La fiebre por las consolas mini
Lo retro est¨¢ de moda tambi¨¦n en la industria del videojuego, donde cada vez son m¨¢s las compa?¨ªas que apelan a la nostalgia en miniatura
El sector del videojuego es una industria que mira constantemente al futuro, a lo que est¨¢ por venir; sin embargo, hay un segmento del mercado que demanda aquello que formaba parte del d¨ªa a d¨ªa de los jugadores hace 20 o 30 a?os. Nintendo fue la primera compa?¨ªa en dar respuesta a ese est¨ªmulo all¨¢ por 2016 con Nintendo Classic Mini: NES, tambi¨¦n conocida como NES Mini. Las cifras les han dado la raz¨®n (10 millones de unidades vendidas en todo el mundo) y, ahora, son pocas las empresas veteranas que no se han sumado a esta fiebre por las consolas en miniatura.
Lo primero que hay que tener en cuenta es qu¨¦ son, qu¨¦ buscan y qu¨¦ ofrecen exactamente. Se trata de versiones de tama?o reducido de sistemas cl¨¢sicos, los primeros que llegaron a los hogares occidentales de forma m¨¢s multitudinaria: NES, SNES, PlayStation, Mega Drive, Neo Geo¡ Nombres que suenan en las mentes de los que son ahora padres pero que, en su d¨ªa, sosten¨ªan esos peque?os mandos de pl¨¢stico como lo hacen ahora sus reto?os.
La nostalgia es un elemento que vende, eso lo saben bien las compa?¨ªas; por ello, todas estas peque?as consolas son recreaciones en miniatura que respetan, con gran exactitud, la construcci¨®n f¨ªsica del chasis de las originales a las que referencian. Detalles como los botones (Power, Reset¡), el color, el relieve o las serigraf¨ªas hacen que parezcan maquetas de colecci¨®n pensadas para ser expuestas en una vitrina. En su interior se encuentra un hardware muy modesto con el que ejecutar una selecci¨®n limitada y no ampliable de videojuegos de sus respectivos cat¨¢logos, mientras que el precio, visto lo visto, ronda entre los 60 y los 100 euros. Conozcamos las principales opciones disponibles en Espa?a.
Nintendo Classic Mini: NES y SNES
En pleno verano de 2016, cuando Nintendo no hab¨ªa revelado si quiera su actual consola h¨ªbrida, Nintendo Switch, anunciaron que para esa campa?a navide?a estaba en sus planes el regreso de su consola 8-bits en miniatura, NES Mini, con un mando incorporado y un cat¨¢logo de treinta videojuegos cl¨¢sicos como Super Mario Bros., The Legend of Zelda o Metroid, los originales. Una recreaci¨®n por unos 60 euros que introdujo, adem¨¢s, funciones de rebobinado, puntos de suspensi¨®n de partidas inmediato u otros detalles como filtros visuales que recreen el aspecto de los televisores de tubo. Rememorar los viejos tiempos en casa a trav¨¦s de un puerto HDMI para jugar en alta definici¨®n, a 60 Hz, y ¨²nicamente un puerto USB para la alimentaci¨®n; que se puede conectar directamente al televisor. F¨¢cil, ligero, r¨¢pido. Como anta?o. Una demanda superior a la oferta? oblig¨® a colgar el cartel de ¡°agotado¡± en comercios de medio mundo, Espa?a incluida.
SNES Mini era inevitable. La sucesora, la consola dom¨¦stica de Nintendo en la era de los 16-bits, hizo lo propio en septiembre de 2017 con un cat¨¢logo de veinti¨²n juegos (uno de ellos in¨¦dito, Star Fox 2, que nunca sali¨® al mercado, m¨¢s otros que no vieron la luz en Europa en su momento) como Super Mario World, The Legend of Zelda: A Link to the Past, Super Mario Kart y Super Metroid, dos mandos incorporados en vez de uno, y un precio en torno a los 80 euros.
De acuerdo con Manuel Curdi, brand manager en Nintendo Ib¨¦rica, en declaraciones a EL PA?S, ¡°lo primero que puedes pensar es que son productos creados como fan service?para los nost¨¢lgicos que jugaron con esas plataformas hace d¨¦cadas. Pero entre las dos han vendido en Espa?a casi 350.000 ejemplares; as¨ª que, en realidad, el p¨²blico objetivo es mucho m¨¢s amplio¡±. No solo el p¨²blico de antes, tambi¨¦n el de ahora: hacer que unos descubran lo desconocido mientras, al mismo tiempo, otros rememoran aquello con lo que crecieron.
¡°Lo cierto es que los juegos que vienen con ellas siguen funcionando muy bien porque son divertidos sea cual sea la edad o la experiencia del usuario con los videojuegos¡±, a?ade?Curdi,?con caras reconocibles por p¨²blico de ayer y hoy. ¡°Adem¨¢s, sus protagonistas son personajes muy vivos hoy d¨ªa como Mario, Link, Donkey Kong o Kirby¡±, concluye.
Tal como se conoci¨® tras el encuentro con el grupo de accionistas de Nintendo celebrado el 31 de octubre de 2018 (Q2/FY2019), hasta esa fecha se hab¨ªan vendido m¨¢s de 10 millones de unidades de NES Mini y SNES Mini combinadas en todo el mundo, unas cifras que la empresa afincada en Kioto califica como un ¨¦xito; de hecho, la primera de ellas estuvo descatalogada pero regres¨® a las f¨¢bricas de producci¨®n por su alta demanda internacional.
PlayStation Classic, el regreso de ¡°la play¡±
Volvemos a dar un salto en el tiempo, pero esta vez lejos de Nintendo. Sony, otra de las gigantes del sector, no pudo dejar de lado una evidencia: su p¨²blico quer¨ªa una versi¨®n mini de la primera PlayStation, uno de los mayores ¨¦xitos hist¨®ricos del sector del videojuego en Espa?a. En diciembre de 2018 llegar¨ªa a los comercios PlayStation Classic, una versi¨®n en miniatura de la original (un 45% m¨¢s peque?a) con un total de dos mandos ¡ªla versi¨®n son joysticks¡ª y un cat¨¢logo de veinte t¨ªtulos cl¨¢sicos como Final Fantasy VII, Tekken 3, Gran Turismo y Metal Gear Solid.
Se trata de versiones de tama?o reducido de sistemas cl¨¢sicos, los primeros que llegaron a los hogares occidentales de forma m¨¢s multitudinaria
Al igual que en la oferta de su competidora, la conectividad es por HDMI m¨¢s un cable de alimentaci¨®n micro USB. Por lo dem¨¢s, una recreaci¨®n muy fidedigna del modelo original en botones y construcci¨®n f¨ªsica m¨¢s diferentes opciones de emulaci¨®n en pantalla. Su precio, en este caso, rond¨® inicialmente los 100 euros, aunque con el tiempo baj¨® de precio de manera oficial a 59,99 euros, equipar¨¢ndose as¨ª a la competencia directa.
Mega Drive Mini, la consola m¨¢s exitosa de SEGA
En pa¨ªses como Espa?a, o ten¨ªas SNES o ten¨ªas Mega Drive. La consola de 16-bit de la tambi¨¦n japonesa SEGA fue el mayor ¨¦xito de la compa?¨ªa en lo que a consolas se refiere, con t¨ªtulos que forman parte de los libros de historia del medio como Sonic the Hedgehog, Gunstar Heroes, Altered Beast o Alex Kidd. Todos ellos est¨¢n presentes en Mega Drive Mini, cuya presentaci¨®n no deja lugar a la duda: una versi¨®n en miniatura (un 55% m¨¢s peque?a) que respeta todos los aspectos de la original. En este caso, la reci¨¦n llegada a las tiendas ofrece cuarenta y dos videojuegos m¨ªticos de su librer¨ªa original preinstalados sin posibilidad de ampliaci¨®n con dos mandos, cable HDMI (para jugar en HD a 60 Hz) y alimentaci¨®n USB. Es la mayor cantidad de juegos incluidos de todas las opciones disponibles hasta ahora.
Seg¨²n los an¨¢lisis de medios especializados, la cantidad de detalles es, en este caso, especialmente elevada, con incluso un tema sonoro del reputado compositor Yuzo Koshiro para ambientar el men¨² principal de selecci¨®n; u otros como poder alternar las portadas del men¨² dependiendo de la regi¨®n. Su precio, en este caso, es de 79,95 euros.
Carolina Moreno, portavoz?de la distribuidora de Mega Drive Mini, Koch Media, asegura a este peri¨®dico que la consola "obviamente apela mucho a los nost¨¢lgicos", aquellos que tuvieron una Mega Drive en su momento; "van a poder recordar los momentos que pasaron jugando con la consola y tambi¨¦n apela a los jugadores que quieran interesarse y conocer c¨®mo eran los videojuegos hace 25 a?os¡±, a?ade. La visi¨®n se repite: llegar al mayor n¨²mero de jugadores posible.
Ninguna de ellas est¨¢ exenta de cr¨ªticas. La renuncia por traer ciertos juegos en castellano cuando algunos s¨ª lo hicieron originalmente, una selecci¨®n debatible de algunos de los t¨ªtulos incluidos o la cantidad total de ellos ¡ªpara ciertos jugadores inferior a la que deber¨ªa¡ª son los flecos de productos imperfectos pero indudablemente respetuosos, cuidados en lo est¨¦tico y, tambi¨¦n, en la experiencia de juego a los mandos. Si merecen o no la pena por el precio que tienen son aspectos subjetivos que dependen del aprovechamiento que se le vaya a dar, pero su ¨¦xito comercial demuestra que, al menos por ahora, las consolas en miniatura han llegado para quedarse.
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