¡®Paparazzi¡¯, valer m¨¢s por lo que callas que por lo que cuentas
En el documental de Movistar+, cada testimonio explica por qu¨¦ los audios entre rey y Rey despiertan menos controversia de la que deber¨ªan entre los que informan: todos lo sab¨ªan todo, pero callaban
C¨®mo estaremos de saturados de informaci¨®n que el pasado mi¨¦rcoles la publicaci¨®n de una conversaci¨®n delicad¨ªsima entre el rey em¨¦rito y B¨¢rbara Rey qued¨® opacada por la presencia de Bel¨¦n Esteban y Mar¨ªa Pati?o en La revuelta. Los judiones derrotaron a las conspiraciones. Hay quien sigue viendo en lo de Broncano un Caballo de Troya del gobierno para adoctrinar nuestras mentes atolondradas, sin cuestionarse que en esa misma TVE cocina carabineros Pitingo, implacable azote del sanchismo, o as¨ª se ve ¨¦l. A ver si va a ser que eso de que en Espa?a no se puede hablar de nada es una sandez. Cuando en un pa¨ªs no puedes hablar de nada te pasa como a los hinchas del Valencia, que por hacer una gracieta contra Peter Lim han terminado su luna de miel en Singapur retenidos y sin pasaporte. Aqu¨ª te pones estupendo con el poder y terminas en el plat¨® de Iker Jim¨¦nez. Eso hoy; en aquel pasado que tanto a?oran los que se sienten silenciados, te desconectaban el micro por casi todo. Lo comprobaron Paloma Chamorro, Carlos Tena y Lolo Rico que esta semana coincidieron en La 2 v¨ªa reposici¨®n de los espl¨¦ndidos documentales que glosaron sus trayectorias.
En aquella Espa?a se nos proteg¨ªa de nosotros mismos, dicen entre risas en Paparazzi, el documental sobre la trastienda de las exclusivas que acaba de estrenar Movistar Plus+. De judiones no se habla, pero se insin¨²an chanchullos que se nos ocultaban, no fuera que de la que sal¨ªamos a dar una vuelta por Simago nos diese por derrocar la democracia. Las portadas se engalanaban con sonrisas falsas mientras los due?os de las publicaciones pagaban para que las historias m¨¢s golosas no viesen la luz, o m¨¢s bien para guardarlas en el caj¨®n de los por si acaso. Ser¨¢ que estos d¨ªas lo tengo metido en la nariz, pero percibo cierto aroma a chantaje. Cada testimonio del documental explica por qu¨¦ tanto lo que dicen como lo que insin¨²an esos audios entre rey y Rey ¡ªque lo mismo dan para abrir una investigaci¨®n que para un Homeland patrio¡ª despierta menos controversia de la que deber¨ªan entre los que informan. Todos lo sab¨ªan todo de todos, pero no nos lo contaron porque, como martillea Pe?afiel, valen m¨¢s por lo que callan que por lo que dicen. Obten¨ªan m¨¢s beneficios por su silencio que por sacar a la ciudadan¨ªa de la inopia. Cu¨¢ntos documentos de inter¨¦s seguir¨¢n en los cajones hasta que resulte m¨¢s lucrativo dejar caer a los implicados que mantener el pico cerrado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.