¡°Las aplicaciones para pedir a domicilio no dependen de que otro deje de crecer¡±

Cuando Francisco Sordo (Ciudad de M¨¦xico, 1981) era ni?o, ir a comer a un restaurante representaba una ocasi¨®n especial. ¡°?bamos porque era el cumplea?os de alguien y se trataba de una gran celebraci¨®n¡±, cuenta el director general para Am¨¦rica Latina de UberEats. Con la direcci¨®n de la aplicaci¨®n para pedir alimentos a domicilio en sus manos, Sordo ha visto la transformaci¨®n de un ritual en un h¨¢bito. Hace un a?o la startup estadounidense aterriz¨® en las principales ciudades de Latinoam¨¦rica e hizo del servicio a domicilio un proceso accesible y r¨¢pido.

La aplicaci¨®n comenz¨® la conquista de la regi¨®n en Ciudad de M¨¦xico en octubre de 2016. El intermediario digital entre restaurantes y clientes se extendi¨® con rapidez por Brasil, Colombia y Chile. Ha acumulado una cartera de 10.000 restaurantes y ha reunido a 20.000 repartidores en la regi¨®n. La expansi¨®n consigui¨® adem¨¢s consolidar tiempos r¨¦cord en la entrega de los alimentos: la aplicaci¨®n ha logrado, en promedio, hacer entregas en 32 minutos. ¡°Lo que ha logrado la aplicaci¨®n es mucha transparencia y certeza para las personas alrededor del hecho de pedir comida a domicilio¡±, defiende Sordo.

En la ¨²ltima semana UberEats ha comenzado operaciones en Santiago de Chile y Sordo se muestra optimista con el ¨¦xito de la aplicaci¨®n. El conocimiento previo sobre c¨®mo funciona en otras geograf¨ªas permite un crecimiento acompasado en la nuevas ciudades donde aterriza, asegura. El reto inici¨® en M¨¦xico donde ahora existe la mayor curva de crecimiento de la startup. Le han seguido Colombia y Brasil. Ahora UberEats, explica Sordo, se enfocar¨¢ en mejorar la aplicaci¨®n antes de continuar con una expansi¨®n voraz. ¡°Queremos que la empresa alcance al negocio¡±, dice.

Los servicios de entrega a domicilio se han extendido en Am¨¦rica Latina en los ¨²ltimos tres a?os. Algunos ofrecen la entrega de pr¨¢cticamente cualquier servicio, pero la mayor¨ªa contin¨²a enfoc¨¢ndose en llevar alimentos hasta la puerta del cliente. Sordo reconoce que la industria todav¨ªa se encuentra en un etapa temprana, donde cada una de las aplicaciones todav¨ªa puede encontrar su propio mercado. ¡°No estamos en una industria madura, en el cual nuestro crecimiento sea dependiente de que alguien m¨¢s deje de crecer. Para nosotros generar una orden no significa que alguien m¨¢s pierda una orden¡±, apunta.

En 2018, la aplicaci¨®n dirigir¨¢ la mirada hacia Costa Rica para sus pr¨®ximas aperturas y seguir¨¢ luchando por reducir sus tiempos de entrega. En las calles de R¨ªo de Janeiro, en Bogot¨¢ o en Ciudad de M¨¦xico sus repartidores recorren las calles en bicicletas y motocicletas. Sordo aclara que la startup se asegura de que cada uno de ellos cuente con seguro con coberturas a da?os a terceros y equipo de protecci¨®n que pueda contribuir a su seguridad vial. Un repartidor puede llegar a obtener 500 d¨®lares al mes trabajando con la aplicaci¨®n, seg¨²n algunos de ellos consultados por este diario. Este empleo funciona como una alternativa para quienes deciden establecer sus propios horarios de trabajo. ¡°Con una simple bicicleta tienes la opci¨®n de generar ingresos¡±, simplifica Sordo.