Schmitz, ex 'hacker' millonario, se defiende de su sospechoso pasado
El exc¨¦ntrico jefe de Megaupload fue entrevistado por Ciberp@¨ªs el 15 de febrero de 2001 El servicio ahora intervenido todav¨ªa no exist¨ªa
Nombre: Kim Schmitz. Alias: Kimble. Edad: 27 a?os. Peso: 146 kilos. Altura: 200 cent¨ªmetros. Libro: Moby Dick . Obsesi¨®n: "Ser millonario, naturalmente". As¨ª es Kim Schmitz.
Multimillonario, ostentoso y exc¨¦ntrico. Kim Schmitz est¨¢ bajo sospecha. El ex hacker alem¨¢n, que hoy preside una compa?¨ªa de capital riesgo, despierta intrigas. Schmitz afirma que inyect¨® hace unas semanas cuatro millones de euros al portal de compras LetsBuyIt, en crisis. Promet¨ªa 50 millones de euros m¨¢s. La empresa LetsBuyIt ha conseguido el dinero, pero parece que Schmitz no figura entre los inversores. "Anunci¨¦ que los 50 millones llegar¨ªan y as¨ª ha sido. No puedo decir que yo figure entre los inversores", explic¨® Schmitz a Ciberp@¨ªs .
Seg¨²n investigaciones de la publicaci¨®n The Industry Standard Europe, Kimvestor, la compa?¨ªa de capital riesgo de Schmitz, no est¨¢ registrada como empresa en Alemania. Las autoridades germanas no tienen constancia de su existencia. La cantidad que recibi¨® Schmitz por la venta de un 80% de su empresa de seguridad de datos Dataprotect a la firma tecnol¨®gica T?V Rheinland nunca se hizo p¨²blica.
"Kimvestor todav¨ªa no est¨¢ registrada como compa?¨ªa", declar¨® a Ciberp@¨ªs . "Es un largo proceso administrativo de cambio de nombre: de mi antigua empresa Dataprotect a Kimvestor. De todas maneras, todav¨ªa no he firmado ning¨²n contrato legal bajo el nombre de la compa?¨ªa Kimvestor".
A principios de la d¨¦cada de los noventa, Schmitz se hizo conocido por saltarse los filtros de seguridad del Pent¨¢gono y la NASA. Incluso explican que se dedic¨® a extraer peque?as cantidades de dinero de cuatro millones de clientes de un banco y transfiri¨® 20 millones de d¨®lares a la organizaci¨®n Greenpeace. Todo desde su piso de M¨²nich. El resultado fueron tres meses en la c¨¢rcel.
El Fugitivo
Kim se hac¨ªa llamar Kimble por Richard Kimball, el protagonista de la m¨ªtica serie de televisi¨®n El fugitivo . De los 20 millones de d¨®lares transferidos a Greenpeace, nada de nada. "Simplemente no es verdad", afirma a la misma publicaci¨®n Sara Holden, portavoz de Greenpeace Internacional. "Es cierto que la transferencia nunca lleg¨®, porque Citibank lo par¨®. Pero los diarios documentaron en su d¨ªa que el dinero se extrajo de las cuentas del banco", explica Schmitz. De su ¨¦poca hacker , no le quedan muchos amigos. El Chaos Computer Club, la cumbre hacker que se celebra en Berl¨ªn, le ha negado la entrada.
Hoy es Kim Schmitz, un empresario de la econom¨ªa de Internet. Tras hurgar en las entra?as de la red, se reconvirti¨®, como otros tantos hackers , en consultor de seguridad inform¨¢tica. En 1996 fundaba Dataprotect, una empresa de seguridad de datos en la red. La vendi¨® a buen precio.
En enero del a?o 2000 mont¨® Kimvestor, su propia compa?¨ªa de capital riesgo, que se nutre de inversores particulares y apuesta por empresas debutantes.. "Estoy muy tranquilo, la compa?¨ªa va bien. Buscamos nuevas ideas".
Verdad o mentira, leyenda o realidad, lo cierto es que Schmitz ha viajado por todo el mundo y por todo lo alto: en M¨®naco se le pudo ver con el actor Bruce Willis; en el Caribe, con una de las chicas de Playboy, y en Cuba con su boina y la estrella del Che Guevara, como ¨¦l bien se encarga de difundir en su espectacular p¨¢gina.
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