional que abruma a una familia cuando hay un diagn¨®stico de c¨¢ncer¡±
Mar¨ªa Eugenia Olmedo tuvo claro desde los 12 a?os no solo que quer¨ªa ser m¨¦dico, sino que tambi¨¦n se har¨ªa onc¨®loga. A esa edad, esta malague?a que hoy tiene 44 perdi¨® a su abuelo por culpa de un tumor de pulm¨®n. Y sinti¨® que su misi¨®n en la vida ten¨ªa que ser ¡°curar el c¨¢ncer¡±, recuerda. Cuando tuvo que elegir, su familia intent¨® disuadirla para que se decantara por ¡°otra cosa¡±, con el argumento de que era una disciplina muy dura para una joven sensible y especialmente emp¨¢tica. ¡°La otra cosa que me gustaba era la medicina tropical, en ?frica o en la India... La alternativa pintaba maravillosa¡±, comenta con iron¨ªa.
As¨ª que, tras estudiar en M¨¢laga, complet¨® su residencia en el servicio de Oncolog¨ªa donde hoy trabaja y donde ejerce de coordinadora de la Escuela de Pacientes con c¨¢ncer de pulm¨®n. ¡°Tratamos cuestiones como la nutrici¨®n y la burocracia; arreglar los papeles de incapacidad requiere tiempo y esfuerzo. Pero tambi¨¦n los aspectos psicol¨®gicos, la parte emocional que abruma a una familia cuando hay un diagn¨®stico de c¨¢ncer de pulm¨®n¡±, enumera. Olmedo cuenta que se crio en plena naturaleza, en un cortijo en el centro de la provincia de M¨¢laga. Por eso, para reconectar con el entorno, cultiva una peque?a huerta all¨ª y otra en Madrid. ¡°Me he vuelto adicta¡±, confiesa. Lo que mejor se le da: los tomates, los pimientos, los ajos y las fresas. Y lo que peor, las coles. ¡°Me salen fatal, pero yo lo intento todos los a?os¡±.
Jose? Palacios
Jefe del Servicio de Anatomi?a Patolo?gica
Cuando empec¨¦, el diagn¨®stico ocupaba una l¨ªnea. Ahora, m¨¢s de dos p¨¢ginas¡±
Jos¨¦ Palacios lleva m¨¢s de 40 a?os descubriendo si las personas que acuden al hospital por sospecha de un tumor tienen c¨¢ncer o no. En el Servicio de Anatom¨ªa Patol¨®gica que lidera desde 12 a?os se dedican principalmente a analizar muestras de tejido y las citol¨®gicas (de c¨¦lulas) obtenidas mediante biopsia o citolog¨ªa. De alguna manera, ejerce de ojos y manos de los onc¨®logos en un mundo microsc¨®pico.
En las cuatro d¨¦cadas que lleva en la profesi¨®n ha presenciado una gran revoluci¨®n en los diagn¨®sticos, cuyo hospital, comenta con orgullo, es pionero en Madrid. ¡°Cuando empec¨¦, el de c¨¢ncer de mama ocupaba una l¨ªnea. Ahora hacemos documentos detallados de m¨¢s de dos p¨¢ginas¡±, recuerda. La introducci¨®n de las tecnolog¨ªas digitales tambi¨¦n ha transformado su especialidad, lo que ha facilitado enormemente su trabajo. ¡°Se digitalizan las preparaciones y las vemos sobre una pantalla de ordenador. Esto permite compartirlas con compa?eros y cuantificar variables con exactitud. Tambi¨¦n abre la puerta a aplicar algoritmos de inteligencia artificial al diagn¨®stico¡±, expone.
Este cordob¨¦s de 65 a?os siempre ha trabajado con la tecnolog¨ªa m¨¢s puntera en salud disponible en los hospitales por los que ha pasado y se prepara ahora para ceder el paso a las generaciones m¨¢s j¨®venes, pues est¨¢ a punto de jubilarse. Aunque se va a mantener en el puesto, al menos, un a?o m¨¢s, pues a¨²n siente que tiene mucho que aportar. Para entonces, su objetivo es dedicar tiempo a lo que m¨¢s le gusta: el arte culinario. ¡°Mi cocina es muy elemental, legumbres, fabada... Me gustar¨ªa perfeccionar la t¨¦cnica, aprender a tratar la carne y el pescado de diferentes maneras, conocer todas las posibilidades de la materia¡±.