¡°La democracia necesita a h¨¦roes como Snowden¡±
Richard Stallman afirma que no apoya formalmente a ning¨²n partido pol¨ªtico, pero reconoce que simpatiza con Podemos
Richard Stallman (Nueva York, 1953), guardi¨¢n de las esencias del software libre, habla de pol¨ªtica y advierte de que la victoria de Donald Trump en las elecciones de EE UU puede aumentar el peligro sobre la seguridad inform¨¢tica en el mundo. Admite su "simpat¨ªa" por Podemos y se declara una persona de izquierdas, con ideas anarquistas y "un poco" capitalista. As¨ª se define en esta entrevista antes de ofrecer este mi¨¦rcoles una charla invitado por la capitalidad cultural europea San Sebasti¨¢n 2016.
Pregunta. ?Qu¨¦ ventajas conlleva usar software libre frente a sistemas privativos?
Respuesta. Un programa privativo somete a los usuarios al poder de su propietario, lo cual es una injusticia. Para mantener nuestra libertad, tenemos que rechazar el software privativo, cueste lo que cueste. Los asuntos de comodidad, las ventajas, son secundarios comparados con el asunto principal de tratarnos justamente, de no someternos. Se ve en otros campos de la vida el peligro de que las empresas tengan poder sobre la gente. Pero en este campo, casi todos son excusas para cerrar los ojos al peligro de la injusticia.
P. ?Funciona mejor el software libre que el privativo?
R. El software libre permite que cualquier tipo de usuario puede desarrollar su propia versi¨®n modificada. Ofrece a los usuarios el control del programa, de su inform¨¢tica. Cuando no tienen ese control est¨¢n indefensos ante el poder del propietario. Las empresas de software privativo suelen poner cualquier cosa mal¨¦vola sabiendo que los usuarios no podr¨¢n eliminarlo. En uno libre, se pueden eliminar los elementos mal¨¦volos. En mi comunidad, cada contribuyente reconoce que no tiene poder sobre los usuarios. Si se pusiera algo mal¨¦volo habr¨ªa enseguida una versi¨®n corregida que la remplazar¨ªa. No tengo el poder de imponer nada a los usuarios y no estoy expuesto a la tentaci¨®n que el poder conlleva. Los programadores s¨ª tienen ese poder y est¨¢n expuestos siempre a esa tentaci¨®n. Por eso introducen tan a menudo funcionalidades mal¨¦volas.
P. ?A qu¨¦ peligros se refiere?
R. Windows tiene funcionalidades mal¨¦volas; Skype esp¨ªa; Android tiene una puerta trasera y capacidades para hacer grilletes digitales y toma notas de qu¨¦ escucha cada usuario; Netflix, tambi¨¦n esp¨ªa al usuario¡ Cada tel¨¦fono m¨®vil tiene una puerta trasera que permite cambiar a distancia todo el software en el tel¨¦fono y se emplea esa puerta trasera para convertir el tel¨¦fono en dispositivo de escucha sin necesidad de hacer una llamada. Aunque est¨¦ apagado, siempre sigue funcionando una vez modificado el sistema del tel¨¦fono.
P. ?Por qu¨¦ son m¨¢s utilizados los privativos?
R. Nuestra sociedad promueve los valores pr¨¢cticos y superficiales. La voz de Microsoft, amplificada por el dinero, es muy fuerte. No se han dado cuenta de la injusticia de ser privativo ni de las injusticias secundarias de las funcionalidades mal¨¦volas. Yo no quiero que toquen mi libertad.
P. ?Hace diferencias entre Google, Facebook, Apple, Amazon y Microsoft o mete a todas en el mismo saco por usar software privativo?
R. Todos comparten la primera injusticia de base por ser un sistema privativo. Pero en cuanto a las funcionalidades mal¨¦volas, hay diferencias. No digo que todos los programas privativos son iguales, seguramente algunos no tienen funcionalidades mal¨¦volas. Cuando se trata de espiar al usuario o de crear puertas traseras para atacar al usuario, se esconden y solo a veces se detectan esas funcionalidades mal¨¦volas. Y en aquellos donde no hemos detectados esas funcionalidades mal¨¦volas, somos ignorantes de si las tienen o no, pero visto que tan comunes son hay que considerar que la probabilidad de que las tengan es muy alta.
P. ?El software libre tiene ideolog¨ªa, es de izquierdas?
R. No. La filosof¨ªa pol¨ªtica del movimiento software libre combina ideas capitalistas, con ideas socialistas y anarquistas. No estamos en contra del negocio, sino en contra de someter a la gente. Hay negocios de software libre que no someten a la gente, y por eso estoy contento. Tambi¨¦n hay un esp¨ªritu socialista, porque un programa libre est¨¢ disponible por todo el p¨²blico y lo pone al servicio del conocimiento humano. Ahora hay una tendencia por privatizar todo a causa del capitalismo extremo y la plutocracia. Pero hay ideas tambi¨¦n anarquistas, porque cada uno privadamente puede hacer lo que quiera con el software libre.
P. Las aplicaciones de privacidad baten r¨¦cords de usuarios tras la victoria de Donald Trump en las elecciones de EE UU.
R. Si son privativos no proporcionan ninguna seguridad.
P. ?Con Trump hay m¨¢s riesgo para la seguridad inform¨¢tica?
R. Puede ser, pero hay que reconocer que otros pa¨ªses tambi¨¦n esp¨ªan. En EE UU hay l¨ªmites legales constitucionales a los que las agencias no suelen prestar atenci¨®n. En Francia, por ejemplo, como medida de emergencia han autorizado que esp¨ªen cualquier base de datos. Es un estado tir¨¢nico. Para mantener la democracia necesitamos a los reveladores de secretos, a los h¨¦roes como Snowden. Solo gracias a los h¨¦roes como ¨¦l podemos saber lo que hace el Estado. Cuando el Estado sabe siempre qui¨¦n se comunica con qui¨¦n y qui¨¦n va a d¨®nde, puede detectar r¨¢pidamente a los reveladores de secretos, a las fuentes de los periodistas, y puede ponerlas en la c¨¢rcel por haber desvelado informaci¨®n de alta relevancia p¨²blica. El Estado espa?ol ya ha demostrado su voluntad de esconder sus acciones sucias, con la ley que proh¨ªbe hacer p¨²blicos los v¨ªdeos en los que se ve la violencia que emplea la polic¨ªa. Ha dicho que quiere proteger a la polic¨ªa mientras ataca al pueblo.
P. ?Ten¨ªa un candidato o candidata favorito en estas elecciones en EE UU?
R. Primero, [el senador independiente Bernie] Sanders, luego Jill Stein, del Partido Verde. No voto a candidatos de la derecha, como Trump o Clinton. Una curiosidad de la pol¨ªtica electoral de EE UU es que los del centro-derecha se llaman de izquierdas, pero se mudan al centro para ganar, aunque eso significa ir a la derecha. Cuando se pregunta a las votantes sobre cuestiones p¨²blicas est¨¢n m¨¢s a la izquierda que candidatos como Clinton.
P. ?C¨®mo empez¨® su relaci¨®n con Podemos? ?Se siente c¨®modo siendo invitado de un partido pol¨ªtico?
R. Lo que hago es difundir en Podemos la conciencia de la necesidad del software libre. Tengo la esperanza de que la pol¨ªtica tambi¨¦n implante el software libre. No apoyo formalmente a ning¨²n partido espa?ol, pero es claro que simpatizo m¨¢s con Podemos por sus valores generales. No conozco el resto de partidos.
P. ?Por qu¨¦ afirma que la Administraci¨®n p¨²blica debe apostar exclusivamente por el software libre?
R. Es imprescindible para la soberan¨ªa inform¨¢tica de un pa¨ªs, porque el Estado existe por el pueblo y act¨²a por el pueblo. El Estado tiene la responsabilidad ante el pueblo de tener el control completo de la inform¨¢tica. El uso del programa privativo en una agencia p¨²blica supone abandonar el control de su inform¨¢tica, un incumplimiento de su responsabilidad ante el pueblo. No se debe, pero se hace. Es un hecho que los Estados usan muchos programas privativos. Hay que corregir esto. La correcci¨®n durar¨¢ a?os porque es mucho trabajo, pero hay que comenzar sin demoras.
P. Un software chino ha espiado 700 millones de smartphones. ?Estamos seguros?
R. Seguramente utilizar¨¢ un software privativo. Pero hay que saber que el sistema de Apple, el iOS, transmite datos personales a los servidores de Apple. Quiz¨¢s ha espiado a m¨¢s gente a¨²n. Lo mal¨¦volo es lo normal en el software privativo. Cuando lanc¨¦ el sistema libre no fue as¨ª. La primera vez que Microsoft introdujo en Windows una funcionalidad para transmitir a Microsoft la lista de aplicaciones instaladas en la m¨¢quina hubo un esc¨¢ndalo, y lo retir¨®. A?os m¨¢s tarde reintrodujo esa misma funcionalidad de forma escondida, encriptada para que los usuarios no lo supieran. Un investigador lo descubri¨®, pero no fue un esc¨¢ndalo porque no hab¨ªa otra opci¨®n.
P. Microsoft se ha unido recientemente a la Fundaci¨®n Linux. ?Podr¨ªa entrar en su Free Software Foundation?
R. No, pero no rechazar¨ªamos su dinero si se ofrece. No cambiaremos nuestras metas para seguir recibiendo su dinero. Tenemos una postura moral fuerte. No creo que Microsoft quiera darnos dinero. Microsoft publica unos programas libres que s¨ª son ¨²tiles, no los rechazamos, pero hacer un poco el bien no compensa hacer mucho el mal. Microsoft hace mucho mal con su software privativo. Nuestra pr¨¢ctica no es medir el bien y el mal de una empresa con cifras.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.