?Nos esp¨ªa ChatGPT? As¨ª se puede eliminar toda la informaci¨®n personal r¨¢pidamente
Los expertos recomiendan cautela al compartir datos personales con el programa de inteligencia artificial, ante la falta de transparencia de la compa?¨ªa
Un sistema inteligente, que entiende perfectamente el lenguaje natural, se nutre de forma inmediata de una cantidad ingente de datos y tiene respuesta pr¨¢cticamente para cualquier pregunta. ChatGPT es tan bueno ¡ªsobre todo en su ¨²ltima versi¨®n, GPT-4¡ª que han bastado unos pocos meses para que saltaran las alarmas: ?Hasta d¨®nde puede llegar su influencia? M¨¢s all¨¢ de debates morales, la otra gran inquietud que despierta ChatGPT es su poco transparente gesti¨®n de la informaci¨®n que procesa.
¡°No sabemos lo que hace realmente con los datos¡±, advierte Borja Adsuara, abogado experto en derecho digital, ¡°y no saber qu¨¦ hacen con los datos ya es en s¨ª mismo un riesgo¡±. De la misma opini¨®n es Federico Vadillo, experto en seguridad de Akamai: ¡°El uso de ChatGPT presenta riesgos en t¨¦rminos de protecci¨®n de datos y cumplimiento normativo, especialmente en relaci¨®n con el Reglamento General de Protecci¨®n de Datos, el RGPD¡±. Este experto va m¨¢s lejos al advertir que estos datos personales ¡°no autorizados¡±, podr¨ªan ¡°ser transferidos fuera de la Uni¨®n Europea¡±.
La aventura de eliminar los datos personales
¡°Los sistemas basados en inteligencia artificial (IA) se suelen comportar como una caja negra: sabemos lo que ocurre al final del proceso, pero no conocemos c¨®mo el software aprende y toma decisiones¡±, alerta Adri¨¢n Moreno, experto en ciberseguridad. ¡°Este fen¨®meno plantea desaf¨ªos de comprensi¨®n, control y ¨¦tica. Es por ello que conviene establecer un marco regulatorio de cara a abordar estos desaf¨ªos para permitir un desarrollo y uso responsable y seguro de la IA¡±, a?ade.
Moreno recuerda que ¡°el art¨ªculo 15 del RGPD establece que ¡®el interesado tendr¨¢ derecho a obtener del responsable del tratamiento confirmaci¨®n de si se est¨¢n tratando o no datos personales que le conciernen¡¯¡±, y en este sentido, la forma en la que los sistemas basados en IA emplean la informaci¨®n es ¡°fuente de preocupaci¨®n¡±.
Ante esta realidad, ?c¨®mo eliminar toda la informaci¨®n personal? La mala noticia es que no hay ninguna forma automatizada ni inmediata de eliminar la informaci¨®n almacenada. Esto es, las conversaciones que se mantengan con el sistema, quedan registradas, junto con el nombre del usuario y sus datos de registro, tal y como anuncia la pol¨ªtica de privacidad de la compa?¨ªa. Como no existe una forma inmediata ni automatizada de acceder y eliminar la informaci¨®n que se consulta, OpenAI ha dispuesto un formulario que el interesado debe rellenar para solicitar la informaci¨®n de los datos. Y aqu¨ª viene lo preocupante: el usuario se ve obligado a aceptar una cl¨¢usula en la que OpenAI advierte que puede que no sea capaz de eliminar esta informaci¨®n.
Esto es, tras completar un complejo formulario, en el que se demuestre de forma fehaciente (incluso con capturas de pantalla) que el sistema est¨¢ ofreciendo informaci¨®n de uno mismo y los motivos por los que se solicita su eliminaci¨®n. Este documento debe ser cumplimentado con los datos reales del interesado, quien, adem¨¢s, debe ¡°jurar¡± por escrito la veracidad de lo que expone. Y para empeorar m¨¢s, si cabe, las cosas, en este formulario se comunica al usuario que la informaci¨®n cumplimentada podr¨ªa ser cotejada con otras fuentes para verificar su veracidad.
?Qu¨¦ se hace y c¨®mo se emplea esta informaci¨®n? OpenAI sostiene que no explota los datos personales con otros fines que no sean la mejora de sus sistemas, pero, por otro lado, en su pol¨ªtica de privacidad advierte que los datos pueden ser ¡°cedidos a terceros sin avisar al usuario¡±. En definitiva, OpenAI ofrece un producto de un elevado valor a?adido pero a un coste todav¨ªa superior para el usuario: la ignorancia sobre el tratamiento de sus datos. Cabe recordar, adem¨¢s, que con la informaci¨®n que se consulta a ChatGPT es f¨¢cil hacer un perfil de usuario y muy tentador hacer una explotaci¨®n del mismo. Ante esta disyuntiva, y si no se desean asumir riesgos, lo m¨¢s prudente es hacer un uso consciente de lo que se consulta o, siendo m¨¢s radicales, no utilizar la herramienta hasta que no se acoja a normativas como el RGPD: ¡°Lo mejor que no introducir informaci¨®n personal, por si acaso¡±, recomienda Adsuara.
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