Exiliados de las redes sociales
Unas relaciones m¨¢s superficiales o la p¨¦rdida de intimidad son algunas de las razones por las que una minor¨ªa desanda un camino que parec¨ªa irreversible
Borja L¨®pez, de 29 a?os, abandon¨® hace dos a?os las redes sociales. "Estar en Facebook me ataba a una vida irreal", asegura. Sus palabras bien podr¨ªa suscribirlas Essena O?Neill, la modelo australiana de 19 a?os, que revolucionaba la semana pasada la red al anunciar que cerraba su cuenta en Instagram donde ten¨ªa m¨¢s de 574.000 seguidores. En un momento en el que todo el mundo vuelca su vida en las redes sociales, algunos salen de ellas. No son pocos, aunque no hay datos espec¨ªficos. ?Hay vida m¨¢s all¨¢ de los likes?
Espa?a cuenta con 14 millones de usuarios de redes sociales, seg¨²n IAB Spain, la asociaci¨®n que representa al sector de la publicidad en medios digitales. El 82% de la poblaci¨®n con acceso a internet entre los 18 y 55 a?os est¨¢ presente en ellas (en 2009 apenas alcanzaba el 51%). En los ¨²ltimos tres a?os se ha incrementado a tres el n¨²mero de plataformas que usa cada usuario. Son m¨¢s y est¨¢n en m¨¢s sitios, pero la presencia en redes sociales no va con todo el mundo. El 9,6% de los j¨®venes entre 15 y 29 a?os, seg¨²n datos del Instituto de la Juventud (Injuve), no usa ninguna red social. Unas relaciones m¨¢s superficiales o la p¨¦rdida de intimidad son algunas de las razones por las que una minor¨ªa desanda un camino que parec¨ªa irreversible.
¡°Llevaba un tiempo m¨¢s atento a Facebook que a disfrutar del d¨ªa a d¨ªa. Ten¨ªa como amigos a mucha gente con la que no ten¨ªa una relaci¨®n en la vida real¡±, cuenta L¨®pez, restaurador de pintura mural. Mar¨ªa Morillo, abogada de 30 a?os, elimin¨® todas sus cuentas hace menos de un a?o: ¡°Quedaba con amigos y no ten¨ªamos nada de qu¨¦ hablar. Parece que estamos m¨¢s cerca, pero realmente nos aleja¡±.
Las redes sociales han modificado el paradigma de las relaciones personales. Permiten acercar a quien est¨¢ lejos y facilita la comunicaci¨®n, pero los expertos consultados advierten que un mal uso puede producir un efecto de aislamiento emocional. Se est¨¢ conectado con m¨¢s gente, pero de una forma m¨¢s artificial.
Morillo asegura que perd¨ªa mucho tiempo cuidando sus perfiles. "Un tiempo que ahora puedo utilizar mejor quedando con un amiga para tomar un caf¨¦", reconoce. La comunicaci¨®n digital tiene innegables limitaciones: requiere que toda la informaci¨®n se traduzca en representaciones abstractas (emoticonos, im¨¢genes, en lenguaje escrito). Por eso, se puede estar muy conectado y muy solo al mismo tiempo. ¡°Pueden ser ¨²tiles para dar continuidad puntual a una relaci¨®n que existe y se cultiva en nuestra vida cotidiana, y no al rev¨¦s¡±, opina Alicia L¨®pez de Fez, directora del Centro de Psicolog¨ªa L¨®pez de Fez, especializado en el tratamiento de estas adicciones.
Desconexi¨®n de la vida real
Asier Rua, fot¨®grafo de 31 a?os, cuenta que el Whatsapp le quitaba concentraci¨®n en todo lo que hac¨ªa: ¡°Era incapaz de recibir un mensaje y no contestar¡±. Despu¨¦s de casi un a?o sin la aplicaci¨®n no la echa de menos. ¡°S¨ª que ocurre que gente no tan cercana no sabe que me lo he quitado¡±, reconoce. Hace poco se enter¨® de que un amigo hab¨ªa tenido un hijo cuando se los encontr¨® por la calle. La foto que este le mand¨® d¨¢ndole la noticia nunca lleg¨®. Espa?a es el cuarto pa¨ªs del mundo (primero de Europa) en el uso de esta aplicaci¨®n, seg¨²n el informe Telco Trends for 2015+ elaborado por Strategy&, la consultora estrat¨¦gica de PwC. Los especialistas alertan de que este tipo de conductas, como no poder hablar con otras personas sin dejar de consultar el m¨®vil, supone una forma de desconexi¨®n de la vida real que revela una adicci¨®n.
Javier de Rivera, soci¨®logo experto en nuevas tecnolog¨ªas, explica que dejar de relacionarnos cara a cara obliga a construir un producto cultural que representa quienes somos y c¨®mo nos relacionamos con los dem¨¢s. ¡°Tenemos que construir un mensaje. Eso genera un trastoque en la din¨¢mica social y un estr¨¦s para algunas personas¡±, asegura.
¡°Ten¨ªa ansiedad por sacar la foto perfecta en cada sitio que visitaba. Estaba de vacaciones y mi felicidad depend¨ªa de recibir m¨¢s o menos likes", admite Morillo. Estos comportamientos tienen su explicaci¨®n; a diferencia de los refuerzos positivos naturales que var¨ªan dependiendo de qui¨¦n, c¨®mo y en qu¨¦ circunstancia se produzca, los refuerzos positivos en las redes son cuantificables y f¨¢cilmente medibles. Para mucha gente acaba suponiendo un estr¨¦s tener que seguir alimentando esa maquinaria. ¡°Hay personas que llegan a la conclusi¨®n de que no les compensa¡±, asegura de Rivera, cuya tesis versa sobre socializaci¨®n tecnol¨®gica. La gesti¨®n de la vida social pasa a ser una responsabilidad y una obligaci¨®n m¨¢s.
Una de cada tres personas se siente peor y m¨¢s insatisfecha con su vida tras visitar los perfiles de sus contactos, seg¨²n concluye el estudio?Envy on Facebook: A Hidden Threat to Users' Life Satisfaction? elaborado por la Universidad de Darmstadt (Alemania). Las fotos de las vacaciones, las interacciones o los comentarios recibidos en las fotos, son las que m¨¢s resentimiento generan. La presencia en las redes se ha convertido en una suerte de competici¨®n social. ¡°Ves los perfiles de tus contactos, que suben fotos en una ciudad o en una viaje, y sientes una cierta envidia sana. Piensas, joder que vida m¨¢s interesante comparada con la m¨ªa¡±, reconoce L¨®pez.
Seg¨²n el estudio?J¨®venes y comunicaci¨®n. La impronta de lo virtual elaborado por el Centro Reina Sof¨ªa sobre Adolescencia y Juventud, el 5,5% de los j¨®venes espa?oles entre 16 y 24 a?os est¨¢ en riesgo de exclusi¨®n social al no utilizar las redes sociales de forma habitual. Son los adolescentes calificados de ¡°excluidos digitales¡±. Las conclusiones reflejan que sin estas herramientas, los j¨®venes se sentir¨ªan ¡°aislados, incomunicados, incompletos y no sabr¨ªan como rellenar rutinas, integrarse o socializar¡±. Borja L¨®pez no est¨¢ de acuerdo: ¡°Entre los grupos de Whatsapp y que mis amigos saben que no tengo Facebook, me entero de todos los planes. Estoy mejor as¨ª¡±.
Eliminar o desactivar
Eliminar una cuenta en una red social es hoy m¨¢s f¨¢cil que nunca, pero algunas, como Twitter, requieren que previamente se ¡°desactive¡± y transcurran 30 d¨ªas para completar el tr¨¢mite.
Facebook advierte en sus t¨¦rminos de privacidad que hay informaci¨®n que nunca ser¨¢ eliminada como el contenido del chat o los mensajes de grupo.
Existen, sin embargo, plataformas que siguen poniendo trabas. Yotube, por ejemplo, impide borrar la cuenta sin eliminar a la vez el contenido de Google.
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