Digg, vendida por 500.000 d¨®lares cuatro a?os despu¨¦s de rechazar 200 millones
El agregador m¨¢s popular rechaz¨® en 2008 una oferta de Google por 200 millones No supo adaptarse a los tiempos
Betaworks, empresa especializada en redes sociales, conocida por crear el acortador de direcciones bit.ly, ha comprado Digg, el agregador que sirvi¨® de modelo, el pie para todos los clones que se crearon posteriormente, tanto por temas como por idiomas y pa¨ªses. The Wall Street Journal estima la operaci¨®n en 409.000 euros (medio mill¨®n de d¨®lares).
Digg, excavar en ingl¨¦s, consigui¨® que su icono gris, con un mu?eco pixelado y su pala, estuviera al pie de todos los medios digitales, blogs de moda y p¨¢ginas de contenido potencialmente viral. Aparecer en la portada era una garant¨ªa de explosi¨®n de tr¨¢fico.
El uso de este servicio no pod¨ªa ser m¨¢s sencillo. Tras darse de alta, bastaba con proponer un t¨ªtulo, una entradilla y a?adir un enlace. A partir de ah¨ª pasaba a manos de la comunidad, con sus votos a favor y en contra iba escalando posiciones dentro de Digg hasta, en el mejor de los casos, alcanzar la portada. Debajo de cada enlace, en los buenos, se generaba un hilo de comentarios cuya aparici¨®n tambi¨¦n estaba ponderaba seg¨²n la participaci¨®n de cada usuario. As¨ª, se incentivaba a los fieles, a los que aportaban y participaban.
Sin embargo, la falta de innovaci¨®n y, sobre todo, el cambio en la ponderaci¨®n de los votos, les hizo perder confianza. A esto hay que sumar la llegada de Twitter y Facebook, dos lugares que, entre otras muchas virtudes, comparten enlaces, los recomiendan y tienen un fuerte factor social y de conexi¨®n con la comunidad.
En el a?o 2009 su n¨²mero de visitantes en EE UU era cinco veces mayor que el pasado junio
En 2008 Google ofreci¨® hasta 200 milones de d¨®lares por esta web con la intenci¨®n de mejorar el funcionamiento de Google News. A primeros de 2012 sufrieron un ¨¦xodo en la parte t¨¦cnica, pues 15 de sus ingenieros ficharon por el Washington Post. Parad¨®jico, pasaban de estar en un escaparate online de contenidos varios, a trabajar para un viejo lugar de papel, donde nacen las historias, noticias y reportajes. Poco despu¨¦s, en mayo, su fundador, Kevin Rose, pas¨® a formar parte de Google+, el nuevo intento de red social del buscador.
Matt Williams, actual consejero delegado, ha sido el encargado de anunciar la venta. En el comunicado, explica que John Borthwick, tambi¨¦n cofundador, asumir¨¢ su cargo. En un intento por reflotarse, el agregador insiste en que pronto saldr¨¢ una aplicaci¨®n para iPhone e iPad, y una mejor integraci¨®n con Twitter y Facebook. Una medida interesante, pero que tendr¨ªa que haber llegado de manera natural, antes. De hecho, no ser¨¢ una aplicaci¨®n independiente, sino que encajar¨¢ con news.me, otro servicio de selecci¨®n de noticias creador por Betaworks, los nuevos due?os.
En sus siete a?os de vida pas¨® de ser el m¨¢ximo exponente de la web 2.0, la colaboraci¨®n en Internet y los contenidos sociales, a venderse por la d¨¦cima parte de las inversiones hechas en el proyecto. En junio el tr¨¢fico de Digg en Estados Unidos fue de 2,7 millones de usuarios ¨²nicos. En 2009 la cifra era de 14 millones.
En Espa?a surgieron dos imitaciones, Fresqui, enterrado; y Men¨¦ame, que con una floreciente comunidad mantiene su papel de referencia en temas que causan impacto en la Red, ya sean curiosidades o noticias de gran calado. Supo partir del modelo Digg para tener una personalidad propia y una comunidad fiel.
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