Cinco miembros del programa ¡®Salvados¡¯, expulsados de Marruecos

Un equipo de cinco miembros del programa Salvados, difundido por La Sexta, ha sido interceptado por la polic¨ªa este lunes en T¨¢nger junto a su traductor marroqu¨ª, cuando se dispon¨ªa a entrevistar a familiares de las 29 personas que fallecieron ahogadas y electrocutadas en un taller textil de T¨¢nger el pasado febrero. La entrevista hab¨ªa sido coordinada con la asociaci¨®n tangerina Attawassoul (Comunicaci¨®n, en ¨¢rabe).

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El s¨®tano trampa del textil marroqu¨ª

Lamia Azus, miembro de la organizaci¨®n Attawassoul, ha indicado a este diario que el incidente se produjo en una cafeter¨ªa, a las tres y media de la tarde. ¡°Yo estaba presente. De pronto llegaron los polic¨ªas y metieron en una furgoneta a los cinco miembros de Salvados y a su traductor, un marroqu¨ª. No ten¨ªan c¨¢maras ni nada. Solo estaban sentados en la cafeter¨ªa¡±.

Un miembro de Salvados ha a?adido desde Espa?a que el equipo viaj¨® a Marruecos sin material de rodaje porque la intenci¨®n era hacer un trabajo de ¡°preproducci¨®n¡±. Es decir, para documentarse y decidir si finalmente se hac¨ªa el reportaje o no. El objetivo era efectuar esa tarea durante varios d¨ªas de estancia en el pa¨ªs. Pero las autoridades marroqu¨ªes les conminaron a salir del pa¨ªs este mismo lunes, junto al traductor que los acompa?aba.

¡°Entiendo que las autoridades exigen venir con la documentaci¨®n necesaria para filmar¡±, ha se?alado la misma fuente de Salvados. ¡°Pero nosotros no hab¨ªamos tra¨ªdo nada porque no pretend¨ªamos rodar. Siempre que grabamos en el extranjero, cumplimos escrupulosamente con todos los requerimientos del pa¨ªs¡±

Este peri¨®dico ha intentado sin ¨¦xito recabar la versi¨®n del Ministerio de Comunicaci¨®n marroqu¨ª.

Bouker el Khamil, presidente de la asociaci¨®n y esposo de Lamia Azuz, a?adi¨® que las entrevistas hab¨ªan sido planificadas hac¨ªa un mes. ¡°Iban a verse con los familiares en la sede de nuestra organizaci¨®n. Pero antes de que llegaran, el edificio de la asociaci¨®n fue rodeado por furgonetas de polic¨ªas. Parec¨ªa que est¨¢bamos en una guerra¡±.

El Khamil cuenta que entonces avis¨® a los periodistas para que no acudieran a la asociaci¨®n. ¡°El plan era que mi esposa los condujera hacia las casas de los allegados. Pero en ese momento lleg¨® la polic¨ªa y les pidi¨® la documentaci¨®n¡±. El activista tangerino a?ade: ¡°Las familias de las v¨ªctimas solo est¨¢n reclamando sus derechos a las autoridades marroqu¨ªes. Es como si no quisieran que se les escuchase¡±.

El s¨®tano donde se encontraba el taller result¨® inundado tras una noche de tormenta y la mayor¨ªa de los trabajadores fallecieron dentro. En un primer momento las autoridades locales informaron de que el taller era clandestino, pero despu¨¦s se supo que estaba inscrito en el Registro Mercantil de Marruecos.

Las familias de las 29 v¨ªctimas difundieron el pasado 15 de junio una carta que hab¨ªan enviado al jefe del Gobierno, Saaded¨ªn el Otmani, en la que le reclamaban que considerase sus demandas ¡°leg¨ªtimas¡±, despu¨¦s de haberle escrito otra carta dos meses antes. Los familiares dec¨ªan haber obtenido ¡°un cierto n¨²mero de informaciones¡± que prueban ¡°la responsabilidad de instituciones locales¡± ligadas al Gobierno. Y a?ad¨ªan que el taller no contaba con las condiciones de seguridad ni de higiene y funcionaba de la misma manera desde ¡°hace m¨¢s de 15 a?os¡±.

Los allegados de las v¨ªctimas reclaman la creaci¨®n de un comit¨¦ independiente que investigue el accidente, para ¡°pedir cuentas a los responsables implicados¡±. Y solicitan del Gobierno ¡°un apoyo financiero y moral¡±. Los pr¨®ximos de las v¨ªctimas aseguran vivir con ¡°mucha pobreza¡±, sin protecci¨®n social y ¡°en la ausencia de todo apoyo del Estado¡±.