Nuevas tecnolog¨ªas para los mismos pol¨ªticos

La fascinaci¨®n por Obama y su campa?a pol¨ªtica no tiene l¨ªmites. Pagar 250 euros de inscripci¨®n para asistir a un congreso en el que no hay una sola mesa para escribir tiene m¨¦rito. El auditorio de la torre Agbar de Barcelona se conviriti¨® en la jaula de un buen pu?ado de entusiastas de Twitter, blogs y Facebook en clave pol¨ªtica cuando pasadas dos horas la conexi¨®n wi-fi no pod¨ªa dar servicio para todos y los enchufes de la sala era inexistentes.

Tras la charla de apertura en v¨ªdeo de Jordi Hereu, alcade de la ciudad anfitriona, hubo una sorpresa fuera de programa durante la primera parada t¨¦cnica para el caf¨¦: Josep Llu¨ªs Carod Rovira cont¨® algunas experiencias de su partido y el independentismo catal¨¢n en Internet. Joe Rospars, Kate Albright-Hanna, Benoit Thieulin y Dominique Piotet expusieron las lecciones de campa?a en el camino de Obama hacia la Casa Blanca. Previamente, Micah Sifry hizo algo tan de moda como meterse con los peri¨®dicos y su dejadez en labores de investigaci¨®n. Tuvo acogida entre el p¨²blico, pero no se observ¨® un ¨¢pice de cr¨ªtica hacia la clase pol¨ªtica en el resto de su intervenci¨®n.

La tarde estuvo dedicada a analizar los cambios de la organizaciones pol¨ªticas y las nuevas v¨ªas de comunicaci¨®n de los ciudadanos. Se certific¨® la importancia de Facebook y Twitter como emisores y difusores del mensaje. El marketing propagand¨ªstico 2.0 comienza a tener sus herramientas, entre las que MySpace ya no tiene cabida. Fueron varios ponentes los que certificaron su defunci¨®n como red social para crear tendencias. Desde Francia a Reino Unido pasando por Suecia o Irlanda los partidos pol¨ªticos de la Vieja Europa relataron su compra de adwords en Google (compra mediante subasta a ciegas de palabras clave que aparecen en el buscador junto a los resultados), p¨¢ginas en Facebook, y pocas ideas nuevas. Daba la sensaci¨®n de estar ante la misma ponencia con diferentes presentadores. Era como si estuviesen todos los partidos probando las mismas recetas en diferentes pa¨ªses sin estudiar antes qu¨¦ avances hab¨ªa hecho el vecino y con qu¨¦ resultados.

De lo poco rese?able y novedoso en la jornada fue la exposici¨®n de Ernest Benach sobre las acciones del Parlament de Catalunya en la web 2.0 no s¨®lo a la hora de emitir mensajes, sino tambi¨¦n para escuchar a la ciudadan¨ªa. Destac¨® Paul Hilder, de la red de activismo social avaaz.org, explicando sus campa?as de correo masivo para concienciar sobre la necesidad de la lucha contra el cambio clim¨¢tico o la de obtenci¨®n de fondos para paliar los efecto del cicl¨®n en Burma (Birmania). Antes de clausurar la jornada, Jack Thurston dej¨® un atisbo de esperanza en cuanto a transparencia pol¨ªtica en Europa con la presentaci¨®n de la web http://followthemoney.eu .

En la misma se proporciona un seguimiento del dinero que cuestan las inversiones realizadas por la Uni¨®n Europea, su avance, costes y desarrollo. La pantalla del auditorio iba mostrando los mensajes generados en Twitter sobre cada una de las charlas, casi todos en ingl¨¦s. Poco a poco entre los asistentes catalano e hispanoparlantes comenz¨® la rebeli¨®n, hasta se cre¨® un canal paralelo en Twitter para salirse del gui¨®n y escribir las impresiones personales en el idioma que les apeteciese al margen de lo que hiciese la organizaci¨®n.