La JEP recomienda sancionar con ocho a?os al exsecretariado de las FARC por secuestros

La Jurisdicci¨®n Especial para la Paz (JEP) ha entregado una de las resoluciones m¨¢s esperadas del pa¨ªs por uno de los delitos m¨¢s crueles que cometi¨® la extinta guerrilla de las FARC, el secuestro. La instituci¨®n, que fue creada por los acuerdos de paz, recomend¨® que a los miembros del antiguo secretariado de las FARC les den la medida m¨¢xima de ocho a?os de ¡°sanciones propias¡±, como se conoce a las medidas de restricci¨®n no carcelaria de libertad que da la justicia transicional.

Se trata de dos tipos de sanciones, seg¨²n ha explicado el magistrado Roberto Vidal, presidente la JEP. ¡°Un componente son las restricciones de derechos que no es encerrar a las personas en establecimientos carcelarios, pero que s¨ª tiene restricci¨®n de derechos tales como una vigilancia permanente¡±. Ese mecanismo, seg¨²n asegur¨® fue dise?ado por el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y ser¨¢ la Misi¨®n de Verificaci¨®n de la ONU, la que vigile que los exguerrilleros la cumplan. ¡°Tambi¨¦n prev¨¦ la Ley que esas personas deben estar concentradas en los sitios donde cumplir¨¢n las sanciones y que tendr¨¢n limitaciones de posibilidad de movimiento que el Tribunal de Paz deber¨¢ precisar¡±, agreg¨®. El segundo componente de las sanciones son las labores que contribuyan a la reparaci¨®n de las v¨ªctimas.

Los involucrados en este caso por cr¨ªmenes de guerra y lesa humanidad son los exjefes de esa guerrilla, Rodrigo Londo?o Echeverry, ¡®Timochenko¡¯, Jaime Alberto Parra, Milton de Jes¨²s Toncel, Pablo Catatumbo Torres Victoria, Pastor Lisandro Alape, Juli¨¢n Gallo y Rodrigo Granda. La JEP propone que a seis de ellos les den la m¨¢xima sanci¨®n que permite la norma, de ocho a?os, y de cinco a?os para Granda que no tuvo mando sobre la tropa por las funciones que cumpl¨ªa, y como tal no ten¨ªa responsabilidad de mando.

En junio pasado, durante una intenso cara a cara con las v¨ªctimas de secuestro, los exdirigentes de esa guerrilla admitieron el delito. Estuvieron all¨ª civiles y tambi¨¦n militares y polic¨ªas que permanecieron en cautiverio por diez y hasta 13 a?os, as¨ª como familiares que a¨²n buscan a sus secuestrados. ¡°En mi calidad de ¨²ltimo comandante vengo a asumir uno de los m¨¢s abominables cr¨ªmenes que cometi¨® nuestra organizaci¨®n, yendo en contrav¨ªa de los valores que inspiraron nuestra causa¡±, dijo en ese momento Rodrigo Londo?o.

La investigaci¨®n, de acuerdo con la JEP, logr¨® esclarecer 21.000 de estos cr¨ªmenes cometidos por las antiguas FARC. ¡°Fue una investigaci¨®n masiva con pocos precedentes de la labor judicial del pa¨ªs, en un tiempo muy corto. Y, en t¨¦rminos judiciales se trata de una investigaci¨®n extraordinaria que tiene como punto de partida la justicia ordinaria y el trabajo de la Fiscal¨ªa, pero va m¨¢s all¨¢ en el esclarecimiento de cr¨ªmenes de los que no se hab¨ªa logrado conseguir verdad o informaci¨®n¡±, agreg¨® Vidal.

La magistrada Julieta Lemaitre record¨® este viernes que los siete exdirigentes de esa guerrilla admitieron de forma colectiva e individual ser coautores de toma de rehenes, graves privaciones de la libertad, y homicidios, as¨ª como la responsabilidad de mando de cada uno, seg¨²n su trayectoria, por los cr¨ªmenes de guerra de torturas, tratos crueles y otros tratos inhumanos, atentados a la dignidad personal, violencia sexual y desplazamiento forzado realizados contra los secuestrados.

Deber¨¢n buscar a los desaparecidos

La JEP recomend¨® tambi¨¦n que los exdirigentes de las FARC reparen a las v¨ªctimas haciendo desminado humanitario y limpiando zonas de restos de explosivos de guerra; buscando personas dadas por desaparecidas, que fueron peticiones de las v¨ªctimas. Tambi¨¦n, que hagan una restauraci¨®n ambiental del p¨¢ramo de Sumapaz, y actividades transversales de dignificaci¨®n de la memoria de las v¨ªctimas. Esos proyectos surgieron de una mezcla de propuestas de los victimarios y evaluadas por las organizaciones que representan a las personas que sufrieron secuestro y tambi¨¦n de 285 proyectos de reparaci¨®n presentados por las v¨ªctimas.

Una de las m¨¢s importantes ser¨¢ la b¨²squeda de los secuestrados asesinados en cautiverio, cuyos restos siguen desaparecidos. En junio, durante la audiencia, el sargento C¨¦sar Lasso, que estuvo secuestrado entre 1998 y 2012, increp¨® a los exdirigentes del secretariado: ¡°?Qu¨¦ pas¨® con el cabo (Fernando) Pe?a y tantos que tienen sus hijos desaparecidos?¡±.

El secuestro en Colombia fue una pol¨ªtica de las FARC que ven¨ªa desde sus m¨¢ximos comandantes y ocurri¨® de manera generalizada en casi todos los departamentos del pa¨ªs, seg¨²n determin¨® la JEP, que hall¨® tres patrones criminales. El primero fue con el objetivo de forzar un intercambio por guerrilleros presos o canje; para financiar su accionar y para hacer control territorial.

Con esta decisi¨®n, afirma Lemaitre le ¡°pasan la posta¡± al Tribunal de Paz que podr¨¢ volver a escuchar a las v¨ªctimas para tomar una determinaci¨®n. En paralelo, la Sala de Reconocimiento seguir¨¢ investigando por bloques, as¨ª como otros casos diferentes a secuestro en los que han participado exguerrilleros de las FARC. Para ello han escuchado a cerca de 500 excombatientes de diferentes rangos.

Para el presidente de la JEP, magistrado Roberto Vidal, si bien siempre quedan deudas con las v¨ªctimas y quedan muchas ¡°respuestas pendientes¡±, la investigaci¨®n tiene un peso muy importante porque llev¨® a las FARC a reconocer ¡°desde sus mandos de nivel m¨¢s bajo al m¨¢s alto la comisi¨®n de graves cr¨ªmenes, algo que parec¨ªa muy lejano cuando estaban en el desarrollo de los Acuerdos de paz¡±. La decisi¨®n final sobre las sanciones ser¨¢ tomada por el Tribunal de paz en los pr¨®ximos seis meses.

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