?Crees que el futuro ser¨¢ mejor o peor? As¨ª de pesimistas son los espa?oles
La aplastante mayor¨ªa dice que en 10 a?os habr¨¢ m¨¢s soledad, m¨¢s desigualdad, m¨¢s gente ego¨ªsta y m¨¢s violencia. Pero un optimista como yo es capaz de encontrar buenas noticias entre todo eso
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Un estudio reciente del CIS confirm¨® esta semana algo que hemos visto en otros trabajos anteriores: los espa?oles expresan un profundo pesimismo sobre el futuro del pa¨ªs. Para un optimista como yo, los datos son tremendos:
Preguntados por la Espa?a de dentro de 10 a?os, la gran mayor¨ªa dice que habr¨¢ m¨¢s soledad, que se ensanchar¨¢n las diferencias sociales, que m¨¢s gente se mover¨¢ por su propio inter¨¦s y que seremos m¨¢s materialistas. ?Habr¨¢ m¨¢s o menos delitos? Los que dicen ¡°m¨¢s¡± quintuplican a los que dicen ¡°menos¡±. Muchos de esos presagios me parecen endebles cuando uno los confronta con datos, porque nuestra trayectoria reciente a menudo es positiva. Pero algunos puntos me sorprenden especialmente: ?tanta gente cree que seremos m¨¢s racistas, que tendremos peores trabajos y que da?aremos (?a¨²n m¨¢s!) el medio ambiente?
El pesimismo es generalizado. Los espa?oles desconfiamos de casi cualquier instituci¨®n. A la justicia le ponemos un 5 sobre 10 de confianza, y puntuamos todav¨ªa peor al parlamento (4,4), a los medios (4,1), al Gobierno (4), a los sindicatos (3,8) y a los partidos (3,8). Y nuestro problema no es solo con Espa?a. Preguntados por el futuro del mundo, la mayor¨ªa augura m¨¢s desigualdades y m¨¢s guerras.
Sin embargo, y aunque sigo preocupado por todo lo anterior, he encontrado tres motivos para matizar estos datos y mantenerme positivo.
1. Somos optimistas con algunas cosas
Como muestra el gr¨¢fico, la mayor¨ªa de espa?oles cambian su actitud cuando se le pregunta por ciertos asuntos concretos. Por ejemplo, el 80% cree que en diez a?os habr¨¢ m¨¢s mujeres con responsabilidad. Tambi¨¦n somos optimistas con el teletrabajo, la libertad sexual y con el tiempo de ocio.
2. ?Y si el pesimismo es impostado?
A veces los encuestados somos parad¨®jicos, optimistas cuando se nos pregunta por victorias y negativos cuando se nos habla de problemas. Mi impresi¨®n es que en nuestras respuestas se mezcla la pura predicci¨®n ¡ªlo que crees que pasar¨¢¡ª con una voluntad de denunciar los peligros que quieres evitar.
Es lo que me sugieren los datos por edad. Mirad las respuestas. Por un lado, los j¨®venes son los m¨¢s optimistas con cambios positivos, como que retroceda el racismo. Pero, al mismo tiempo, son los m¨¢s pesimistas con cambios negativos. Por ejemplo, solo el 10% de los mayores de 75 a?os creen que en el futuro ¡°habr¨¢ menos tiempo libre¡±, frente al 43% de los j¨®venes que dicen lo mismo. Quiz¨¢ me equivoque, pero mi sensaci¨®n es que los j¨®venes no expresan tanto un pron¨®stico como un deseo: para su futuro quieren tiempo libre y trabajos donde realizarse.
3. En abstracto hay m¨¢s optimistas
En otro momento de las entrevista del CIS, el estudio pregunta en general. ¡°Hablando del futuro y de los cambios sociales y econ¨®micos¡±, preguntaron: ?crees que habr¨¢ pocos o muchos cambios? ?Y que ser¨¢n positivos o negativos? Lo interesante es que con esa formulaci¨®n, que no evoca ning¨²n problema particular, salen a la luz m¨¢s personas optimistas.
Los que creen que los cambios ser¨¢n positivos (39%) se imponen a los que creen que ser¨¢n negativos (35%). Lo hacen sobre todo entre los muy j¨®venes y entre los muy mayores, donde los optimistas llegan a doblar a los pesimistas. Es bonita la paradoja: aunque los ancianos suelen ser m¨¢s conservadores y reacios a los cambios, aqu¨ª son los m¨¢s positivos de todos.
Dejadme recordar que este pesimismo social no es una particularidad espa?ola. Es un patr¨®n como m¨ªnimo occidental: solemos ser optimistas individuales y pesimistas sociales. Sentimos, de manera exagerada, que el futuro nos tratar¨¢ bien a nosotros y mal al conjunto de la sociedad. En Our World in Data ofrecen algunas pistas para explicar lo segundo. Por un lado, nos falta informaci¨®n porque no solemos pensar sobre la marcha del mundo. Y cuando eso ocurre, los humanos respondemos con atajos. Por ejemplo, asumimos que si el CIS nos pregunta por un tema, ser¨¢ que hay un problema ¡ªsi no, ?por qu¨¦ preguntar?¡ª. Tambi¨¦n nos dejamos influir por lo m¨¢s llamativo, que suele ser lo negativo: es m¨¢s f¨¢cil ver las muertes de una ola de calor que las no-muertes que evit¨® el aire acondicionado.
Los m¨¢s pesimistas desconfiar¨¦is del p¨¢rrafo anterior, pero dejadme aportar una prueba de nuestra tendencia a la negatividad. El truco es pensar en el pasado en lugar de en el futuro. Sup¨®n que pregunto: ¡°En los ¨²ltimos 20 a?os, la proporci¨®n de la poblaci¨®n mundial que vive en extrema pobreza crees que ha bajado, que ha subido o que se ha mantenido igual?¡±. La mayor¨ªa de la gente dice que hay m¨¢s pobreza. Eso dice el 56% de los espa?oles. ?Pero no es verdad! Entre 1997 y 2017, cuando se hizo la encuesta, la tasa de pobreza se redujo a una tercera parte.
Mi interpretaci¨®n es sencilla: nuestra mirada est¨¢ te?ida de pesimismo, y no solo cuando la dirigimos al incierto futuro, tambi¨¦n cuando juzgamos nuestro pasado.
Otras historias
? 1. ?Tienes buenas noticias? Si llevas tiempo leyendo esta newsletter, ya sabes que acabar¨¦ el a?o reuniendo cuarenta o cincuenta buenos datos de 2023. Tengo una lista creciente, pero he pensado en pediros ayudas: ?Te viene a la cabeza alguna buena noticia para mi lista? Un descubrimiento cient¨ªfico o una historia peque?a. M¨¢ndamela a kllaneras@elpais.es.
?? 2. Alucinante la app de Freepik para pintar ayudado por una IA. T¨² manejas dos controles: 1) escribes un texto con lo que quieres, y 2) pintas un boceto en el panel de la izquierda. El resultado sale en la pantalla de la derecha¡ ?en tiempo real! Aqu¨ª puedes ver mis pinitos. Para probar la app puedes apuntarte aqu¨ª. Merece la pena.
? 3. Los salarios bajos son los que m¨¢s subieron desde 2018. Los salarios del 20% inferior crecieron un 18%, mientras que los del 20% superior bajaron un 5%. Este art¨ªculo de Javier Jorr¨ªn en El Confidencial analizaba los motivos. Primero, se ha creado empleo en sectores que pagan m¨¢s, lo que eleva los sueldos en general. Segundo, se nota la recuperaci¨®n econ¨®mica. Tercero, se subi¨® el salario m¨ªnimo (?un 40%!). Y por ¨²ltimo, algo indirecto pero esencial: mucha gente trabaj¨® m¨¢s horas ¡ªy as¨ª elevaron sus bajos salarios¡ª, gracias a la reforma laboral, que logr¨® sustituir contratos temporales e involuntariamente parciales por indefinidos de tiempo completo.
??????? 4. Despliegue de datos con ¡®Cu¨¦ntame¡¯. Esta semana se ha acabado la longeva serie y mis compa?eros han hecho despliegue: analizan 30.000 minutos de subt¨ªtulos, episodio por episodio, para descifrar las peripecias y relaciones de los Alc¨¢ntara con su entorno.
? 5. El mapa de las estrellas Michelin. Se concedieron esta semana y las pusimos sobre un mapa. Como se?al¨® en Twitter uno de los implicados, pod¨¦is comprobar que en Ja¨¦n hay cuatro restaurantes con estrella en pr¨¢cticamente una manzana.
? 6. Una historia incre¨ªble. ?Os acord¨¢is cuando en 2016 se apag¨® Netflix, Spotify, Twitter y medio internet? He le¨ªdo fascinado la historia de los tres jovenc¨ªsimos hackers detr¨¢s de Mirai, el c¨®digo responsable de aquello. Es un relato de cibercrimen, amistad, comunidades de internet, caos, traici¨®n y redenci¨®n. Es un texto muy largo, pero si lees ingl¨¦s y te interesa m¨ªnimamente el asunto, es 100% recomendable.
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