En busca de un Javier Milei para el Movimiento Libertario en Colombia
La facci¨®n ultraliberal, con una militancia a¨²n m¨ªnima, se sirve de la victoria en Argentina para perfilar su discurso antisistema de cara a las elecciones de 2026
El movimiento Libertario de Colombia busca un Javier Milei local. El reci¨¦n elegido e irascible presidente de Argentina por la coalici¨®n Libertad Avanza es hoy, sin duda, el mayor protagonista de una corriente ideol¨®gica a¨²n residual en el panorama pol¨ªtico colombiano. Conscientes de que buena parte del futuro electoral en Bogot¨¢ depende de la gesti¨®n de su correligionario austral, m¨¢s de uno hace c¨¢lculos ante la posibilidad de impulsar, por fin, un proyecto cuyo pegamento ideol¨®gico m¨¢s claro se centra en la desconfianza casi visceral hacia el aparato estatal.
Los 20.233 votos alcanzados por el candidato Daniel Raisbeck en la carrera por la Alcald¨ªa de Bogot¨¢ en 2015 son el mayor logro electoral del Movimiento Libertario fundado un a?o antes en Colombia. El aspirante, que en ese entonces ten¨ªa 33 a?os, ocup¨® la sexta posici¨®n y logr¨® hacer algo de ruido en la capital con su defensa a ultranza de Uber, el recorte de la burocracia y los impuestos y su imagen de acad¨¦mico con corbat¨ªn desmayado. Sin embargo, las divergencias conceptuales entre los miembros de la formaci¨®n, atravesada en sus ra¨ªces por corrientes como el anarquismo, diezmaron la evoluci¨®n del proyecto.
A diferencia de Argentina, Per¨² y Chile, en Colombia ha sido desde entonces una fuerza desconocida. Juan ?ngel, su director, sostiene que el n¨²mero de militantes en el pa¨ªs ¡°debe estar rondando las 7.000 personas¡±. Y a pesar de que por lo pronto no tiene personer¨ªa jur¨ªdica, ?ngel confirma que para 2026 aspiran a presentarse con un candidato a la Presidencia: ¡°El primer objetivo es adelantar el tr¨¢mite para constituirnos como organizaci¨®n pol¨ªtica, que es lo que nos permitir¨¢ tener avales y mayor injerencia en lo que est¨¢ pasando en el pa¨ªs¡±.
El doctor en Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad del Rosario Yann Basset califica el asunto de ¡°parad¨®jico¡±. Explica que en Colombia, a diferencia de Argentina, el tama?o del Estado es ¡°de una pobreza franciscana¡±. Por eso juzga poco viable la posibilidad de encarrilar su discurso en torno al recorte de la intervenci¨®n pol¨ªtica en la vida de los ciudadanos: ¡°Ellos son conscientes, en parte, de que ac¨¢ el Estado es bastante d¨¦bil. Entonces lo que argumentan es que dentro de lo poco que trata de gestionar, entorpece el proceso debido a que est¨¢ cooptado por redes clientelistas¡±.
M¨¢s all¨¢ de la aversi¨®n compartida por lo estatal, los puntos en com¨²n entre las plataformas argentina y colombiana parecen a simple vista escasos. Los cuatro militantes libertarios consultados para este reportaje se desmarcan, por ejemplo, de la posibilidad de proponer la eliminaci¨®n del Banco de la Rep¨²blica, como lo hizo el nuevo presidente argentino. Ninguno quiso jug¨¢rsela tampoco en contra del aborto, y las consignas de negacionismo hist¨®rico que tanto han pesado en Argentina tampoco est¨¢n, por lo pronto, en el radar. ?Cu¨¢les pueden ser las iniciativas que sirvan de d¨ªnamo en Colombia?
En l¨ªnea con las tesis del excandidato presidencial Rodolfo Hern¨¢ndez, hoy inhabilitado para ejercer cargos p¨²blicos, la ret¨®rica de la lucha anticorrupci¨®n parece abundar en su mensaje: ¡°Desde un punto de vista liberal¡±, explica el ingeniero y publicista libertario David Cancino, ¡°nos preocupa mucho la forma como los pol¨ªticos est¨¢n constantemente administrando presupuestos gigantes con recursos de todos los colombianos, bajo un modelo que les da incentivos para robarse la plata y utilizarla de forma ineficiente, que son dos factores que van en contra v¨ªa de todos los que abogamos por un capitalismo honesto¡±.
Otros l¨ªderes como el presidente Nayib Bukele, en El Salvador, Jair Bolsonaro, en Brasil, o el hoy candidato Donald Trump en Estados Unidos han contado con el apoyo de amplias bases libertarias que se publicitan como abanderados del libre albedr¨ªo en contra de cualquier estructura pol¨ªtica ajena que interfiera con su soberan¨ªa. Los confinamientos obligatorios decretados durante la pandemia en todo el mundo por los Estados fueron la carnada perfecta para que sus tesis florecieran con vigor. De hecho, una plataforma libertaria de la costa Caribe colombiana organiz¨® en julio de 2021 un foro en X ¨Dantes Twitter¨D con Javier Milei a bordo.
La cita tambi¨¦n convoc¨® a simpatizantes y miembros del partido ultraderechista espa?ol Vox, y al nuevo alcalde de Medell¨ªn, Fico Guti¨¦rrez; al exministro de Educaci¨®n Alejandro Gaviria; o al exsenador Jorge Enrique Robledo. Una amalgama de personajes interesados en debatir la singularidad de una crisis sanitaria aguda que oblig¨® a restringir la movilidad para contener el n¨²mero de muertes. Un debate a¨²n complejo que tambi¨¦n se extiende con fuerza a otros temas como el porte de armas, el rol de la salud p¨²blica, o la pertinencia de impuestos altos.
A todo esto se suma la necesidad de presentarse como una fuerza ¡°antisistema¡±. Por eso David Cancino se queja del ventajismo pol¨ªtico de la congresista del ala radical del uribismo, Mar¨ªa Fernanda Cabal: ¡°Sus trinos celebrando el triunfo de Milei son puro oportunismo. Nosotros tenemos una postura muy distante del Centro Democr¨¢tico en t¨¦rminos econ¨®micos. En lo ¨²nico que nos acercamos es en que hay un rechazo com¨²n a todas las izquierdas¡±.
Por el lado econ¨®mico, las diferencias se resumen, en palabras de Cancino, en cierto ¡°gremialismo¡± del partido del expresidente ?lvaro Uribe que ha entorpecido a su juicio el desarrollo del capitalismo en Colombia. ¡°Es un partido que siempre ha protegido a determinados sectores econ¨®micos y con muy poca sinceridad han ido restringiendo el libre mercado¡±, a?ade Cancino. No obstante, ese compromiso atemporal con la libertad est¨¢ minado por innumerables debates que pueden desembocar en puntos ciegos para la consolidaci¨®n del movimiento.
Alejandra Moreno, de la red libertaria estadounidense Ladies Liberty Alliance, lo ejemplifica: ¡°Mi organizaci¨®n no tiene una postura en torno al aborto. Yo estoy a favor. Pero en el liberalismo es un debate bastante complejo entre la primac¨ªa del derecho a la vida o el derecho a la propiedad privada, entendido como el cuerpo de la mujer¡±. ?Hay alguna agenda de g¨¦nero? Moreno responde que no existe ninguna y que a las mujeres adeptas a estas ideas lo que las atrae es el ¡°deseo de crecimiento e independencia econ¨®mica¡±.
El proyecto de Milei ha sorprendido a los partidarios colombianos, muchos de los cuales prefieren que se refieran a ellos como liberales a secas, en una suerte de limbo organizativo. Por eso la pregunta que ahora surge es si ser¨¢n capaces de consagrar la candidatura de una figura con la fuerza del pol¨¦mico nuevo mandatario argentino. Para Yann Basset se trata de un punto conflictivo para el perfil de un partido con marcado acento urbano: ¡°La sociolog¨ªa de sus miembros es la de j¨®venes de ciudad, bien educados, muy poco representativos del mundo de las grandes empresas pero con poca afinidad con el capitalismo de las clases populares¡±.
De acuerdo con Basset, all¨ª se halla el gran cortocircuito para consolidar una base m¨¢s amplia: ¡°Su p¨²blico natural, que en Brasil o Per¨² est¨¢ en el peque?o capitalismo comercial, no empata con el perfil de un Daniel Raisbeck, por ejemplo¡±. Se trata de un desfase cultural entre los postulados libertarios y un peque?o e incipiente tejido empresarial que oscila entre los llamados Sanandresitos, y extensos sectores populares donde el acad¨¦mico franco-colombiano no detecta el esp¨ªritu emprendedor y competitivo que pregona el movimiento: ¡°En la mayor¨ªa de calles de las ciudades y pueblos de Colombia te vas a encontrar los mismos productos a precios muy similares. El comercio funciona con acuerdos similares a los del clientelismo pol¨ªtico¡±.
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