Arianna Huffington anuncia su salida de ¡®The Huffington Post¡¯

¡°Esperaba poder seguir liderando HuffPost mientras constru¨ªa Thrive Global, pero cada vez veo m¨¢s claro que era solo una ilusi¨®n¡±, afirma Huffington en comunicado. ¡°Uno de los principios de Thrive es saber cu¨¢ndo es el momento de empezar un nuevo cap¨ªtulo y para m¨ª ese momento ha llegado¡±.

The Huffington Post es la publicaci¨®n imprescindible para entender el cambio que han atravesado los medios de comunicaci¨®n en la ¨²ltima d¨¦cada. Este digital naci¨® en 2005, cuando grandes publicaciones como The New York Times o The Washington Post contaban con una amplia trayectoria en la web, pero tardaron poco tiempo en preguntarse qu¨¦ estaba haciendo bien Huffington para pisarles los talones en el n¨²mero de visitas a sus p¨¢ginas. Apenas seis a?os despu¨¦s de nacer era adquirido por el gigante AOL por un valor de 315 millones de d¨®lares y a los pocos meses, en 2012, entraba en la lista de ganadores del Pulitzer.

La visionaria Huffington, veterana comentarista de televisi¨®n y autora de 13 libros, cree que ¡°comunicar es el nuevo entretenimiento de la gente¡±, como declar¨® a EL PA?S, y su publicaci¨®n se basaba en un pilar b¨¢sico: las ganas de compartir informaci¨®n. Miles de blogueros ced¨ªan su contenido a las p¨¢ginas del Huffington Post para alcanzar una mayor audiencia mientras la publicaci¨®n invert¨ªa en agregar noticias relevantes de otros medios estadounidenses.

La osad¨ªa no estuvo exenta de pol¨¦mica, pero funcion¨®. Los titulares en may¨²sculas, se?a de identidad del HuffPost, irrumpieron particularmente en la escena pol¨ªtica con la cobertura de la campa?a electoral de 2008, la primera en la que Internet jug¨® un gran papel. Ah¨ª el digital estaba mejor posicionado que ninguna otra cabecera y pudo competir con los grandes que, como retrat¨® Jeff Jarvis en ¡°?Qui¨¦n tiene miedo a Arianna Huffington?¡±, criticaban su estrategia como agregador mientras se preguntaban por qu¨¦ acumulaba tanto ¨¦xito.

En 2011, semanas despu¨¦s de que fuera adquirido por AOL, The Huffington Post se enfrent¨® a una demanda colectiva de varios de los columnistas que hab¨ªan publicado contenido bajo su marca. Los demandantes exig¨ªan una compensaci¨®n econ¨®mica alegando que el digital se hab¨ªa lucrado con su material y que ellos no iban a ser remunerados en el proceso de venta. El juez, sin embargo, dio la raz¨®n al medio y tumb¨® la demanda.

Hoy The Huffington Post es una marca global, con ediciones en 14 pa¨ªses y suma m¨¢s de 100 millones de usuarios solo en Estados Unidos. La versi¨®n espa?ola fue lanzada en 2012 en colaboraci¨®n con EL PA?S, donde Arianna Huffington es actualmente consejera. Tambi¨¦n form¨® parte del consejo de PRISA, grupo editor del diario.

En 2012, The Huffington Post se convirti¨® adem¨¢s en el segundo digital en lograr un premio Pulitzer gracias a la serie M¨¢s all¨¢ del campo de batalla, un reportaje sobre la reinserci¨®n de los veteranos de guerra en la sociedad estadounidense.

Sus cofundadores son figuras imprescindibles en el sistema de medios estadounidenses. Jonah Peretti dej¨® el proyecto de Huffington, uno de los primeros en explotar la viralidad de los contenidos en Internet, para crear BuzzFeed, la publicaci¨®n que ha consolidado esta tendencia. Kenneth Lerer, por su parte, es uno de los inversores detr¨¢s de la nueva iniciativa de Huffington como lo ha sido antes de numerosas start-ups.

Huffington firm¨® un contrato en 2015 por el que seguir¨ªa liderando la cabecera cuatro a?os m¨¢s, pero ten¨ªa la puerta abierta para crear su nuevo proyecto. Su situaci¨®n era a¨²n m¨¢s incierta desde que Verizon adquiriera AOL, compa?¨ªa a la que pertenece el Huffington Post, por 4.400 millones de d¨®lares. Este jueves, Huffington puso fin a la incertidumbre al afirmar que ¡°ha sido una decisi¨®n dif¨ªcil pero tambi¨¦n inevitable, dado mi compromiso para convertir Thrive en una compa?¨ªa de impacto global¡±.