Mueren electrocutados al menos 28 obreros de un taller textil clandestino en T¨¢nger a causa de las lluvias

Al menos 28 personas han muerto este lunes por la ma?ana en un taller de confecci¨®n clandestino en T¨¢nger, seg¨²n informaron varios medios locales en Marruecos. La f¨¢brica informal, situada en el subsuelo de una casa residencial y en la que trabajaban 40 personas, qued¨® inundada tras las lluvias torrenciales de la madrugada del lunes, por lo que las v¨ªctimas fallecieron electrocutadas. Una decena de v¨ªctimas fueron socorridas, seg¨²n inform¨® el sitio digital Le360, que cifraba en, al menos, 17 el n¨²mero de mujeres fallecidas. Las autoridades han abierto una investigaci¨®n para aclarar las causas del accidente.

El local, que se encuentra en el barrio de Branes II, cerca del centro de la ciudad, no cumpl¨ªa con los requisitos de seguridad exigidos por las autoridades, seg¨²n destacan varios medios locales. Las intensas lluvias ca¨ªdas en toda la regi¨®n del norte de Marruecos provocaron inundaciones en los barrios bajos de la urbe y en algunas calles el agua incluso superaba las ventanillas de los coches. Una situaci¨®n que complic¨® presumiblemente la situaci¨®n en el s¨®tano.

El sector textil es la primera fuente de empleo del pa¨ªs, con m¨¢s de 190.000 puestos de trabajo en su haber. Muchos talleres de confecci¨®n legalmente establecidos en Marruecos, donde trabajan a menudo muchas personas en peque?os espacios, se han visto obligados a implantar medidas de distancia social, lo que encarece la producci¨®n. La baja demanda de pedidos procedentes de Espa?a y Francia ¨Cprincipales clientes de Marruecos¨C y las medidas sanitarias exigidas han llevado a algunos empresarios a echar el cierre.

T¨¢nger ha vivido en la ¨²ltima d¨¦cada un desarrollo econ¨®mico como pocas ciudades han visto en el continente africano. Era una ciudad relegada al subdesarrollo con el monarca Has¨¢n II, pero su hijo, Mohamed VI decidi¨® convertirla en la joya del norte, la segunda potencia econ¨®mica del pa¨ªs, por detr¨¢s de Casablanca. El principal motor de desarrollo fue el puerto de T¨¢nger Med, inaugurado en 2007 y que ya logra competir de igual a igual con el puerto de Algeciras en tr¨¢fico de mercanc¨ªas. En 2008 lleg¨® Renault, y con ella se crearon 7.000 puestos de trabajo directos; despu¨¦s, lleg¨® el grupo PSA Peugeot-Citro?n. Y en 2018 se inaugur¨® una l¨ªnea de alta velocidad que une T¨¢nger con Casablanca. Y, mientras tanto, las gr¨²as han trabajado d¨ªa y noche en los ¨²ltimos a?os, han cambiado el paseo mar¨ªtimo de la ciudad y se han levantado decenas de hoteles, algunos de cinco estrellas.

Pero al lado de todas esas obras y ese desarrollo sigue habiendo una gran masa de poblaci¨®n que vive de forma precaria. T¨¢nger acogi¨® a muchos emigrantes procedentes de regiones del interior del pa¨ªs y no todo el mundo ha podido encontrar un trabajo digno.

Solo hay que viajar 70 kil¨®metros al este de T¨¢nger, al pueblo de Fnideq (antiguo Castillejos), el m¨¢s pr¨®ximo a Ceuta, para ver hasta qu¨¦ punto la falta de horizontes est¨¢ desesperando a una parte de la poblaci¨®n. Las ciudades marroqu¨ªes pr¨®ximas a Ceuta, como Fnideq y Tetu¨¢n, padecen no solo los estragos de la pandemia sino los de la lucha contra el contrabando hacia Espa?a, que impuls¨® el Gobierno marroqu¨ª desde octubre de 2019.

En la noche del viernes al s¨¢bado decenas de habitantes de Fnideq salieron a manifestarse en las calles del pueblo y la protesta fue reprimida de forma violenta por la polic¨ªa. De momento, las fronteras con Ceuta y Melilla permanecen cerradas a causa de la pandemia. Pero, una vez que se abran, puede que el contrabando haya terminado para siempre. El problema es que, de momento, no ha llegado a Fnideq ninguna alternativa econ¨®mica que reemplace las ganancias del contrabando. Y el desarrollo de T¨¢nger no alcanza, de momento, para generar tantos puestos de trabajo como la regi¨®n del norte necesita.