Secretos y mentiras
El resultado de la adaptaci¨®n del cl¨¢sico de Bergman en HBO es mucho mejor que las motivaciones, que asustan, sobre todo porque puede que tenga raz¨®n
Mucho antes de adaptar su miniserie Secretos de un matrimonio ¡ªcuyo primer cap¨ªtulo se estren¨® ayer en HBO Espa?a¡ª, Hagai Levi ya hab¨ªa demostrado que le tira mucho Bergman. Lo hizo con In treatment y con The affair. Por eso no extra?a que uno de los hijos del director sueco le hiciera el encargo. Levi se oblig¨® a creer que la original era mala, y asumi¨® que la manera de traerla a hoy era hacer un cambio de roles de g¨¦nero. Sin destripar mucho, la que manda ¡ªy se pasa¡ª es ella y el sumiso es ¨¦l. Tom¨® esa decisi¨®n porque cree que esa actitud hoy es m¨¢s f¨¢cil de digerir en una mujer que en un hombre, que ¨¦l parecer¨ªa un villano.
Para el carro, Levi. ?C¨®mo se envalentona uno tanto como para creer que puede superar a Bergman? ?Qu¨¦ es traerlo a hoy, si, como buen cl¨¢sico, la original (en Filmin) sigue siendo moderna? ?Los espectadores de HBO ya no aceptan perrer¨ªas de un hombre, pero s¨ª de una mujer? ?Por qu¨¦ tiene que caer bien nadie? El resultado es much¨ªsimo mejor que las motivaciones, pero las motivaciones asustan, sobre todo porque puede que Levi tenga raz¨®n.
La leyenda dice que el aumento de divorcios en Suecia en 1973 se debi¨® a la emisi¨®n de la miniserie. Claro que all¨ª la vio casi la mitad de la poblaci¨®n y HBO sigue siendo minoritaria. Adem¨¢s ahora no necesitamos sardinas para beber agua. A Bergman le encantaba la tele, le parec¨ªa algo asombroso. Me gusta imaginarlo con curiosidad por los secretos de otra pareja burguesa: los que est¨¢ contando Bigote Arrocet de lo suyo con Mar¨ªa Teresa Campos ¡ªque ya mandaba hace 30 a?os y fue abandonada por ¨¦l¡ª en el reci¨¦n estrenado reality de Telecinco, Secret story.
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