Busco piratas inform¨¢ticos, firmado Ej¨¦rcito EE UU

Este oto?o, 16 institutos de California iniciaron unos talleres experimentales financiados por el Gobierno de Estados Unidos. A lo largo de los tres pr¨®ximos a?os, est¨¢ previsto que el programa, de 10 millones de d¨®lares, se ampl¨ªe a 1.000 institutos, tomando como modelo el creciente fen¨®meno de los ¡°espacios para piratas inform¨¢ticos¡±, que son clubes comunitarios donde los hackers se re¨²nen para fabricar, inventar o desmontar cosas.

Pero este uso de fondos p¨²blicos ha provocado cierta controversia. La financiaci¨®n para el programa escolar es una de las recientes subvenciones que la Agencia para Proyectos de Investigaci¨®n Avanzada de Defensa, o DARPA por sus siglas en ingl¨¦s, ha creado para estrechar v¨ªnculos con los piratas inform¨¢ticos.

A diferencia de quienes inutilizan sitios web y roban datos, la gente con la que trabajan el Gobierno son la mayor¨ªa de las veces profesionales de la inform¨¢tica que buscan satisfacer su curiosidad. Pero la financiaci¨®n ha desatado cr¨ªticas porque el dinero militar podr¨ªa apropiarse de estos talleres ahora que empiezan a expandirse con rapidez.

Existen cerca de 200 espacios para piratas inform¨¢ticos en Estados Unidos, un aumento considerable ya que hace cinco a?os solo exist¨ªa un peque?o grupo. Los talleres, con nombres como F¨¢brica de Piratas Inform¨¢ticos, Renacimiento de Rompecabezas y Academia de Artes Marciales de los Piratas Inform¨¢ticos, han dado lugar a empresas pr¨®speras como el sitio de redes sociales Pinterest, y se consideran buenos lugares para contratar a ingenieros y cient¨ªficos inform¨¢ticos.

¡°De estos lugares sale magia¡±, asegura Peiter Zatko, que acude a estos talleres en busca de ideas para la seguridad cibern¨¦tica

¡°De estos lugares sale magia¡±, asegura Peiter Zatko, director de programa de DARPA, que acude a estos talleres en busca de ideas para la seguridad cibern¨¦tica. Su programa ha firmado 74 contratos, y se han finalizado cerca de 40 proyectos; un trabajo que, seg¨²n recuerda, la burocracia tradicional habr¨ªa bloqueado.

Muchos opinan que los espacios para piratas inform¨¢ticos son incubadoras de innovaci¨®n y que deber¨ªan fomentarse. Sin embargo, no todo el mundo est¨¢ de acuerdo con que el papel que el Departamento de Defensa desempe?a.

¡°El hecho de tener estos programas en los colegios es fant¨¢stico, pero no creo que sea positivo que los militares se encarguen de la educaci¨®n estadounidense¡±, se?ala Mitch Altman, quien, en una entrada en Internet, fue de los primeros que adopt¨® una actitud contraria al programa.

La controversia dio lugar a una tensa sesi¨®n en la conferencia de Piratas Inform¨¢ticos en el Planeta Tierra celebrada este verano en Nueva York, donde se reunieron los destinatarios de la financiaci¨®n de DARPA y sus cr¨ªticos.

¡°Si cultivas apio en agua roja, ser¨¢ rojo¡±, dec¨ªa Sean Auriti, conocido como Psytek en el espacio para piratas inform¨¢ticos Alpha One Labs en Brooklyn, que dirige. ¡°Me pregunto c¨®mo va a influir el dinero para contratos de defensa de DARPA en estos proyectos¡±.

El propio Auriti se beneficia del dinero del organismo como miembro de SpaceGambit, un consorcio que obtuvo una subvenci¨®n de 500.000 d¨®lares para la exploraci¨®n espacial y las tecnolog¨ªas de colonizaci¨®n. Pero se?ala que el debate sobre la financiaci¨®n le ha llevado a crear un grupo de trabajo separado de DARPA.

El organismo es famoso por realizar apuestas con muy pocas posibilidades de ¨¦xito y esperar que algunas de ellas den resultados. Financi¨® el desarrollo de tecnolog¨ªas que condujeron a la creaci¨®n de Internet, del GPS y de la tecnolog¨ªa para aviones y barcos furtivos. Este grupo de apuestas por la fabricaci¨®n innovadora y de bajo coste forma parte de una estrategia de los directivos de DARPA para reducir el tiempo de desarrollo en diversos proyectos como la construcci¨®n de veh¨ªculos acorazados y soluciones para la seguridad cibern¨¦tica.

Matt Joyce, miembro de los primeros espacios para piratas, que ha trabajado con la NASA y manifestado p¨²blicamente su apoyo a la financiaci¨®n de DARPA, reconoce que este asunto seguir¨¢ siendo motivo de debate porque las dudas ¨¦ticas suelen perseguir a los ingenieros, incluso en casos en los que el Gobierno les permite mantener los derechos sobre sus inventos. ¡°Cuando fabricas algo, nunca sabes d¨®nde puede acabar¡±, se?ala. ¡°Creo que hay mucha gente recibiendo la financiaci¨®n de DARPA, y mucha otra observando desde el margen para ver qu¨¦ sucede¡±.