Un procurador irresponsable
Si la Corte Suprema se decanta por Germ¨¢n Var¨®n Cotrino para la terna de donde saldr¨¢ el Procurador, estar¨¢ presentando a una persona que de una u otra forma tiene v¨ªnculos con el ¡®Cartel de la Toga¡¯
Aqu¨ª lo dije hace varias semanas: Colombia no puede aceptar otro procurador general te?ido de los colores de uno o varios partidos pol¨ªticos. Sin embargo, como pintan las cosas y, sobre todo, como pintan las Cortes, estamos abocados a una elecci¨®n en donde los miembros del Senado terminar¨¢n eligiendo a un viejo conocido (por no decir que a un viejo amigo) antes que a un hombre o mujer digno de tal responsabilidad, libre de pol¨ªtica y libre de nefastas deudas con aquellos que habr¨¢n de dar su voto para garantizar su elecci¨®n.
Y es que los magistrados de la Corte Suprema, al igual que los consejeros del Consejo de Estado, est¨¢n pr¨®ximos a decantarse por viejos amigos de los pol¨ªticos, por no decir que viejos conocidos del establecimiento corrupto, que tanto da?o le ha hecho a Colombia.
Si la Corte Suprema se decanta por Germ¨¢n Var¨®n Cotrino como integrante de la terna de donde saldr¨¢ el Procurador, no solo estar¨¢ poniendo en la plancha a un amigo de varios lustros de los congresistas que habr¨¢n de elegirlo y de paso de Germ¨¢n Vargas Lleras (as¨ª ¨¦l diga que no), sino que adem¨¢s estar¨¢ presentando como candidato al ¨®rgano disciplinario del Estado a una persona que de una u otra forma tiene v¨ªnculos con el inolvidable y perverso Cartel de la Toga.
Es que no podemos olvidar que, gracias a nuestra mala memoria, en Colombia el carrusel de los cargos p¨²blicos siempre termina en manos de un grup¨²sculo como si en vez de ser un pa¨ªs de casi 50 millones de habitantes, m¨¢s bien fu¨¦ramos un lugar donde s¨®lo hay 2.000 o 3.000 personas aptas para asumir las grandes responsabilidades que nos ata?en a todos. En el caso de Var¨®n Cotrino varias son las voces que lo vinculan con el infame Gustavo Moreno, hoy abogado de Olmedo L¨®pez y anta?o corrupto fiscal anticorrupci¨®n de la administraci¨®n de N¨¦stor Humberto Mart¨ªnez.
Var¨®n lo niega. Dice que lo conoci¨® porque un integrante de su unidad legislativa se lo present¨®, pero seamos francos: uno no recomienda, ni pasa la hoja de vida de gente cuyo origen y virtudes se desconocen. Yo no recomiendo a fulanos surgidos de la nada. En cambio, el hoy potencial candidato parece haberlo hecho a pesar de la responsabilidad que algo as¨ª conlleva. Mas d¨¦mosle el beneficio de la duda. Aceptemos que ¨¦l no sab¨ªa lo que el abogado Moreno era. ?Estar¨ªa bien dejar en manos de alguien tan irresponsable un organismo que exige transparencia y equilibrio? ?Debe ser premiado con un cargo que podr¨¢ castigar a unos o hacerse el de la vista gorda ante las fallas de otros aquel que abri¨® la puerta a un pillo de talla mayor?
Ese mismo Germ¨¢n Var¨®n Cotrino fue el abogado que en tiempos de pandemia mir¨® hacia otro lado cuando en un edificio donde participaba en el Consejo de Administraci¨®n trataban a una pobre mujer como a una esclava oblig¨¢ndola a quedarse en un cuartucho sin posibilidad siquiera de salir porque los vecinos la necesitaban. ?Es ese el perfil de un garante de los derechos de los colombianos como deber¨ªa serlo un procurador?
Repito: nuestra memoria es corta. La de los magistrados no lo s¨¦. Pero ellos no apuestan por la justicia que dicen representar, sino a la pol¨ªtica que los tienta con los sabrosos aromas de cargos, contratos y otros abalorios que solo ofrece el poder omn¨ªmodo de aquel que ellos postulen. ?Horror!
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