El sector p¨²blico vasco, obligado a reutilizar el 'software'

Las aplicaciones creadas por el sector p¨²blico vasco son cerradas, si su propietario no dice lo contrario. En un mes y medio ser¨¢ al rev¨¦s: los programas ser¨¢n abiertos, salvo los de colaboraci¨®n p¨²blico-privada o que afecten a la seguridad. El Gobierno de Patxi L¨®pez ultima el decreto que regula la apertura de las aplicaciones inform¨¢ticas, como ya hizo Andaluc¨ªa en 2005. Por primera vez, adem¨¢s, un ejecutivo obliga a aprovechar los programas creados por consejer¨ªas y departamentos, organismos, entidades, fundaciones, consorcios y hasta los desarrollados por terceros con dinero p¨²blico.

El Pa¨ªs Vasco, que ofrece la informaci¨®n que obra en su poder a trav¨¦s de Open Data Euskadi, no solo abraza la cultura del usar, copiar, modificar y compartir. Aspira a racionalizar los costes tecnol¨®gicos para evitar, por ejemplo, que nueve entidades creen un traductor del castellano al euskera con el dinero de todos y, encima, no se entiendan. ¡°Transparencia, apertura y reutilizaci¨®n. Tambi¨¦n es fundamental hacer sostenible las inversiones, porque el proceso modernizador de la administraci¨®n se basa, en la mayor¨ªa de casos, en el uso masivo de tecnolog¨ªa¡±, dice Idoia Mendia, consejera de Justicia y Administraci¨®n.

Todas las entidades estar¨¢n obligadas a liberar, es decir a poner al alcance de otros el c¨®digo fuente de los programas, informaci¨®n suficiente para entenderlo, su coste y hasta las ¡°dependencias que tengan de software privativo¡±, el que no da acceso a sus tripas. El 46% de los organismos de la administraci¨®n central hab¨ªa creado alguna vez programas en 2011. Mientras el 27% aprovech¨® los de otros, solo el 18% los liber¨®, seg¨²n el Centro Nacional de las Tecnolog¨ªas en fuentes abiertas (Cenatic). ¡°Lo que m¨¢s cuesta es abrirse, porque te eval¨²an, critican... En cambio, es f¨¢cil buscar soluciones con las que adem¨¢s te ahorras la licitaci¨®n", dice su director, Miguel Jaque.

El software propiedad del sector p¨²blico vasco estar¨¢ disponible gratuitamente para cualquier ciudadano en un directorio, vinculado al que mantiene el Centro Nacional de Transferencia Tecnol¨®gica (CTT), que enlaza con los otros existentes en?Andaluc¨ªa, Catalunya, Extremadura? y? Europa. Hay m¨¢s, como el del software libre gallego.? Siempre, claro est¨¢, que quienes aprovechen las creaciones ajenas mantengan en las suyas los cuatro principios b¨¢sicos del software de fuentes abiertas: uso, copia, modificaci¨®n y libre distribuci¨®n. ¡°Ser autocr¨¢tico ya no es ¨²til, lo importante es la colaboraci¨®n¡±, asegura Elena P¨¦rez Barredo, viceconsejera vasca de Administraci¨®n P¨²blica. Cuando se publique el decreto, faltan dos informes en su tramitaci¨®n, el sector p¨²blico estar¨¢ tambi¨¦n ¡°obligado a ver y coger del directorio las soluciones, totales o parciales, que hay disponibles para adaptarlas a sus necesidades¡±.

Y si no van a aprovechar nada o pretenden crear un nuevo programa, ¡°deber¨¢n argumentar por qu¨¦ no lo hacen o qu¨¦ tiene de especial ese software. De forma p¨²blica y transparente en el mismo directorio de programas, porque si nos gastamos el poco dinero que tenemos en un nuevo, dejamos de invertir en aquello que ya existe¡±. Las nuevas aplicaciones, adem¨¢s, incluir¨¢n las descripciones ¡°funcional y de la arquitectura modular¡± y las medidas tomadas para ¡°facilitar su reutilizaci¨®n¡±, incluyendo las fechas en que se prev¨¦ su liberaci¨®n.

"Los organismos deber¨¢n aprovechar las soluciones, totales o parciales, que ya hay disponibles para adaptarlas a sus necesidades¡±

Las ¨²nicas excepciones a la obligaci¨®n de apertura ¡°que no a la de reutilizaci¨®n¡±, matiza P¨¦rez Barredo, son los programas que afecten a la seguridad o sean de ¡°los pocos casos¡± de colaboraciones p¨²blico privada. Por ejemplo, cuando una fundaci¨®n hospitalaria crea conjuntamente con las empresas programas para mejorar la calidad de vida de los pacientes cr¨®nicos. El objetivo es proteger la innovaci¨®n y desarrollo (I+D+I) y permitir el retorno de la inversi¨®n. En aras de la transparencia, en ambos casos los responsables no se librar¨¢n de argumentar p¨²blicamente por qu¨¦ afectan sus programas a la seguridad y al I+D+I.

El Gobierno vasco no se atreve a cifrar el ahorro que supondr¨¢ abrir y reaprovechar el software de su propiedad, pero ¡°si evitamos duplicaciones, si no derrochamos en soluciones que no aportan valor a?adido y si adem¨¢s lo compartimos, ahorraremos seguro¡±. El Ayuntamiento de M¨²nich (Alemania), que hace a?os opt¨® por un modelo similar basado en fuentes abiertas, ha dejado de gastar un tercio de su presupuesto tecnol¨®gico, unos 4 millones de euros.

"Si nos gastamos el poco dinero que tenemos en un nuevo programa, dejamos de invertir en aquello que ya existe¡±.

¡°Andaluc¨ªa hizo un gran primer paso y ahora Euskadi da el segundo, porque es la primera comunidad que desarrolla el Real Decreto 4/2010, que establec¨ªa las condiciones no solo de la puesta a disposici¨®n p¨²blica sino de la reutilizaci¨®n de las aplicaciones¡±, explica Jaque. El organismo que dirige ha participado en la redacci¨®n del decreto, al igual que los 90 organismos de la administraci¨®n vasca y las empresas tecnol¨®gicas. En su opini¨®n, lo mas llamativo de la iniciativa es ¡°la transparencia: "La ciudadan¨ªa podr¨¢ fiscalizar que hacen las administraciones con el dinero destinado a las TIC, porque las decisiones que se tomen ser¨¢n p¨²blicas.?

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