¡°Estamos supermaltratados¡±. El Gobierno deja en el aire una ayuda millonaria a la investigaci¨®n en IA para cientos de acad¨¦micos

En julio de 2023, el entonces Ministerio de Universidades public¨® una convocatoria de ayudas para fomentar la investigaci¨®n con inteligencia artificial (IA) en otras disciplinas. El objetivo era reunir a inform¨¢ticos e ingenieros con investigadores de otros ¨¢mbitos para que la IA se aplicara en ¨¢reas como desaf¨ªos sociales y pol¨ªticos, impacto ambiental o sistemas f¨ªsicos.

A pesar de ser pleno verano y de ser una iniciativa compleja, cientos de investigadores en docenas de universidades y centros prepararon sus propuestas. En septiembre de 2023 las presentaron, luego llegaron las alegaciones y correcciones y en diciembre deb¨ªan empezar a concederse. Pero nunca supieron nada m¨¢s.

¡°Estamos supermaltratados, pero esto es un nivel superior¡±, dice un catedr¨¢tico que pidi¨® una de las ayudas. ¡°Cuando un Gobierno decide que quiere promocionar algo y luego no lo hace, el resultado es que nos fastidia. Solo pedimos que no mareen, que nos dejen trabajar¡±, a?ade. EL PA?S ha consultado a cuatro investigadores con propuestas presentadas. Prefieren no dar su nombre para que sus futuras propuestas para ayudas p¨²blicas no se vean afectadas: ¡°Si hablo con mi nombre me hunden¡±, dice uno de los implicados. Su decepci¨®n y rabia por el retraso se unen a la posibilidad de que el programa directamente se cancele, algo que han o¨ªdo al menos dos de ellos.

Un portavoz del Ministerio de Ciencia, Innovaci¨®n y Universidades confirma que el formato actual del programa no se va a mantener: ¡°El Ministerio estudia diferentes escenarios que permitan el uso de estos fondos ante la posibilidad de no poder sacar adelante la citada convocatoria en su formato actual¡±. El Gobierno no da m¨¢s detalles sobre qu¨¦ pasar¨¢ con las ofertas presentadas ni si se mantendr¨¢n los 31 millones prometidos en otro ¡°formato¡±.

El Gobierno a?ade que la convocatoria ¡°sufre una demora en la gesti¨®n interna para resolverla definitivamente¡± por dos motivos: uno, el paso de la cartera de Universidades que hasta entonces ten¨ªa Joan Subirats al Ministerio de Ciencia de la ministra Diana Morant en noviembre de 2023, despu¨¦s de las elecciones; y, dos, por los cambios en la Secretar¨ªa General de Universidades en mayo.

En mayo abandon¨® el secretario de Universidades, Jos¨¦ Manuel Pingarr¨®n, que estaba en el cargo desde 2018 y que hab¨ªa sobrevivido a tres ministros. Pingarr¨®n nunca fue del c¨ªrculo confianza de Morant y hab¨ªa ido perdiendo competencias desde que situaron por encima de ¨¦l a un secretario de Estado de Ciencia y Universidades, Juan Cruz Cigudosa. El nuevo secretario de Universidades nombrado en mayo fue Francisco Garc¨ªa Pascual, hasta entonces jefe de gabinete de Cruz.

Hay un problema de credibilidad

Estos movimientos pol¨ªticos importan poco a los investigadores que se han quedado por ahora sin proyecto, a falta de confirmaci¨®n oficial, y sin saber siquiera si se lo hab¨ªan concedido. ¡°Es un problema enorme porque se han creado muchas expectativas, pero sobre todo hay un problema de credibilidad en su compromiso con la ciencia de este Ministerio¡±, dice otro de los investigadores.

Este programa formaba parte de uno de los ejes de la Estrategia Nacional de IA, publicada en diciembre de 2020 y con una dotaci¨®n total de 600 millones de euros procedentes de Next Generation EU. En una nota de junio de 2023 este plan era bautizado como ¡°red de excelencia espa?ola en IA¡± y pretend¨ªa ¡°impulsar el talento y atraer el talento internacional¡±. En aquel momento, la dotaci¨®n prevista era de 32 millones de euros, uno m¨¢s que en el plan final. En mayo el Gobierno anunci¨® otros 1.500 millones para la IA, repartidos en la creaci¨®n de un centro de datos sostenible, el supercomputador de Barcelona y un nuevo modelo llamado Alia, del que a¨²n no se sabe nada.

Cada proyecto del programa de ayudas pod¨ªa pedir hasta dos millones de euros y deb¨ªa incluir entre un 30% y un 50% de investigadores en IA y al menos un 30% de mujeres en cada equipo. El correo electr¨®nico oficial para consultas no responde desde hace tiempo y la p¨¢gina de ayuda del viejo Ministerio de Universidades est¨¢ ca¨ªda sin redirigir a ninguna otra. La direcci¨®n del desaparecido Ministerio de Universidades s¨ª redirige al de Ciencia.

La convocatoria inicial anunciaba que la duraci¨®n de las actuaciones ser¨ªa de dos a?os: no podr¨ªa rebasarse el 31 de diciembre de 2025, ¡°fecha l¨ªmite establecida por los compromisos adquiridos dentro del marco del Plan de Recuperaci¨®n, Transformaci¨®n y Resiliencia¡±. Esa imposibilidad en los plazos podr¨ªa presuntamente ser uno de los motivos para la posible cancelaci¨®n.

Si finalmente acabara suspendi¨¦ndose, a los investigadores afectados les costar¨ªa entenderlo y aceptarlo: ¡°Todos esperamos que la convocatoria no se suspenda, ya que no ser¨ªa ni comprensible ni aceptado sin m¨¢s. No hemos hecho nuestras propuestas para probar suerte como quien juega a la loter¨ªa, sino con mucho esfuerzo y con el ¨¢nimo de seguir ayudando al pa¨ªs a trav¨¦s de la ciencia y el desarrollo tecnol¨®gico¡±, dice otro de los investigadores consultados.

Aunque nadie se enga?a. Saben que la ciencia y la tecnolog¨ªa nunca ha sido en Espa?a una cuesti¨®n delicada que haga perder votos: ¡°Si fuera otra cosa que hace m¨¢s ruido que los investigadores, pasar¨ªa eso, pero como nosotros no hacemos ruido, pues nada. A nivel pol¨ªtico no tienen que buscar ninguna excusa. Pero al menos s¨ª a nivel legal. Tienen que poner una raz¨®n cre¨ªble. Los plazos en los que tendr¨ªamos que gastarnos los fondos europeos podr¨ªa ser una excusa, pero no est¨¢ claro que sirva legalmente¡±, explica otro acad¨¦mico.