Tecnolog¨ªa digital al rescate en tiempos del coronavirus
Operadoras de telefon¨ªa que informan de d¨®nde han estado sus usuarios, apps para localizar los contagios m¨¢s cercanos, y pagos electr¨®nicos para evitarlos. El Gran Hermano chino sirve para contener la epidemia.

El personal del comit¨¦ vecinal toca a la puerta. Protegidos con mascarilla y con un traje de protecci¨®n biol¨®gica blanco, un hombre y una mujer recorren las viviendas de un edificio residencial de Shangh¨¢i recogiendo diferente informaci¨®n sobre sus habitantes. La capital econ¨®mica de China quiere retomar la actividad despu¨¦s de un mes parada por la epidemia del coronavirus Covid-19, pero preocupa el regreso de los trabajadores migrantes que engrasan la econom¨ªa de la segunda potencia mundial. ¡°?D¨®nde ha estado durante las ¨²ltimas dos semanas?¡±, preguntan a este periodista despu¨¦s de tomar la temperatura apuntando a la frente de cada residente con un term¨®metro de infrarrojos, elemento indispensable ya en cualquier lugar p¨²blico.
Las dr¨¢sticas restricciones a los movimientos de la poblaci¨®n implementadas por China han dejado a casi 60 millones de personas en cuarentena, la mayor¨ªa en la provincia de Hubei, epicentro de la infecci¨®n. Pero las autoridades de Shangh¨¢i, una megal¨®polis de 24 millones de habitantes, no se f¨ªan de la palabra de los ciudadanos reci¨¦n llegados. ¡°Tiene que demostrar que no ha estado en zonas de riesgo en los ¨²ltimos 14 d¨ªas. Por favor, env¨ªe ¡®CXMYD¡¯ por SMS al n¨²mero de su operador¡±, piden.
La respuesta llega de inmediato. Es un SMS en el que se detallan las localidades en las que el usuario se ha conectado a torres de telefon¨ªa m¨®vil, un servicio que ofrecen las tres compa?¨ªas telef¨®nicas del pa¨ªs durante la epidemia. No es una prueba concluyente, pero sirve para avalar o desmentir la informaci¨®n que proporciona la gente. ¡°De acuerdo, muchas gracias. Por favor, tenga en cuenta que tiene que informar de sus movimientos fuera de la ciudad. Ocultarlos puede acarrear consecuencias legales¡±, se despide el comit¨¦ vecinal.
El SMS sirve para abrir las puertas de muchos lugares p¨²blicos. Incluso el Consulado de Espa?a de Shangh¨¢i advierte de que, a pesar de que hoy retoma su actividad normal, quienes hayan estado fuera de la ciudad durante las ¨²ltimas dos semanas -tiempo que se toma como referencia del per¨ªodo de incubaci¨®n del coronavirus- pueden tener problemas para acceder al edificio en el que se encuentra la legaci¨®n diplom¨¢tica. ¡°Agradecemos su cooperaci¨®n en el cumplimento estricto de las medidas establecidas por la Torre Jinmao¡±, pide el Consulado en una circular remitida por correo electr¨®nico a los espa?oles a los que presta servicio en varias provincias del pa¨ªs.

Otras empresas van m¨¢s all¨¢ y, para permitir el acceso a sus sedes o la reincorporaci¨®n al trabajo, exigen conocer si se ha detectado alguna infecci¨®n en el barrio del empleado. Para ello, tambi¨¦n utilizan la tecnolog¨ªa: concretamente, un ¡®miniprograma¡¯ llamado ¡®Yixiaosou¡¯ que se descarga dentro de la aplicaci¨®n de WeChat, el WhatsApp chino. Utilizando el GPS del tel¨¦fono m¨®vil, determina la ubicaci¨®n y muestra en un mapa los contagios que se han confirmado en los alrededores. Un signo de exclamaci¨®n advierte del lugar exacto en el que residen los infectados -informaci¨®n que se puede ampliar clicando en el icono-, y el color sirve para determinar hace cu¨¢nto tiempo se confirmaron esos positivos: cuanto m¨¢s intenso es el rojo, m¨¢s cercano en el tiempo est¨¢ el contagio.
¡°Puede que no sea muy fiable, pero menos es nada. Pedimos a los trabajadores que nos muestren su lugar de residencia y luego comprobamos si hay casos en ese edificio o en los colindantes. Si los hay, requerimos que no salgan de casa y, si pueden, que trabajen desde el domicilio¡±, comenta un estudio de arquitectura que prefiere mantener el nombre en el anonimato. ¡°La seguridad es lo m¨¢s importante, as¨ª que utilizamos todas las herramientas a nuestra disposici¨®n para asegurarla. El Gobierno est¨¢ haciendo una gran labor en la contenci¨®n de la epidemia, aunque sepa que las medidas que pone en pr¨¢ctica van a da?ar la econom¨ªa¡±, a?aden desde la empresa.
Sin duda, es un buen momento para que el Partido Comunista ponga a trabajar al Gran Hermano que ha ido construyendo durante la ¨²ltima d¨¦cada. Las herramientas de control de la poblaci¨®n, utilizadas a menudo con fines represivos, pueden ahora suponer una ventaja para contener al coronavirus. Los m¨¢s de doscientos millones de c¨¢maras sirven para comprobar que las personas en cuarentena no se la saltan, y nuevos sistemas de reconocimiento facial desarrollados por Sensetime combinan c¨¢maras termales y algoritmos mejorados para identificar a las personas incluso cuando se cubren el rostro con una mascarilla.
Aunque la empresa china reconoce que este modelo es menos fiable, ya est¨¢ en funcionamiento al menos en tres zonas p¨²blicas de China. Y, a pesar de que Estados Unidos ha puesto a Sensetime en la lista negra de su particular guerra tecnol¨®gica, el sistema incluso ha trascendido las fronteras de ese pa¨ªs y ha sido adoptado por la surcoreana LG en 26 puntos de acceso. As¨ª, sus empleados pueden entrar en las instalaciones de la filial LG CNS sin necesidad de retirar la mascarilla con la que se protegen en Se¨²l. Seg¨²n la tecnol¨®gica, la identificaci¨®n se realiza en 0,3 segundos y tiene una efectividad del 99%.

Para rastrear los movimientos de la poblaci¨®n, en China tambi¨¦n se han desarrollado nuevos sistemas. Uno de ellos se basa en los c¨®digos QR que incorporan desde el pasado viernes los taxis de Shangh¨¢i. Los pasajeros pueden escanearlos utilizando WeChat o Alipay -para cuyo registro es obligatorio enviar copia del carn¨¦ de identidad- y as¨ª el Gobierno puede seguir todos sus movimientos. Seg¨²n las Autoridades, esto sirve para localizar a los usuarios del transporte p¨²blico en caso de que se detecte un caso y haya que encontrar a quienes han podido tener contacto con ¨¦l.
De momento, este sistema no es de uso obligatorio en Shangh¨¢i, pero ciudades como Shenzhen, el Silicon Valley de China, s¨ª que obligan a utilizarlo incluso al acceder al autob¨²s; y en Ningbo, un centro manufacturero de Zhejiang, hay que escanear el c¨®digo para entrar al metro. En algunas ciudades incluso se est¨¢n instalando c¨¢maras de reconocimiento facial con term¨®metros incorporados para detectar a quien tenga fiebre.
Este sistema sirve asimismo para alertar a los pasajeros que est¨¦n en peligro: se les env¨ªa un mensaje si han pasado por alg¨²n lugar en el que se ha dado un contagio y se les pide que contacten con las autoridades sanitarias para descartar que se hayan infectado. ¡°Hay quien se preocupa por la privacidad, pero yo prefiero estar segura. Nuestros datos ya los tienen de todas formas¡±, ironiza Yan Linwei, una joven de la provincia de Liaoning que ha regresado hace unos d¨ªas a Shangh¨¢i con la intenci¨®n de reincorporarse al trabajo.
Otra de las recomendaciones de las Autoridades, y que muchos consideran clave para evitar la propagaci¨®n del virus, es la de realizar siempre pagos electr¨®nicos. Aunque China ha ordenado la desinfecci¨®n del papel moneda -e incluso la destrucci¨®n de los billetes que se hayan utilizado en las zonas m¨¢s afectadas-, el uso de pago mediante c¨®digos QR reduce las posibilidades de entrar en contacto con el coronavirus. ¡°No acepto dinero en met¨¢lico, solo transferencia por WeChat Pay o Alipay¡±, advierte un taxista apellidado Han, que ha forrado de pl¨¢stico la mampara que le separa de los pasajeros. ¡°Estas semanas prefiero utilizar aplicaciones como Didi -el Uber chino- para evitar cobrar en efectivo. Y no voy ni al aeropuerto ni a la estaci¨®n de tren¡±, a?ade.
Es evidente que la reclusi¨®n de la poblaci¨®n en sus casas va a tener un impacto negativo en la econom¨ªa del gigante asi¨¢tico, pero empresas de mensajer¨ªa a domicilio -desde paqueter¨ªas como SF Express hasta repartidores de comida como Meituan Waimai- no sienten el batacazo porque sus servicios est¨¢n sustituyendo a los del comercio y la hosteler¨ªa tradicionales. Muchos restaurantes solo sirven comida a domicilio solicitada a trav¨¦s de diferentes aplicaciones m¨®viles, y las compras ¡®online¡¯ en los supermercados se han disparado.
¡°Menos mal que existen. A m¨ª me han salvado de exponerme en la calle¡±, comenta Yan. As¨ª, las calles que antes estaban llenas de autom¨®viles ahora aparecen tomadas por un ej¨¦rcito de motoristas azules y amarillos sobre bicicletas el¨¦ctricas y con la mirada pegada a la pantalla del ¡®smartphone¡¯. Las bolsas se dejan a la entrada del edifico para evitar el contacto f¨ªsico, ya que la mayor¨ªa de las urbanizaciones no permite el acceso de todo aquel que no sea residente.
Algunas empresas como Meituan consideran que este es el momento perfecto para probar sus veh¨ªculos aut¨®nomos de mensajer¨ªa. La semana pasada puso en marcha los primeros en un distrito de Pek¨ªn, y se suma as¨ª a los servicios que rivales como JD y Ele.me ofrecen con veh¨ªculos sin conductor en las zonas en cuarentena. ¡°Reducen el contacto f¨ªsico en el que hay peligro de infecci¨®n y permiten satisfacer las necesidades de los clientes en este momento tan especial¡±, explic¨® Meituan en un comunicado.
Estos robots cada vez m¨¢s habituales complementan as¨ª a los drones que algunos utilizan tanto para confirmar que la gente se protege adecuadamente con mascarilla como para tomar la temperatura de los vecinos sin que estos tengan que salir de sus casas: basta con que se asomen a la ventana. La prensa estatal china alaba todos estos avances que considera armas efectivas contra el Covid-19, pero la pregunta que se hacen muchos es qu¨¦ suceder¨¢ con todos esos datos personales que recaba el Gobierno cuando la epidemia sea historia.
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