Frankie Miranda: ¡°En estas cinco semanas muchos votantes de Trump se han arrepentido¡±

El mi¨¦rcoles pasado Frankie Miranda se cit¨® en el Capitolio con otros l¨ªderes latinos. Como presidente de la Federaci¨®n Hispana, se uni¨® a los responsables de varias de las organizaciones latinas m¨¢s relevantes convocadas por UnidosUS para denunciar las medidas de la Administraci¨®n Trump que est¨¢n perjudicando a los latinos. Con carteles en ingl¨¦s y espa?ol en los que se le¨ªa: ¡°Es hora de rendir cuentas¡±, pidieron que se pare la ofensiva contra su comunidad. Los l¨ªderes de grupos nacionales y locales criticaron el recorte de los fondos p¨²blicos aprobado un d¨ªa antes por la Casa de Representantes, que afectar¨¢ a los latinos que se benefician de los programas p¨²blicos de salud Medicaid y Medicare; la interrupci¨®n de los fondos p¨²blicos que reciben y que les obliga a parar los servicios que ofrecen, y las detenciones y deportaciones que han impuesto el miedo y la ansiedad en la comunidad latina.

Miranda advierte del impacto que estas pol¨ªticas tendr¨¢n en todos los ciudadanos, no solo los latinos. La Federaci¨®n Hispana fue fundada en 1990 en Nueva York, con el objetivo de empoderar a la comunidad, apoyar a las familias hispanas y fortalecer las instituciones latinas.

Pregunta. ?Qu¨¦ ha cambiado para las asociaciones latinas en el primer mes de la Administraci¨®n Trump?

Respuesta. Las ¨²ltimas cinco semanas han sido de trabajo arduo tratando de proteger a las comunidades, preservar las organizaciones y luchar en contra de esta congelaci¨®n de fondos federales. A pesar de que las cortes han dicho que no debe proceder y que es ilegal, las agencias han interpretado las ¨®rdenes ejecutivas de diferentes maneras y los fondos no est¨¢n llegando al sector sin fines de lucro que provee servicios esenciales a las comunidades. Esto est¨¢ poniendo en peligro la supervivencia de muchas de estas organizaciones.

P. ?Qu¨¦ est¨¢n haciendo para intentar revertirlo?

R. Hemos estado trabajando con los fiscales generales de los Estados, especialmente con la fiscal general del Estado de Nueva York, Letitia James, para proveerles la informaci¨®n de c¨®mo las comunidades est¨¢n siendo afectadas, para que puedan utilizarla en las demandas que se est¨¢n presentando para detener esas ¨®rdenes ejecutivas. Hay m¨¢s de 50 demandas en estos momentos tratando de impedir que puedan proceder. Adem¨¢s, estamos haciendo saber a todo el mundo que les afecta.

P. ?De qu¨¦ manera les afecta?

R. Estas ¨®rdenes ejecutivas van a tener un efecto negativo en la econom¨ªa del pa¨ªs, que fue el tema m¨¢s importante para los latinos en las ¨²ltimas elecciones y para los americanos en general. Se han preocupado por la inflaci¨®n, el costo de vida, los trabajos y las viviendas asequibles. Y nada de lo que hemos visto en las ¨²ltimas cinco semanas est¨¢ verdaderamente apuntando a que va a resolver ninguno de estos problemas.

P. Donald Trump obtuvo una amplia victoria en las elecciones pasadas, en parte gracias a un aumento del apoyo de los latinos, que tradicionalmente han dado su voto a los dem¨®cratas.

R. Se sigue vendiendo esta narrativa falsa de que nuestra comunidad apoya una agenda MAGA. Y sabemos muy bien por las encuestas que hicimos antes de las elecciones y ese mismo d¨ªa que a los hispanos les interesa la econom¨ªa y que la supermayor¨ªa quiere una reforma de inmigraci¨®n humanitaria que ofrezca una v¨ªa para que las personas puedan obtener la ciudadan¨ªa. Creen en los derechos reproductivos, en los derechos LGBTQ, en ponerle impuestos a los supermillonarios de Estados Unidos... As¨ª que esta idea de que no estamos representando esta agenda progresista es falsa y vamos a combatirla. Hay varias personas que se movieron a la columna republicana, pero la mayor¨ªa de los latinos votaron por Kamala Harris y el Partido Dem¨®crata. Estamos obteniendo m¨¢s informaci¨®n de los Estados y en marzo se va a saber exactamente c¨®mo fue el porcentaje de personas que votaron por un partido u otro.

P. ?Cree que despu¨¦s de un mes de Gobierno de Trump ha habido votantes arrepentidos?

R. Sabemos que ha habido un cambio de sentimiento y ha sido evidente, por ejemplo, en la comunidad venezolana en Florida, luego de que se anunciara la suspensi¨®n del TPS (Estatus de Protecci¨®n Temporal) para 600.000 venezolanos. Ha tenido un impacto devastador en las comunidades venezolanas en ese Estado, donde algunos demostraron apoyo al presidente Trump durante su campa?a. As¨ª que ya sabemos que ha habido un cambio de sentimiento y que va a haber lo que en ingl¨¦s se llama buyer¡¯s remorse (arrepentimiento del comprador). Muchas personas creyeron que no se concentrar¨ªa en eso, que era solo ret¨®rica. Sin embargo, se est¨¢ encargando de ello y no de resolver los problemas de calidad de vida y econ¨®micos de cada uno de los americanos.

P. Aunque las preocupaciones econ¨®micas fueran el principal m¨®vil del voto latino, la pol¨ªtica migratoria es un asunto que les afecta directamente.

R. Es fundamental, pero nosotros queremos hacer llegar el mensaje de que, a pesar de que vamos a continuar diciendo que son pol¨ªticas xen¨®fobas, injustas y que no se corresponden con los principios americanos, queremos tambi¨¦n demostrar que hay un impacto econ¨®mico, para que ese discurso llegue a todos los americanos. A aquellos que dicen que ¡°esto a m¨ª no me afecta¡±, para demostrarles que esto va a tener un impacto devastador en la econom¨ªa y que al final todos vamos a salir perdiendo. La ofensiva contra la inmigraci¨®n afecta a la econom¨ªa, a todas las familias americanas que est¨¢n debatiendo c¨®mo pagar las cuentas de la luz o comprar comida. No estamos abandonando el aspecto humanitario de esta lucha, pero tratamos de conectarlo con la econom¨ªa.

P. El freno a las medidas que Trump est¨¢ imponiendo est¨¢ llegando solo de los tribunales. ?No se echa en falta una oposici¨®n pol¨ªtica?

R. En estos momentos las cortes son la manera m¨¢s eficiente de combatir el n¨²mero r¨¦cord de ¨®rdenes ejecutivas, que en muchos casos son confusas y contradictorias. Nuestras organizaciones han estado en comunicaci¨®n con oficiales electos y hemos decidido que no vamos a responder a cada una de estas noticias que aparecen a cada momento porque estar¨ªamos perdiendo el tiempo. Nuestro mejor recurso son los tribunales. El problema es que el proceso va a tomar un tiempo y mientras muchas personas van a ser expulsadas del pa¨ªs, otras van a quedarse sin trabajo, otras van a seguir perdiendo servicios esenciales¡­ La gran mayor¨ªa de estas ¨®rdenes ejecutivas se van a resolver en las cortes, especialmente aquellas que son completamente inconstitucionales, como el derecho a la ciudadan¨ªa de las personas que nacen en este pa¨ªs.

P. ?Cu¨¢les son las respuestas que est¨¢n obteniendo de los congresistas?

R. Quieren conversar sobre estrategia. Hoy mismo (el pasado mi¨¦rcoles) tenemos dos importantes reuniones con el l¨ªder de la minor¨ªa en el Senado, el senador Chuck Schumer, y con el presidente del Caucus Hispano, el congresista Adriano Espaillat, para recomendar que haya una comunicaci¨®n directa con las organizaciones de base, que son las que pueden dar mejor informaci¨®n sobre el sentimiento y las necesidades de la comunidad. Existe esta idea de que los grupos nacionales y los que englobamos varias organizaciones como nosotros no representamos los intereses verdaderos de la comunidad, lo cual es otra vez esa narrativa falsa sobre qui¨¦nes somos los hispanos y cu¨¢les son nuestros intereses y aspiraciones.

P. ?Cu¨¢les son los mensajes que mandan a quienes est¨¢n viviendo momentos de p¨¢nico y ansiedad por las deportaciones?

R. Primero, que conozcan sus derechos. Todas nuestras organizaciones han iniciado programas de informaci¨®n para aquellas personas que pueden continuar su proceso de ciudadan¨ªa y para que sepan qu¨¦ tienen que hacer cuando se encuentren con agentes de inmigraci¨®n o cualquier otra autoridad policial. Tenemos que asegurarnos de que los servicios esenciales llegan a las comunidades y alentar al sector privado para que contin¨²e sus compromisos sobre diversidad, equidad e inclusi¨®n. Solo han sido cinco semanas, pero se siente como mucho m¨¢s tiempo.