Una botella contra las botellas de pl¨¢stico
La empresa Closca reinventa objetos cotidianos de la mano de su fundador: Carlos Ferrando. Con su ¨²ltimo producto busca reducir de forma dr¨¢stica el impacto medioambiental de este tipo de envases
Hecho en Valencia pero con ambici¨®n global. Closca, que ya ten¨ªa en el mercado un casco de bicicleta que se pliega, elogiado por los gur¨²s del dise?o, ha sacado un segundo producto, una botella de vidrio. Algo simple, de uso com¨²n pero con una idea poderosa detr¨¢s y una aplicaci¨®n para activar el cambio.
Carlos Ferrando (Sumacarcer, 1977) aprendi¨® a emprender por su cuenta, con intuici¨®n y ganas. Por el camino ha encontrado algunos consejeros que apoyan su empresa, como Bernardo Hern¨¢ndez e I?aki Berenguer. ¡°Cuando comenzamos con el casco ten¨ªa algo m¨¢s de 30 a?os y un gran sue?o. Despu¨¦s de demostrar que hay hueco para una visi¨®n diferente, queremos tener un impacto m¨¢s fuerte con la botella¡±, explica.
A la botella le acompa?a una app con?capacidad de?indicar los puntos para llenarla, adem¨¢s de los lugares d¨®nde hay fuentes y la calidad de las mismas. Los propios usuarios pueden a?adir comentarios
Closca Bottle quiere resolver uno de los problemas que la industria de las bebidas no quiere afrontar, la del impacto ecol¨®gico del envase. ¡°Una botella de pl¨¢stico tarda casi 400 a?os en deshacerse por completo. M¨¢s del 80% de las vendidas no se reciclan. No es sostenible, pero parece no importar¡±, alerta.
Su botella es bonita, higi¨¦nica e innovadora, pero no tendr¨ªa sentido ni capacidad de crecimiento exponencial si no se acompa?ase por una app, que adem¨¢s es gratuita. Sirve para indicar los puntos para llenarla. Indica d¨®nde hay fuentes y la calidad de las mismas. Adem¨¢s, los propios usuarios pueden a?adir comentarios. ¡°Tenemos algunas dentro de ayuntamientos, por ejemplo. Tambi¨¦n en bancos o tiendas. Lo que queremos es que se usen para evitar el deterioro que producen las de pl¨¢stico¡±, relata.
En un a?o fue capaz de poner en el mercado m¨¢s de 25.000 cascos. Cada unidad ten¨ªa un coste de 120 euros. En el caso de la botella: 39 d¨®lares (unos 32 euros al cambio). ¡°Con este precio financiamos tambi¨¦n la aplicaci¨®n, para que siga siendo gratis y se pueda usar con cualquier botella, no solo la nuestra¡±, matiza. Tambi¨¦n est¨¢n abiertos a patrocinios.?Entre los compromisos para sumarse se encuentra el servicio de aguas de Valencia.
La botella no va equipada con el chip NFC, un sensor que ha permitido abrirse a aplicaciones de terceros y crecer con m¨¢s usos. ¡°Tiene sentido porque vemos las bicis como un elemento de cambio. Con la botella tenemos la ventaja de no tener que hacer tallas, por ejemplo, pero seguimos jugando con el dise?o, es de vidrio y est¨¢ rodeada de material biodegradable. Se puede enganchar a una mochila, bici o maleta para llevarlo consigo¡±, explica el fundador.
A Ferrando le obsesiona mezclar dise?o, innovaci¨®n y tecnolog¨ªa. Ya est¨¢ pensando en su pr¨®ximo lanzamiento. Se debate entre el reloj o las gafas de sol, pero siempre "con una parte importante de impacto social y medioambiental", asegura.
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