La ¡®app¡¯ para reconocer canciones supera ya los 5 millones de usuarios

?Hay alguien capaz de acertar, con tan solo escuchar unos segundos de su melod¨ªa, el t¨ªtulo, artista y ¨¢lbum de cualquier canci¨®n entre 30 millones? Si Google acab¨® con los eruditos, Shazam ha extinguido a los enterados. Al menos, a los del ¨¢mbito de la m¨²sica. La aplicaci¨®n que reconoce autom¨¢ticamente qu¨¦ pieza estamos escuchando se ha convertido una de las m¨¢s populares en el mundo. Seg¨²n los analistas de ComScore, en 2014 se situ¨® la primera de su g¨¦nero y en un honroso puesto n¨²mero 15 en la clasificaci¨®n?total, compitiendo con apps?generalistas como Google Maps o Facebook.

En Espa?a ya la usan cinco millones y medio de personas cada mes, y gestos como el de acercar el m¨®vil al televisor para adivinar qu¨¦ melod¨ªa embellece un anuncio o al altavoz de un pub para identificar la ¨²ltima modernez se repiten m¨¢s de un mill¨®n de veces al d¨ªa.?

Son las cifras que acaba de presentar el director de la compa?¨ªa para medio mundo ¡ª"todo excepto para Norteam¨¦rica y Extremo Oriente"¡ª, Josh Partridge, que ha visitado Madrid para alabar, de paso, las bondades del mercado espa?ol: "Espa?a es uno de los lugares que m¨¢s y mejor han adoptado Shazam, es un pa¨ªs de early adopters [en la jerga, los clientes impacientes que adquieren antes que nadie una tecnolog¨ªa]". La variedad de contenidos en espa?ol que ofrece la aplicaci¨®n y, sobre todo, la adopci¨®n generalizada?de smartphones han permitido que 29 millones de usuarios hayan descargado en alg¨²n momento la aplicaci¨®n en Espa?a.?

La aplicaci¨®n cuenta con un equipo de 'exploradores'?que asisten a grandes acontecimientos musicales y rastrean las redes sociales para identificar tendencias musicales de todo tipo

?C¨®mo funciona Shazam? Una persona esperar¨ªa a escuchar las primeras notas o al estribillo para agarrarse a la letra. La aplicaci¨®n no lo necesita. Su algoritmo convierte diversos patrones sonoros de la pieza en una identificaci¨®n ¨²nica para ella ¡ªsu huella digital¡ª y busca en sus 30 millones de fichas policiales?a qu¨¦ sujeto (qu¨¦ canci¨®n) se corresponde. Para estar al d¨ªa y no perderse ning¨²n ¨¦xito del momento, la discoteca crece diariamente con la "ingesti¨®n" ¡ªabst¨¦nganse exquisitos: ese es el t¨¦rmino que emplea la compa?¨ªa¡ª de nuevas canciones que reciben casi en primicia de los sellos discogr¨¢ficos. ?

No es, por tanto, la complejidad de la canci¨®n el motivo de que a veces tarde m¨¢s en reconocer una canci¨®n que otra. "Eso solo depende de la calidad de conexi¨®n del m¨®vil, y no de la canci¨®n en s¨ª. Lo curioso es que mucha gente lo usa en pubs o bares donde escasea la cobertura, pero Shazam memoriza la pieza y manda la se?al tan pronto se recupera la red".

En la sede de la empresa en Londres se espolean unos a otros para aumentar la capacidad de su base de datos e ingerir m¨¢s y m¨¢s canciones, m¨¢s y m¨¢s r¨¢pido. "Para ello, trabajamos codo con codo con las compa?¨ªas de discos". Pero Partridge asegura, cuando se le pregunta al respecto, que no solo incluyen las canciones comerciales en su cat¨¢logo: "Shazam tiene un equipo de exploradores?que asisten a grandes acontecimientos musicales y rastrean las redes sociales para identificar las tendencias, de todo tipo". Tampoco el pop o el rock son los g¨¦neros exclusivos, aunque s¨ª mayoritarios, de la base de Shazam: "Tenemos mucha m¨²sica cl¨¢sica. De hecho, estamos ingiriendo discos de vinilo con grabaciones raras y descatalogadas", presume Partridge, un enamorado de la ¨®pera.?

La aplicaci¨®n permite a cualquier usuario saber en tiempo real qu¨¦ canciones est¨¢n siendo m¨¢s solicitadas a Shazam en su ciudad. En el momento en que se realiza la entrevista, en Madrid triunfa?Are you with me?, de Low Frequencies, que, por cierto, nadie en la habitaci¨®n donde se realiza la entrevista conoce. "La informaci¨®n geolocalizada puede llegar ser muy espec¨ªfica y resulta especialmente ¨²til para las compa?¨ªas, que pueden detectar con antelaci¨®n que artistas van a tener m¨¢s tir¨®n en los pr¨®ximos meses y reorientar sus campa?as de promoci¨®n".?

Shazam lanz¨® su primer servicio en 2002: el interesado llamaba a un n¨²mero, hac¨ªa escuchar su canci¨®n durante 30 segundos y, al cabo, recib¨ªa un sms con el t¨ªtulo y el autor

?Vuelve a mencionar a las compa?¨ªas? ?Y los artistas independientes? "Tenemos programas para ellos, desde luego que s¨ª. Contactan con nosotros muchos de ellos, que nos mandan directamente sus canciones a nuestra web". Al poco, quedan oficialmente ingeridas por la base de datos.

Cuando la empresa naci¨® los tel¨¦fonos a¨²n eran menos inteligentes que sus usuarios y resultaba moderno molestar al respetable con un politono. Shazam lanz¨® su primer servicio en 2002, en Reino Unido: el interesado llamaba al n¨²mero 2580, hac¨ªa escuchar su canci¨®n durante 30 segundos al tel¨¦fono y, al cabo, recib¨ªa un sms con el t¨ªtulo y el autor. M¨¢s adelante, el texto plano del mensaje se convirti¨® en un link a la web, hasta que en 2008, con el nacimiento del App Store de Apple, lleg¨® la aplicaci¨®n. Hoy, a pesar de valer ya m¨¢s de 1.000 millones de d¨®lares [918 millones de euros], Shazam sigue consider¨¢ndose a s¨ª misma una start-up.

Entre sus ¨²ltimas innovaciones se encuentran el lanzamiento de su app para el iWatch y su asociaci¨®n con Google Now ¡ªy antes con la asistente Siri, de Apple¡ª para que no sea necesario abrir espec¨ªficamente la aplicaci¨®n cuando el usuario quiere reconocer una canci¨®n. Tambi¨¦n permitir¨¢ que el m¨®vil est¨¦ alerta a cualquier canci¨®n que perciba, aunque la aplicaci¨®n no est¨¦ cargada, para evitar la desagradable experiencia de lograr conectarla justo cuando la canci¨®n est¨¢ terminando y no da tiempo a que la reconozca.

Pensando en su futuro, Shazam a?ade a su o¨ªdo de t¨ªsico el ojo de lince: acaba de presentar en Espa?a una utilidad que permite reconocer determinadas im¨¢genes con la c¨¢mara del m¨®vil, algo parecido a los c¨®digos QR, pero m¨¢s discreto. Previo acuerdo con las compa?¨ªas interesadas, Shazam imprime su huella digital en soportes publicitarios o carteles de cine, y el tel¨¦fono la detecta y remite al usuario a una web. El futuro apunta a que ese reconocimiento de im¨¢genes no necesite esa huella previa. "Lo visual es lo m¨¢s dif¨ªcil de reconocer, sobre todo si est¨¢ en movimiento", afirma Partridge, que en toda la entrevista no ha dejado de usar el neologismo "to shazam", para referirse al uso de la aplicaci¨®n. Seg¨²n la nota de prensa de la compa?¨ªa, en Espa?a se ha extendido el uso de shazanear como traducci¨®n del ingl¨¦s, como googlear o wasapear. Ojo, lo escriben con ene.