En busca de una sociedad de la informaci¨®n para todos
M¨¢s de 400 dise?adores, desarrolladores y expertos en accesibilidad debaten en Gij¨®n sobre c¨®mo evitar la exclusi¨®n digital del 20% de la poblaci¨®n europea
El piso bajo de los autobuses no s¨®lo beneficia a personas de movilidad reducida, sino a todos los usuarios del servicio p¨²blico, que pueden subir y bajar con mayor facilidad. Lo mismo sucede con la accesibilidad de las p¨¢ginas web, seg¨²n los expertos que desde ayer, convocados por la Fundaci¨®n CTIC y la oficina espa?ola del consorcio mundial W3C, participan en el congreso Fundamentos Web 2005.
Al evento acuden m¨¢s de 400 dise?adores y desarrolladores con la intenci¨®n de conocer las l¨ªneas b¨¢sicas que permiten crear contenido accesibles por cualquiera, sea cual sea su condici¨®n f¨ªsica, desde cualquier dispositivo, ya sea un ordenador, m¨®vil o agenda personal.
Hasta el 20% de la poblaci¨®n europea sufre alg¨²n tipo de discapacidad, pero ¨¦sta no deber¨ªa impedir que accedieran a Internet en igualdad de condiciones que el resto de ciudadanos, pues existen las tecnolog¨ªas necesarias para hacerlo posible. Pero los creadores de contenidos digitales no siempre lo tienen en cuenta pese a que lo que est¨¢ en juego el acceso de todos a la sociedad de la informaci¨®n.
Lograr que sea una realidad es el objetivo que persiguen John Slatin, director del Instituto de Accesibilidad de la Universidad de Tejas (EE UU), Inma Placencia, jefe de unidad del pan e-Inclusi¨®n de la Comisi¨®n Europea, y Shawn Lawton Henry, investigadora del Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts (MIT). En colaboraci¨®n con el consorcio mundial W3C -organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que elabora est¨¢ndares y pol¨ªticas comunes que permiten que Internet no se convierta en la Babel de las tecnolog¨ªas- buscan concienciar a empresas, usuarios, y administraciones de la importancia de esta cuesti¨®n.
Slatin explica que la accesibilidad es "una cualidad de la experiencia de navegaci¨®n del usuario, es lo que sucede cuando alguien con discapacidad puede usar un contenido en las mismas condicione que alguien que no la tiene". Se trata de una cualidad de las publicaciones electr¨®nicas que intenta garantizar que todo el que quiere participar en el mundo digital podr¨¢ hacerlo.
Shawn Lawton Henry, investigadora en el Laboratorio de Ciencias de la Computaci¨®n e Inteligencia Artificial (CSAIL) del Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts (MIT) insisti¨® durante su intervenci¨®n en que garantizar la accesibilidad "no es s¨®lo tarea de los dise?adores". Se trata de una cuesti¨®n en la que intervienen tambi¨¦n otros factores, como las empresas que crean los programas con que ¨¦stos trabajan, los fabricantes de monitores, de navegadores o de tecnolog¨ªas asistivas "programas que leen" lo que aparece en pantalla para personas con alg¨²n tipo de discapacidad visual, por ejemplo-. "Cuando cualquiera de estos elementos falla se obliga al usuario a trabajar m¨¢s y para muchos no es posible saltar los obst¨¢culos", sostiene Lawton Henry, que pide a todos estos agentes que cumplan con su labor, y a los usuarios, que se lo exijan activamente.
El papel de las administraciones p¨²blicas en esta tarea es fundamental, pues est¨¢n obligadas a dar informaci¨®n y servicio para todos y cada uno de sus ciudadanos. Inmaculada Placencia, que trabaja en el plan de inclusi¨®n digital de la Comisi¨®n Europea, recordaba en su intervenci¨®n que cerca del 16% del gasto tecnol¨®gico que se realiza en la UE corresponde al sector p¨²blico, por lo que las administraciones est¨¢n en condiciones de forzar a trav¨¦s de sus concursos y licitaciones de proyectos digitales que las empresas del ramo contemplen la accesibilidad como elemento indispensable de las p¨¢ginas que crean.
Como invidente que es, Slatin ha vivido en primera persona los efectos de p¨¢ginas de Internet creadas sin tener en cuenta las reglas b¨¢sicas de accesibilidad. Durante su intervenci¨®n comparti¨® con la audiencia una experiencia personal, recordando que cuando hace un a?o le fue diagnosticado un c¨¢ncer de sangre. "Tuve miedo cuando los m¨¦dicos me dijeron que ten¨ªa leucemia, pero casi tan duro como eso fue descubrir que tras visitar una docena de p¨¢ginas no pod¨ªa acceder a la informaci¨®n que hab¨ªa en la Red sobre la enfermedad".
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