Turismo entre apagones y poca comida: ?por qu¨¦ Cuba sigue invirtiendo en hoteles?
Pese a que cada vez llegan menos visitantes a la isla y la ocupaci¨®n hotelera ha ca¨ªdo, el Gobierno ha destinado en 2024 casi el 40% de sus inversiones a actividades relacionadas con el turismo
El barman recuerda el d¨ªa en que, trabajando en su cantina frente al Mar Caribe, un turista alem¨¢n le orden¨® un filete de pescado.
¡ª No tengo, se?or. Lo que tengo es cerdo, res y pollo, dice el cantinero, que no dir¨¢ su nombre porque no est¨¢ dispuesto a perder su trabajo de 25 a?os en un hotel de Cayo Largo del Sur.
¡ª ?Pero tienen todo ese mar y no tienen pescado?, recuerda que le contest¨® el alem¨¢n.
Otras veces el barman ha tenido que ingeni¨¢rselas para satisfacer al cliente. Se ha dado el caso de un turista que llega y le pide un Cubalibre, uno de los c¨®cteles cubanos m¨¢s famosos, a base de ron blanco, Coca Cola y lim¨®n. Si falta alguno de los ingredientes anteriores, el bartender no se detiene: ¡°Le digo: ¡®Mira, no te puedo hacer un Cubalibre, pero te puedo hacer otra cosa¡¯. Si tengo refresco de lim¨®n, le digo que le voy a hacer un trago afrodis¨ªaco que en mi ciudad se llama Santo Libre. Eso es mentira, es refresco de lim¨®n con ron a?ejo. Pero el cliente acepta y le digo: tomorrow, you tell me [ma?ana me cuentas]. A veces resuelves la situaci¨®n, pero a veces no puedes. Los canadienses son grandes bebedores de cerveza y, si no hay cerveza, no hay nada que inventar¡±, afirma.
Su hotel, una instalaci¨®n operada por el grupo Gran Caribe y la empresa Blue Diamond, est¨¢ situado en el archipi¨¦lago de los Canarreos, un sitio paradis¨ªaco al sudoeste de Cuba. Para ¨¦l, no ha habido mejores a?os que los que transcurrieron entre 2012 y 2015, tiempo en que los turistas llegaban en masa al hotel, en aviones que sal¨ªan desde Italia, Canad¨¢ o Alemania y aterrizaban directamente en el Cayo. O los turistas estadounidenses, que alcanzaron la cifra r¨¦cord de 173.550 en 2014, el mismo a?o en que Barack Obama anunci¨® la normalizaci¨®n de las relaciones diplom¨¢ticas con La Habana.
¡°Ahora mismo esos vuelos directos no existen, vienen turistas que traen de La Habana, Varadero o turistas nacionales¡±, asegura el trabajador, quien se lamenta de no haber visto nunca m¨¢s el cartel de lleno en el hotel, como s¨ª lo estuvo en sus ¨¦pocas doradas, donde las 600 habitaciones con que cuenta la instalaci¨®n estaban ocupadas.
Esta semana, por ejemplo, el hotel solo tiene 90 habitaciones ocupadas, en su mayor¨ªa por turistas canadienses, los llamados snow birds, que se escapan a vacacionar en el tr¨®pico y que hoy llenan el vac¨ªo que han dejado otros viajeros. Solamente el a?o pasado, un mill¨®n de turistas canadienses estuvieron de paso por la isla. Pero en general hay una ca¨ªda en el n¨²mero de visitantes que llegan a Cuba. Y esto se ve tambi¨¦n en las calles desoladas. A m¨¢s de tres a?os de abrir las fronteras tras la pandemia de coronavirus, los visitantes son mucho menos de los que esperaba el Gobierno, seg¨²n cifras oficiales. En 2023, proyectaban recibir 3,5 millones de turistas y solo llegaron 2,4 millones. Este a?o, los n¨²meros son incluso m¨¢s desalentadores. Juan Carlos Garc¨ªa Granda, ministro de Turismo, ha confirmado que el pa¨ªs prev¨¦ cerrar este a?o con la reducida cifra de 2,2 millones de turistas.
Aun as¨ª, el Gobierno sigue apostando por la industria del turismo como la locomotora de la econom¨ªa cubana, en medio de una crisis econ¨®mica que, seg¨²n los investigadores, supera el llamado Periodo Especial. Un informe de la Oficina Nacional de Estad¨ªstica e Informaci¨®n (ONEI) confirma que, de enero a junio de 2024, las autoridades destinaron casi el 40% de sus inversiones a actividades que giran alrededor del turismo, como hoteles, restaurantes, inmobiliaria, alquileres y servicios empresariales, entre otros. El pa¨ªs invirti¨® 4,6 veces m¨¢s en la construcci¨®n de habitaciones de hoteles y en servicios empresariales y de alquiler que en otros sectores actualmente deteriorados como la educaci¨®n, la salud o la agricultura. Este a?o, el Gobierno gast¨® en hoteles y restaurantes 4.931 millones de pesos (15,1 millones de d¨®lares), un incremento del 112,1% frente a los 2.325 millones invertidos en 2023.
¡°Los destinos de las inversiones no ponderan adecuadamente las necesidades econ¨®micas y sociales¡±, asegura el economista cubano Ricardo Torres, ex investigador del Centro de Estudios de la Econom¨ªa Cubana y profesor en la American University de Washington. ¡°Es cierto que no se puede dedicar todo a programas sociales, porque hay que invertir para asegurar el crecimiento econ¨®mico, pero la situaci¨®n actual rebasa cualquier consideraci¨®n de ese tipo. Ni desde el punto de vista productivo se justifican recursos multimillonarios dedicados a un sector en franco declive. Si se hubiesen dedicado a otros sectores, por ejemplo, energ¨ªa y alimentos, otra ser¨ªa la situaci¨®n hoy¡±.
La pregunta que se hacen los cubanos y la inc¨®gnita a la que los economistas buscan sentido es la siguiente: en un pa¨ªs con un sistema electroenerg¨¦tico que colapsado, con constantes apagones programados, una crisis alimentaria y sanitaria sin recuperaci¨®n a la vista, ?por qu¨¦ el Gobierno sigue destinando sus recursos al turismo?
¡°El turismo no es la locomotora de antes¡±
¡°Los malos n¨²meros del sector reflejan claramente el sinsentido de una estrategia que construye hoteles car¨ªsimos en medio del desmoronamiento del resto del pa¨ªs¡±, asegura Torres. ¡°?C¨®mo puede florecer el turismo sin electricidad? Creo que las razones para esta decisi¨®n mantenida por a?os no est¨¢n en la econom¨ªa, y francamente ninguna autoridad ha ofrecido esclarecimientos convincentes a la ciudadan¨ªa¡±.
El economista cree que el Gobierno debe una explicaci¨®n al pueblo a las preguntas que muchos se hacen en las calles c¨®mo por qu¨¦ no hay comida en las bodegas, pero s¨ª en los hoteles; cu¨¢l es la raz¨®n para que vendan un ¡°turismo de salud¡± si los hospitales est¨¢n colapsados o por qu¨¦ hay tanto d¨¦ficit de viviendas y siguen levantando hoteles gigantescos en las zonas principales de La Habana.
En los a?os noventa, con una econom¨ªa deprimida tras la p¨¦rdida de la ayuda proveniente de la URSS, Fidel Castro aceler¨® el desarrollo de la industria tur¨ªstica para que el pa¨ªs saliera a flote con el reclutamiento de las divisas que tra¨ªan los visitantes extranjeros. El monopolio estatal Gaesa, en manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), junto a su empresa Gaviota, comenzaron a crear acuerdos con grandes cadenas como las espa?olas Meli¨¢ e Iberostar para la construcci¨®n de habitaciones hoteleras. El Gobierno tambi¨¦n despenaliz¨® la tenencia de d¨®lares como parte de la reforma econ¨®mica que permit¨ªa comprar con esa moneda en lugares antes solo destinados a visitantes internacionales. Por a?os, el turismo fue una de las principales fuentes de ingresos de divisas al pa¨ªs, luego del env¨ªo de remesas y las sumas que reporta la exportaci¨®n de servicios profesionales, principalmente m¨¦dicos.
¡°Si bien el desempe?o era muy mejorable, sin dudas contribuy¨® a la recuperaci¨®n econ¨®mica luego de la tremenda crisis de los noventa¡±, dice Torres. ¡°El turismo era el ¨²nico sector que, por diversos canales, dejaba dinero para el Gobierno, pero tambi¨¦n en los hogares cubanos. Y eso se potenci¨® mucho con el ascenso del sector privado, que devino l¨ªder de servicios al visitante¡±. Hace 10 a?os, Cuba se convirti¨® en la postal vintage en la que millones de turistas quer¨ªan aparecer. En la era Obama, casi cinco millones de turistas llegaron a la isla. Aunque luego Donald Trump dio marcha atr¨¢s al acercamiento y, entre otras cosas, restringi¨® los viajes de turistas estadounidenses o los servicios de los cruceros que llegaban a costas cubanas, en 2018 la isla recibi¨® 4,2 millones de turistas y 4,6 millones en 2019. El golpe m¨¢s duro a esa industria fue la pandemia de coronavirus.
Casi aterrorizados ante la idea del cierre de las fronteras, el Gobierno cubano se mostr¨® renuente a prescindir por completo de los ingresos del turismo al inicio de la pandemia y combin¨® periodos de clausura total con otros de cierta apertura. En estos ¨²ltimos, las autoridades llegaron a incentivar a los turistas a probar las vacunas cubanas contra la covid-19, vendieron ¡°paquetes de confinamiento¡± para nacionales o extranjeros que arribaban al pa¨ªs y aparecieron comerciales al estilo: ¡°playa, Caribe, mojitos y vacunas. Todo en un mismo lugar¡±. Adem¨¢s, el Gobierno cubano sigui¨® invirtiendo y levantando hoteles en sus principales polos. En esa ¨¦poca se destin¨® al sector el 45,6% de la inversi¨®n total, seg¨²n cifras de la ONEI.
Sin embargo, el coronavirus hizo estragos en la econom¨ªa cubana, y el sector tur¨ªstico se desplom¨®. En 2020, se recibieron 1.084.728 visitantes. En el 2021, 356.470. En 2022, la cifra fue de 1,6 millones. La consultora europea ForwardKeys asegur¨® que Cuba era el pa¨ªs con la peor recuperaci¨®n tur¨ªstica del Caribe tras la pandemia. Destinos como M¨¦xico o Rep¨²blica Dominicana hoy ocupan los primeros lugares en los rankings de la regi¨®n. Este a?o, Rep¨²blica Dominicana rebasar¨¢ los 10 millones de turistas.
Para el economista Torres, ¡°queda claro que el turismo no es la locomotora de antes, y no lo ser¨¢ en el futuro previsible¡±. Aun as¨ª, el Gobierno sigue apostando su econom¨ªa a este sector, pese a que no se han vuelto a alcanzar las cifras precovid y es evidente la reducida ocupaci¨®n hotelera, que este a?o fue de un 28,4%. A Omar Everleny P¨¦rez Villanueva, exdirector del Centro de Estudios de la Econom¨ªa Cubana de la Universidad de La Habana, le cuesta entender por qu¨¦ el Estado cubano mantiene estas inversiones. ¡°Puede deberse a muchas cosas. Lo que he podido saber es que ese cr¨¦dito fue otorgado contra un plan econ¨®mico que preve¨ªa una recuperaci¨®n del turismo¡±, apunta. ¡°Me costar¨ªa mucho trabajo pensar que el Estado est¨¢ gastando ese dinero y sin embargo no tenga medicinas para la poblaci¨®n¡±.
¡°Creo que estaban pensando que en que en la ¨¦poca de (Joe) Biden podr¨ªa haber una mejor¨ªa, que habr¨ªa cruceros, turistas norteamericanos¡±, a?ade. ¡°Pero la conclusi¨®n es que el Estado concentr¨® mucho dinero en un sector de lenta recuperaci¨®n y descuid¨® otros importantes como la industria energ¨¦tica o la agricultura. Eso es inconcebible¡±. Adem¨¢s, Everleny apunta a factores concretos respecto a la ca¨ªda de los turistas de otros pa¨ªses. Los rusos, por ejemplo, han mermado tras la invasi¨®n a Ucrania. Mientras que los europeos podr¨ªan estar siendo disuadidos de viajar la isla por la restricci¨®n para quienes vayan a Cuba y luego quieran entrar a Estados Unidos con visa ESTA.
¡°Los turistas no solo vienen a los hoteles, vienen a ver Cuba¡±
Ambos economistas coinciden en que las noticias sobre la escasez de alimentos y los apagones tambi¨¦n pueden estar alejando a los turistas. ¡°Nadie va a venir a un pa¨ªs donde hay largos apagones, jornadas de 14 o 16 horas¡±, afirma Everleny. ¡°Nadie va a venir a un pa¨ªs donde las calles son inseguras, tienen baches. Los propios hoteles dejan mucho que desear. No hay insumos¡±.
De hecho, no son raras la noticias de turistas que pasan malas experiencias por la situaci¨®n de la isla, como una canadiense que tuvo que ser operada y describi¨® el hospital como ¡°un escenario de pel¨ªcula de terror¡±, otra que demand¨® a la compa?¨ªa de viajes Sunwing tras pagar unas vacaciones en el Memories Varadero Beach Resort y encontrarse con falta de comida, papel higi¨¦nico y muchas cucarachas, e incluso una familia de ese mismo pa¨ªs cuyo familiar falleci¨® durante su visita a la Isla y les fue repatriado el cuerpo de otro turista ruso. El touroperador canadiense Sunwing retir¨® 26 hoteles en Cuba de sus ofertas, tras el apag¨®n masivo de octubre. Samantha Taylor, directora de marketing de Sunwing, dijo al sitio web de viajes Pax News que la situaci¨®n ¡°puede hacer tambalear la confianza de los consumidores¡±.
Preocupados por la posibilidad de que los turistas se espanten con estas noticias, el Ministerio de Turismo de Cuba ha dicho que si hay un sector al que se le garantiza la energ¨ªa el¨¦ctrica es al tur¨ªstico. Pero incluso con luz en los hoteles, ?c¨®mo se transporta la gente?; ?con qu¨¦ pa¨ªs se encuentran? Everleny considera que en Cuba es necesario ¡°un desarrollo extrahotelero¡±. ¡°Los turistas no solo vienen a los hoteles, vienen a ver Cuba, sus calles, su gente¡±, afirma el economista.
Mientras, el barman del hotel de Cayo Largo del Sur vive a diario el vuelco dr¨¢stico que ha dado el turismo en los ¨²ltimos a?os. Hace un mes comenz¨® la llamada temporada alta en Cuba y nada indica que lo vaya a ser. Tambi¨¦n dice que muchos trabajadores han abandonado sus puestos. ¡°Hay un ¨¦xodo masivo de personal experimentado, gente que hablaba varios idiomas. Eso nos ha afectado mucho¡±. Y los turistas le dicen que ya no es lo mismo que antes. ¡°El abastecimiento es fatal, a veces no hay caf¨¦, no hay az¨²car. Yo puedo entender que un hotel no tenga una exquisitez, pero que no haya harina, que no haya az¨²car... Ha habido d¨ªas que no hay huevos en el hotel, y ?c¨®mo le explicas a un canadiense que tiene que desayunar sin huevos? Entonces el cliente se siente estafado. No entendemos c¨®mo siguen haciendo hoteles nuevos si los que ya tienes se est¨¢n destruyendo¡±.