Sony ficha a J. K. Rowling para hacer libros interactivos
El mando es la referencia espacial a partir del patr¨®n se?alado en el libro. Lo que aparece en pantalla depende de su movimiento
Sony tiene claro lo que quieren los asistentes a la feria E3. Al igual que hizo Microsoft en la ma?ana del lunes, se centr¨® en los jugadores m¨¢s empedernidos, en los amantes del realismo extremo y las sensaciones fuertes.
La cita fue en el mismo lugar en que se disputaron los Juegos Ol¨ªmpicos de 1932 y 1984. Los gritos de los fan¨¢ticos es posible que fueran similares. Resulta curioso ver c¨®mo hace solo un a?o tanto Sony como Microsoft apostaban por abrir la experiencia de juego al p¨²blico femenino y a los m¨¢s j¨®venes. A falta de que Nintendo desvele esta madrugada (hora espa?ola) los secretos de la consola Wii U, este parece que ser¨¢ un E3 de software, de grandes t¨ªtulos, muchos de ellos repeticiones de f¨®rmulas ya conocidas.
Destacaron, por encima del resto, por su calidad visual y la intenci¨®n emotiva, Beyond, un juego que ha salido del mismo estudio que Heavy Rain, m¨¢s cercano al cine que a lo que se suele ver en el ocio interactivo, y The Last of Us, de los creadores de Uncharted 3
No fue lo m¨¢s aplaudido, pero s¨ª lo m¨¢s innovador de toda la propuesta presentada por Sony para el pr¨®ximo a?o: una mezcla de libros, interacci¨®n y realidad aumentada llamados Wonderbooks. Siguiendo la estela del mando con sensor de movimiento de Wii, Sony cre¨® Move. Despu¨¦s de diferentes usos m¨¢s o menos acertados, los Wonderbooks parecen una propuesta lo suficientemente innovadora como para atraer a los desarrolladores.
No fue lo m¨¢s aplaudido, pero s¨ª lo m¨¢s innovador de toda la propuesta presentada por Sony: una mezcla de libros, interacci¨®n y realidad aumentada llamada Wonderbooks
En esencia lo que hace es poner un libro en manos del jugador, preferentemente ni?os. A trav¨¦s del mando ven en pantalla los contenidos: t¨ªteres, textos, la explicaci¨®n a c¨®mo sale el magma en el volc¨¢n. Es decir, el mando toma la referencia espacial a partir de los patrones se?alados en el libro, as¨ª puede saber qu¨¦ contenido debe aparecer en pantalla seg¨²n el movimiento del mando.
J. K. Rowling, autora de la saga de Harry Potter, estrenar¨¢ el primero: El Libro de los Hechizos. No aparece el mago m¨¢s c¨¦lebre de Hogwarts, pero s¨ª un mundo m¨¢gico inspirado en ¨¦l. P¨¢gina a p¨¢gina, con movimientos de Move se desgranan los conjuros y f¨®rmulas adecuadas al tiempo que se alienta a leer a los m¨¢s j¨®venes.
Despu¨¦s, llegar¨¢n los libros digitales o maravillosos, seg¨²n el entusiasmo que se le ponga a la traducci¨®n, de Moonbot Studios, una empresa hasta ahora especializada en contenidos para tabletas con la que Sony se ha aliado para este primer viaje de exploraci¨®n narrativa. Queda por saber de d¨®nde sale el contenido, si ser¨¢n discos en formato f¨ªsico o solo por descarga a trav¨¦s de la tienda online. Lo ideal ser¨ªa que este viaje por el mundo transmedia, palabra de moda, contase con compa?eros locales en cada pa¨ªs para poder dar un tono did¨¢ctico y cultural m¨¢s acorde. En noviembre comenzar¨¢ a venderse.
Integraci¨®n es otra de las palabras que m¨¢s se repiten y que tiene m¨²ltiples interpretaciones. Para Sony es la posibilidad de jugar un mismo juego tanto en su port¨¢til, Vita, como en la PS3 de sobremesa. All Stars Battle Royale, un juego con la misma din¨¢mica que el ya cl¨¢sico Street Fighter, permitir¨¢ sumar hasta ocho jugadores metidos en la piel de los cl¨¢sicos personajes de la casa, ya sea con un mando de consola o con la Vita.
Al mismo tiempo, tambi¨¦n es integraci¨®n la suma de un aliado. HTC ser¨¢ el primer fabricante de m¨®viles que contar¨¢ con el certificado PlayStation para sus terminales. Una manera de promover los juegos de calidad, en muchos casos viejos conocidos de la primera PlayStation en la peque?a pantalla.
No hubo gui?os a la m¨²sica, ni al fitness, ni a los peque?os, tampoco al p¨²blico femenino. En este E3 parece que todo el mundo quiere agradar al consumidor de siempre, al que no falla, y se opta por dejar de lado al jugador eventual o el otrora goloso pastel del ocio familiar, m¨¢s all¨¢ de las propuestas de m¨²sica y cine.
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