La Aerocivil da luz verde a la fusi¨®n de Avianca y Viva Air, con condicionamientos
La absorci¨®n de la ¡®low cost¡¯ paisa por la aerol¨ªnea bandera de Colombia est¨¢ sujeta a seis requisitos. Sigue la investigaci¨®n de la Superindustria por presuntamente haber adelantado la transferencia sin esta aprobaci¨®n
Despu¨¦s de un trimestre asfixiante en el que todo indicaba que la aerol¨ªnea de bajo costo Viva Air iba a desaparecer, recibi¨® una bocanada de ox¨ªgeno con la aprobaci¨®n de su propuesta de fusi¨®n con la centenaria Avianca. La decisi¨®n de la Aeron¨¢utica Civil era muy esperada por cuenta del estado financiero terminal de Viva y estaba en la mira por tratarse de un negocio que, presuntamente, ya se habr¨ªa implementado desde abril del a?o pasado. Se trata, pues, de una resoluci¨®n quiz¨¢s tard¨ªa y envuelta en altas dosis de suspenso debido a la postergaci¨®n de la noticia tras varios d¨ªas.
La Aerocivil aprob¨® la integraci¨®n, pero no sin exigencias. Incluye seis condiciones que deben cumplir Avianca y Viva Air: el respeto de los derechos de los usuarios afectados por el cese de operaciones de Viva el pasado 28 de febrero, incluyendo el reembolso de tiquetes; la devoluci¨®n por parte de Avianca de un n¨²mero a¨²n indeterminado de los horarios y permisos para el uso de las pistas (¡®slots¡¯) del aeropuerto El Dorado de Bogot¨¢ en las franjas m¨¢s apetecidas; mantener el esquema de bajo coste de Viva; devolver frecuencias en la l¨ªnea Bogot¨¢-Buenos Aires, una de las m¨¢s afectadas; establecer un l¨ªmite de tarifas efectivo en las rutas donde la uni¨®n acapare el 100% de la operaci¨®n; y, finalmente, garantizar el ¡°dinamismo¡± en los trayectos de mayor concentraci¨®n.
Se trata, pues, de una decisi¨®n que permite la uni¨®n pero busca condiciones de mayor equidad en un mercado donde Avianca, debido, entre otras razones a su antig¨¹edad, guarda desde hace a?os una serie de ventajas operacionales y conductas comerciales que han sido puestas sobre la mesa por otros competidores inconformes. El dictamen del regulador se?ala que su estudio t¨¦cnico sopes¨® ¡°la situaci¨®n generada por la suspensi¨®n de operaciones de Viva¡± frente a la posibilidad de permitir una integraci¨®n marcada por una serie de ¡°remedios¡± que mitigaran las ¡°afectaciones¡± que podr¨ªa suponer para el mercado.
Ahora las deudas de Viva Air, y su filial Viva Air Per¨², pasan formalmente a manos de Avianca, que deber¨¢ hacer frente a las m¨²ltiples fisuras de la compa?¨ªa fundada en 2009 en Medell¨ªn e inactiva desde hace tres semanas, cuando ces¨® sus operaciones de forma intempestiva y dej¨® a miles de usuarios estancados en tierra. Se trataba del colof¨®n a una temporada de turbulencias, huelgas de trabajadores, y aviones dejados en tierra ante la imposibilidad de pagar por tenerlos arrendados. Esa decisi¨®n deriv¨® en una denuncia penal por parte del Ministro de Transporte, Guillermo Reyes, quien asegur¨® tener pruebas de que Viva habr¨ªa facturado 272 mil millones de pesos en servicios que nunca prest¨®, a sabiendas de que no podr¨ªa hacerlo.
La suspensi¨®n tendr¨ªa en riesgo unos 8.000 millones de pesos de agencias de viajes que desembolsaron el dinero para asegurar las sillas de sus clientes, de acuerdo con estimaciones de la Asociaci¨®n Colombiana de Agencias de Viajes y Turismo, que podr¨ªan recuperar. La otra cara de la moneda es que mejoran las perspectivas para los 1.250 empleados de Viva Air, que algunos informes de prensa cifran en 3.750 trabajadores indirectos. Una fuerza laboral a la espera de salir del agujero en un contexto sombr¨ªo por las inciertas condiciones de la econom¨ªa dom¨¦stica e internacional.
La decisi¨®n de la Aerocivil, en todo caso, no est¨¢ exenta de cierta alarma para el resto de compa?¨ªas a¨¦reas. El gran debate en el sector ha girado en torno a los ¡®slots¡¯. Por eso desde la chilena Latam, que en febrero lleg¨® a manifestar su pretensi¨®n de adquirir parte de los activos de Viva, han reiterado la necesidad de que Avianca devuelva ¡°el 100% de ¡®slots¡¯ de Viva al ¡®pool¡¯ de ¡®slots¡¯ de El Dorado (Bogot¨¢) con el fin de que estos sean asignados y distribuidos por la Aerocivil¡±, se le¨ªa en un comunicado de finales de febrero emitido por el gigante regional, una de las compa?¨ªas que se han opuesto a la operaci¨®n.
Otras siete grandes compa?¨ªas, encabezadas por la espa?ola Air Europa y la alemana Lufthansa, se han opuesto a la integraci¨®n por su efecto sobre la libre competencia en el mercado local, y la decisi¨®n de la Aerocivil admite recursos de las parte de las que se han opuesto, por lo que a¨²n puede haber sorpresas.
Adem¨¢s, Avianca y Viva a¨²n enfrentan otra l¨ªnea de investigaci¨®n por parte de la Superintendencia de Industria y Comercio, que desde diciembre del a?o pasado estudia una posible infracci¨®n por, supuestamente, haber implementado la hoy materializada fusi¨®n sin autorizaci¨®n de la Aeron¨¢utica Civil. Se enfrentan a la amenaza de multas que van desde los 100 mil salarios m¨ªnimos hasta el 20% de sus ingresos operacionales.
No sobra recordar que la solicitud de fusi¨®n entre las dos compa?¨ªas a¨¦reas ya hab¨ªa sido bloqueada el 4 de noviembre del a?o pasado, cuando la Aeron¨¢utica emiti¨® una resoluci¨®n negativa donde evidenciaba que el conglomerado resultante ¡°representa riesgos para la competencia en el sector y el bienestar de los consumidores¡±. Y es que el dictamen de diversos analistas planteaba que la uni¨®n hoy aprobada abarca el 65% del mercado dom¨¦stico y m¨¢s del 90% en una treintena de rutas.
Sin embargo, tres semanas despu¨¦s de que Sergio Par¨ªs asumi¨® la direcci¨®n de la Aerocivil a finales de diciembre, anunci¨® que el primer expediente quedaba anulado por un error procedimental. Una decisi¨®n insospechada y que abr¨ªa el camino para desenredar el pen¨²ltimo cap¨ªtulo de un atasco a¨¦reo que hoy muchos observadores miran de reojo por su imprevisible futuro para la pluralidad de un mercado ya de por s¨ª algo estrecho.
Suscr¨ªbase aqu¨ª a la newsletter de EL PA?S sobre Colombia y reciba todas las claves informativas de la actualidad del pa¨ªs.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.