Los estafadores se aprovechan de la solidaridad con las v¨ªctimas del maremoto
Varias p¨¢ginas y correos que circulan por la red tratan de robar datos sensibles u obtener dinero de donantes bienintencionados
La Comisi¨®n Federal de Comercio de EEUU (FCC) recomend¨® el mi¨¦rcoles que se descarten las peticiones de ayuda para los afectados por el maremoto en el sureste asi¨¢tico que lleguen a trav¨¦s del correo electr¨®nico o el tel¨¦fono. El FBI afirma que perseguir¨¢ "de forma agresiva" a quienes traten de aprovecharse de la tragedia. La cosa podr¨ªa empeorar: "Es s¨®lo cuesti¨®n de tiempo hasta que aparezcan p¨¢ginas de Internet que imiten a las de las organizaciones caritativas m¨¢s conocidas", se?ala Paul Wood, de la compa?¨ªa de seguridad inform¨¢tica MessageLabs.
Internet sirve para recoger donaciones, pero tambi¨¦n para llevar a cabo estafas con las que los menos escrupulosos tratan de enriquecerse haci¨¦ndose pasar por v¨ªctimas del maremoto en Asia. Algo similar ocurri¨® tras los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EEUU, cuando los timadores profesionales no tuvieron reparos en aprovecharse de la generosidad de los ciudadanos.
En esta ocasi¨®n, pocas horas despu¨¦s del desastre los timadores comenzaron a lanzar ataques de phishing, una t¨¢ctica con la que llevan a los usuarios a que acudan a p¨¢ginas web falsas, pero con apariencia de ser de organizaciones leg¨ªtimas, donde se les piden sus n¨²meros de tarjeta de cr¨¦dito y otra informaci¨®n personal.
El maremoto que arras¨® el sudeste asi¨¢tico ha provocado el resurgir del llamado "timo de Nigeria", que en el pasado ya circul¨® ampliamente por la red. En su versi¨®n antigua, estos mensajes ped¨ªan a los internautas que ayudasen a recuperar el dinero del que se hab¨ªan apropiado de forma indebida dirigentes del anterior r¨¦gimen dictatorial
nigeriano. A cambio de la informaci¨®n sobre el n¨²mero de cuenta y otros datos personales, a los internautas se les promet¨ªa un porcentaje del 40% de la cantidad.
Una nueva variante de este timo procede de Miss Helen, una princesa de Somalia cuyo pueblo entero fue "barrido por esta temible inundaci¨®n". Miss Helen asegura que necesita ayuda para recuperar la fortuna familiar, de 2,4 millones de d¨®lares, que fue transferida a Espa?a justo antes del maremoto, seg¨²n la misiva, que tambi¨¦n promete una "comisi¨®n" del 40%.
Otro de los mensajes que circulan por la red supuestamente procede de un peque?o pueblo de Indonesia y pide donaciones a trav¨¦s de una cuenta bancaria en la isla mediterr¨¢nea de Malta. "Nos hemos quedado sin casa y hemos perdido todo lo que ten¨ªamos. Estar¨ªamos muy agradecidos si pudieras ayudarnos con alguna cantidad
de dinero", dice el correo electr¨®nico.
Asimismo, algunas familias que colocaron mensajes en la web en un intento de dar con sus seres queridos fueron contactadas por timadores que les ofrecieron su ayuda a cambio de dinero.
El Centro de Denuncias de Delitos por Internet estima que en 2004 los timos por Internet ocasionaron p¨¦rdidas por valor de cerca de 126 millones de d¨®lares, y el desastre de Asia indica que 2005 ha comenzado fuerte en lo que se refiere a estos enga?os. Scambusters (www.scambusters.org), una de las p¨¢ginas con m¨¢s solera en este campo, recomienda a los afectados que se dirijan a la web del Centro de Denuncias de Internet (www.ic3.gov).
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.