La fuerza acompa?a a ¡®Obi-Wan Kenobi¡¯, una serie deslumbrante

Incluso m¨¢s que ¡°hace mucho tiempo, en una galaxia muy muy lejana¡±, la frase m¨¢s importante de la saga de Star Wars es: ¡°Ay¨²dame, Obi-Wan Kenobi, eres mi ¨²nica esperanza¡±. Es el mensaje que la princesa Leia, capturada por Darth Vader, env¨ªa al anciano jedi, convertido en un anacoreta en un planeta des¨¦rtico llamado Tatooine. Luke Skywalker, un joven granjero con sue?os espaciales, logra hacerle llegar este holograma gracias a la cabezoner¨ªa de un robot, R2D2, que se comunica a base de pitidos, aunque siempre se entiende perfectamente lo que quiere decir. Aquel encuentro cambiar¨¢ la historia de la galaxia.

Si alguien merec¨ªa una serie a la altura de su leyenda este era el personaje que primero interpret¨® Alec Guinness y luego Ewan McGregor y, afortunadamente para los fanes de la saga, acaba de conseguirla. El primer cap¨ªtulo de Obi-Wan Kenobi, la serie sacada del universo de Star Wars que acaba de estrenar Disney+, es sencillamente deslumbrante. El segundo episodio rebaja un poco las expectativas ¡ªse estrenaron dos el pasado viernes¡ª, aunque no deja de ser un buen relato de aventuras en un planeta lleno de ecos de Blade Runner.

Para los que siguieron la saga gal¨¢ctica por orden de estreno en salas, y no por orden cronol¨®gico, y, sobre todo, para los que creen ¡ªcomo el autor de estas l¨ªneas¡ª que la fuerza reside fundamentalmente en los tres primeros episodios, La guerra de las galaxias, El imperio contraataca y El retorno del Jedi ¡ªque en realidad se encuentran en medio de la narraci¨®n¡ª, Obi-Wan Kenobi resultaba un personaje fascinante. Durante el rodaje en T¨²nez, Alec Guinness, uno de los mejores actores de todos los tiempos, no paraba de quejarse ante George Lucas de lo que consideraba frases rid¨ªculas tipo ¡°que la fuerza te acompa?e¡±. Ninguno era consciente de lo que iba a significar ni aquella pel¨ªcula ni aquella saga, ni tampoco que esa sentencia iba a convertirse en el epicentro de un imperio cultural y econ¨®mico.

La serie Obi-Wan Kenobi se enfrenta a los misterios con los que empezaba La guerra de las galaxias: ?Qu¨¦ hac¨ªa aquel anciano sabio en un planeta perdido? ?Qui¨¦n es Leia? ?Por qu¨¦ la fuerza reside en Skywalker? ?C¨®mo fueron exterminados los jedis? ?C¨®mo implant¨® el Imperio su reinado de terror? Las pel¨ªculas y las series del universo Star Wars, que se multiplican con mayor o menor fortuna, dependen no tanto del atractivo de los buenos ¡ªaunque Ewan McGregor es un Obi-Wan estupendo¡ª, sino de los malos. Y aqu¨ª son dif¨ªcilmente superables: unos siniestros inquisidores que recorren el universo para exterminar a los miembros de esa orden de monjes guerreros, capaces de controlar la fuerza.

Con un despliegue visual intenso y lleno de sorpresas, Obi-Wan Kenobi est¨¢ cargada de gui?os hacia los que llevan d¨¦cadas atrapados por la saga que cre¨® George Lucas, inspirado por un c¨®ctel imposible ¡ªdesde Camelot y los caballeros de la Mesa Redonda hasta los w¨¦sterns de John Ford o los libros del antrop¨®logo Joseph Campbell¡ª; pero tambi¨¦n ofrece personajes que pueden servir de gancho para los que llegan de nuevas a la galaxia. Hay algo nuevo y, a la vez, extra?amente familiar en esta serie, tal vez porque es capaz de responder a preguntas que algunos nos hicimos cuando ¨¦ramos ni?os y de plantear cuestiones que acompa?ar¨¢n durante una vida a los que se incorporan ahora a la saga.

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