Por qu¨¦ China, donde el ajedrez estuvo prohibido, es hoy una potencia que persigue el Mundial absoluto

La m¨²sica de Beethoven, el ajedrez y todo lo que se interpretaba como signo del ¡°decadente capitalismo¡± fue prohibido en China durante la Revoluci¨®n Cultural (1965-1976), un movimiento sociopol¨ªtico que caus¨® millones de muertos y detenidos durante los ¨²ltimos a?os del l¨ªder supremo Mao Zedong (1893-1976). Hoy todos los medios de comunicaci¨®n cubren el Mundial de Astan¨¢ (Kazajist¨¢n) donde Liren Ding lucha por ser el primer campe¨®n chino absoluto tras vencer este jueves al ruso Ian Niep¨®mniashi en la 4? de las 14 partidas previstas; la 5? se disputa el s¨¢bado. Desde 1991, China ha ganado todos los dem¨¢s t¨ªtulos, femeninos, juveniles y por equipos.

Cuando Mao ya estaba muy enfermo y gobernaba La Banda de los Cuatro, la polic¨ªa multaba a los jugadores callejeros y registraba las casas en busca de libros t¨¦cnicos para quemarlos en las plazas p¨²blicas. Pero cuando tom¨® el poder Den Xiaoping -el autor de la famosa frase: ¡°No importa que el gato sea blanco o negro, si caza ratones¡±-, la pol¨ªtica hacia el ajedrez cambi¨® por completo con dos objetivos: dar prioridad a la competici¨®n femenina y trasvasar el mayor n¨²mero posible de jugadores de ajedrez chino -modalidad muy popular con un r¨ªo que atraviesa el tablero- al internacional.

El ¨¦xito fue tremendo: Xie Jun, nacida durante la Revoluci¨®n Cultural, fue campeona del mundo femenina en 1991. Y surgieron m¨¢s jugadoras fort¨ªsimas que pronto rompieron el dominio de rusas y georgianas. Entonces se estimul¨® el ajedrez masculino, lo que se tradujo en que China se llev¨® el oro de las Olimpiadas de Ajedrez de 2014 en Tr?mso (Noruega) y 2018 en Batumi (Georgia). Mientras tanto, entre 1991 y 2018, los ni?os y adolescentes chinos ganaron en alg¨²n momento los Mundiales de todas las categor¨ªas (sub 8, 10, 12, 14, 16, 18 y 20), masculinos y femeninos.

Pero no hay ning¨²n chino ahora mismo entre los cien mejores sub 20. La secretaria general de la Federaci¨®n China, Tian Hongwei, lo atribuye a la pandemia (especialmente dura en su pa¨ªs en cuanto a confinamientos y prohibiciones de viajar) y a otro factor espec¨ªfico: ¡°Organizamos muchos torneos que no se contabilizan para el escalaf¨®n internacional porque tenemos much¨ªsimos jugadores sin r¨¢nking¡±. Los registrados en la federaci¨®n son ¡°unos cinco millones¡±, pero nadie duda de que los reales, repartidos por todos los rincones del segundo pa¨ªs m¨¢s grande del mundo tras Rusia, y el m¨¢s pobaldo, son muchos m¨¢s.

El autor de este reportaje pas¨®, en 2019, tres d¨ªas en Nank¨ªn, con motivo de los campeonatos nacionales sub 8 y sub 10. Una gran parte del millar de participantes, los mejores de cada provincia, eran ni?os prodigio. Resultaba normal, por ejemplo, que invirtieran el tiempo en el ascensor (el hotel era un rascacielos) en resolver problemas de matem¨¢ticas en dispositivos electr¨®nicos. ¡°El nivel de los ni?os chinos en matem¨¢ticas, f¨ªsica y qu¨ªmica es muy alto¡±, confirma Hongwei. Eso tiene mucho que ver con la pol¨ªtica del hijo ¨²nico, vigente desde 1979 a 2015 (ahora el l¨ªmite es dos): muchos padres se obsesionan con la idea de que su bienestar en la vejez depender¨¢ del poder adquisitivo de su ¨²nico hijo o hija. Por tanto, la presi¨®n para que los ni?os entren en las mejores escuelas y universidades resulta, con frecuencia, brutal, sobre todo en lo que se refiere a los ex¨¢menes de ingreso, que producen cada a?o los momentos de mayor tensi¨®n colectiva en toda China.

En consecuencia, todo lo referente a la educaci¨®n y a desarrollar la inteligencia es sumamente importante. Las Olimpiadas Matem¨¢ticas o de Juegos Mentales tienen una repercusi¨®n enorme. Pero el mete¨®rico progreso del pa¨ªs crea un obst¨¢culo para producir m¨¢s campeones de ajedrez: ¡°Antes, ser jugador de alta competici¨®n era un medio de vida muy atractivo porque no hab¨ªa muchas profesiones m¨¢s tentadoras. Ahora s¨ª hay muchas opciones en el ¨¢mbito de la ciencia, la tecnolog¨ªa y el arte, y por tanto nos resulta m¨¢s dif¨ªcil convencer a nuestros talentos para que sean jugadores profesionales¡±, explica Hongwei. Uno de los ejemplos m¨¢s claros de esa dificultad es Yi Wei, de 23 a?os, quien desde ni?o se perfil¨® como uno de los talentos m¨¢s precoces de la historia. ¡°Ha dado prioridad a sus estudios universitarios, que termina este a?o. Pero debe volver al ajedrez de ¨¦lite porque es un modelo para millones de ni?os chinos¡±, asegura Hongwei.

El ajedrez y el go (otra disciplina mental de gran popularidad en varios pa¨ªses del Lejano Oriente) son los deportes no ol¨ªmpicos con apoyo gubernamental equiparable a los ol¨ªmpicos: ¡°Tenemos dos campos de entrenamiento para la selecci¨®n nacional y los grandes talentos, con todo pagado por el Gobierno¡±, concluye Hongwei.

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