El olor de la pirater¨ªa

La industria audiovisual tambi¨¦n tiene su fragancia. No es un perfume caro de dise?o, ni siquiera pasa por los laboratorios para ser destilado, es algo innato: olor a policarbonato. Esta sustancia qu¨ªmica empleada en la elaboraci¨®n de los discos compactos desprende un aroma, pero no prueben a restregar un DVD por sus narices, no podr¨¢n detectarlo a no ser que tengan habilidades caninas para ello.

En cuesti¨®n de habilidades la propiedad intelectual tampoco parece ponerse techo para frenar cualquier tipo de delito o acci¨®n que perjudique a los intereses de la industria audiovisual -producci¨®n que comprende todos los derivados imaginables: cine, m¨²sica, o videojuegos. En esa lucha por desenmascarar al pirata la Federaci¨®n para la Protecci¨®n Intelectual ha contactado con la MPA (Motion Pictures Asociation), representante de los intereses de la industria del cine a nivel mundial. La ¨²ltima gran novedad: perros capaces de detectar la fragancia de la industria audiovisual.

Lucky y Flo son dos perras sabuesas como las que muestran las pelis del cine. Hoy ellas han actuado en el cine, pero no en la gran pantalla. FAP y MPA han efectuado la presentaci¨®n de estas dos labradores en Kinepolis. Las casualidades no existen, y su puesta de largo ha sido en una de esas salas en las que se introducen c¨¢maras de v¨ªdeo para m¨¢s tarde hacer negocio en el top manta. La sala que suele ser refugio de parejas, ni?os y mayores se ha transformado en un improvisado almac¨¦n, decenas de cajas a los pies de la gran pantalla y s¨®lo una contiene las pruebas del delito.

Flo pasea con paso lento, pero coqueto, a su pelaje negro le acompa?a un chaleco antirreflectante naranja con su nombre bordado, lo que le da un aire se?orial, m¨¢s cercano a los seres humanos que a los canes. Cuando su entrenador, Philip Ray, suelta la correa, la perra comienza a mover el rabo y olisquea las cajas; lo hace sin prisa, pero sin pausa. Cuando Flo ha terminado su b¨²squeda se sienta frente a la caja sospechosa y parece intercambiar una mirada c¨®mplice con su entrenador: "Ah¨ª lo tienes Philip, ya me puedes dar mi pelota", debi¨® pensar esta perra labradora que se par¨® con tanta decisi¨®n como certeza. El entrenador le regala la pelota de tenis como premio y a continuaci¨®n inspecciona la caja, la abre y las unidades de DVD, desplazadas por la gravedad, inundan el suelo tejiendo una alfombra de policarbonato o de compactos, en su gusto queda. A continuaci¨®n es el turno de Lucky, m¨¢s nerviosa que su compa?era, parece m¨¢s veloz, pero no menos efectiva, a pesar de desplazar y esconder la caja que contiene los compactos, la encuentra.

"La recompensa es lo que le incentiva, se lo pasa bien haciendo su trabajo. Para los perros es un juego", sentencia Philip Ray quien ha paseado con estos perros por medio mundo: EE UU, Reino Unido, Canad¨¢, Hong Kong, Singapur, Islas Filipinas, Dubai, Malasia, lugares donde la pirater¨ªa es un negocio de exportaci¨®n internacional. Los resultados en todos los pa¨ªses donde han ido a trabajar con las perras ha sido un ¨¦xito. Tanto que en Malasia Lucky y Flo -cuentan con dos galardones del gobierno del pa¨ªs oriental- tienen un precio por su cabeza. Tras una certera actuaci¨®n en un centro comercial de m¨¢s de diez plantas y la incautaci¨®n de 1.200.000 compactos ilegales las mafias cifraron la muerte de los canes: "La polic¨ªa local nos advirti¨® que no pod¨ªamos volver puesto que sus cabezas ten¨ªan un precio de unos 30.000 d¨®lares", asegura Michael Buchan agente de la MPA.

Ocho meses de formaci¨®n y 13.000 euros

Cuando Michael Buchan recibi¨® el encargo de adiestrar a unos perros para que detectasen DVD, lo primero que pens¨®: "estos americanos est¨¢n locos". Anteriormente hab¨ªa trabajado para la polic¨ªa brit¨¢nica, fue a trav¨¦s de un amigo y tras su ingreso en la MPA cuando empez¨® a tener consciencia de la posibilidad: "En unos meses me di cuenta de que era posible, hab¨ªamos trabajado para que los perros detectasen otro tipo de sustancias, se trataba una m¨¢s". Cuando pasaron varias semanas de la primera reuni¨®n que mantuvo en los ?ngeles, las perras estaban listos: ocho meses de formaci¨®n y una inversi¨®n de 13.000 euros. En abril de 2005 tocaba comunicar la noticia, Buchan descolg¨® el tel¨¦fono para comunicar a la aduana del aeropuerto de Stansted (Reino Unido) que ten¨ªa dos detectives caninos dispuestos a localizar material pirata: "Cuando llam¨¦ a los de las aduanas pensaron que se trataba de una broma, era 1 de abril-equivalente al d¨ªa de los Santos Inocentes en Espa?a-, me colgaron el tel¨¦fono y tuve que llamar a la siguiente semana", asegura Buchan.

El tiempo puso las cosas en su sitio y las dos perras viajan por el mundo con cifras r¨¦cord a sus lomos: Desde abril de 2005 hasta agosto de 2007, las dos perras han acaparado el protagonismo en varias operaciones policiales. En su curr¨ªculum: la Operaci¨®n Double Trouble, en las autoridades se incautaron 1,88 millones de discos piratas, cuyo valor ascend¨ªa a m¨¢s de 2,25 millones de euros. La operaci¨®n culmin¨® con 26 personas.

Aplicaci¨®n en Espa?a

De momento, Lucky y Flo son las dos ¨²nicas perras en el mundo entrenadas para este fin. En las pr¨®ximas semanas al equipo se unir¨¢n otros dos labradores. La velocidad de detecci¨®n en las aduanas ha sido determinante para que la MPA contin¨²e trabajando con este sistema. En Espa?a el panorama es diferente, hasta ahora las perras han actuado en grandes pa¨ªses exportadores: "Est¨¢n haciendo una gira por todo el mundo, han estado en Malasia uno de los mayores productores de productos piratas que se exportan en todo el mundo. En Espa?a podr¨ªa aplicarse en la persecuci¨®n de venta ambulante, detecci¨®n de pisos donde se graba producto fraudulento o en los mercadillos en la detecci¨®n de coches que esconden la mercanc¨ªa", matiza Jos¨¦ Manuel Tourn¨¦, director general de FAP.

FAP incluye datos de "descargas ilegales en Internet, todas aquellas que no son autorizadas por su autor", seg¨²n Tourn¨¦, algo que hace que los datos de pirater¨ªa engorden ostensiblemente respecto a las cifras que maneja la polic¨ªa municipal de Madrid. Seg¨²n FAP, en Espa?a las cifras de 2007 son las siguientes: "200 millones de descargas de pel¨ªculas a trav¨¦s de Internet, se incautaron 827.800 DVD, 18.629 CD y 23.583 discos de juegos piratas, a los que hay que sumar las m¨¢s de 1.500 tostadoras de DVD y CD intervenidas".

Lucky y Flo, la nueva arma contra la pirater¨ªa