Latinoam¨¦rica: la urgencia de adaptarse al cambio clim¨¢tico en la regi¨®n que atesora seis de los pa¨ªses m¨¢s biodiversos del mundo

El cambio clim¨¢tico implica una suerte de f¨®rmula matem¨¢tica: por cada 0,1¡ãC que aumente la temperatura global, m¨¢s caro y dif¨ªcil ser¨¢ adaptarnos a sus impactos. Y si se tiene en cuenta que ya hemos aumentado la temperatura mundial en 1,1¡ãC grados desde la era preindustrial, es f¨¢cil concluir que ajustarnos a los cambios que se vienen ser¨¢ cada vez m¨¢s urgente. Sobre todo, cuando recientes informes como el publicado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP) alertan de que, incluso teniendo en cuenta todos los compromisos que han hecho los pa¨ªses para frenar el calentamiento global, a¨²n estamos en un camino que nos llevar¨¢ a que la temperatura aumente entre 2,4 y 2,6¡ãC para finales de siglo. Esto, vale recordar, estar¨ªa lejos del l¨ªmite de 1,5¡ãC que nos mantendr¨ªa en un espacio relativamente seguro.

¡°Entre las muchas cosas que estar¨¢n en juego durante la pr¨®xima Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Clim¨¢tico (COP27), est¨¢ la adaptaci¨®n¡±, cuenta Maritza Florian, especialista en cambio clim¨¢tico, biodiversidad y servicios ecosist¨¦micos de WWF Colombia. ¡°En especial para una regi¨®n como Am¨¦rica Latina que, a pesar de no contribuir en un gran porcentaje a las emisiones que generan el cambio clim¨¢tico [solo alrededor del 8%], s¨ª es muy vulnerable¡±. Desde el domingo 6 de noviembre hasta el viernes 18 del mismo mes, m¨¢s de 190 pa¨ªses del mundo se reunir¨¢n en Egipto, en la COP27, para intentar dar luces de c¨®mo enfrentar, planificar y disminuir los riesgos de la mayor crisis de la humanidad: el calentamiento global.

La adaptaci¨®n, insiste la experta, ser¨¢ un ¨ªtem importante en la agenda de esta reuni¨®n. Primero, porque se discutir¨¢ c¨®mo medir qu¨¦ tan avanzados est¨¢n los pa¨ªses en esta materia. A diferencia de la reducci¨®n de emisiones, a la fecha no hay ning¨²n consenso de qu¨¦ indicadores o criterios usar para medirla. ¡°Se trata de un proceso que en cierta medida se ajusta a los intereses del contexto, as¨ª que es probable que haya una discusi¨®n muy t¨¦cnica de c¨®mo reflejar el avance hacia una meta global de adaptaci¨®n¡±, agrega Isabel Cavelier, ex negociadora a la COP y co-fundadora del centro de pensamiento colombiano Transforma.

Segundo, porque se revisar¨¢ si los pa¨ªses est¨¢n cumpliendo con una meta que se pusieron el a?o pasado, en la COP26, que se realiz¨® en Glasgow (Reino Unido): duplicar la plata que se destina a la adaptaci¨®n. El financiamiento clim¨¢tico ha sido uno de los temas m¨¢s ¨¢lgidos y esquivos de las negociaciones clim¨¢ticas y la adaptaci¨®n ha salido perdiendo. Seg¨²n un reporte sobre la ¡°brecha de adaptaci¨®n¡± tambi¨¦n generado por UNEP en el 2021, solo para que 58 pa¨ªses logren habituarse al calentamiento se necesitan alrededor de 70.000 millones de d¨®lares cada a?o. Pero seg¨²n c¨¢lculos de la OCDE, para el a?o 2020 del total de fondos que se destinan a pa¨ªses en desarrollo, solo 17% fueron para este fin. Es decir que, incluso si se doblara la meta como prometieron los pa¨ªses, alcanzando unos 40.000 millones de d¨®lares para 2025, la plata podr¨ªa quedarse corta.

¡°Los pa¨ªses de Am¨¦rica Latina fueron los que empezaron a hablar de adaptaci¨®n en el contexto de las negociaciones del Acuerdo de Par¨ªs y mencionarlo fue una sorpresa porque muchos buscaban que fuera solo un tratado de reducci¨®n de emisiones¡±, recuerda Jimena Nieto Carrasco, quien fue parte de la delegaci¨®n colombiana que particip¨® en las negociaciones del Acuerdo y que actualmente es miembro del Comit¨¦ de Cumplimiento del Acuerdo de Par¨ªs. Y es importante que Am¨¦rica Latina no pierda este liderazgo. No solo porque es su urgencia real, sino porque es la regi¨®n donde est¨¢n seis de los pa¨ªses con m¨¢s biodiversidad del mundo: porque en general es una regi¨®n biodiversa. ¡°Ac¨¢ se juntan y agudizan dos crisis globales: la clim¨¢tica y la p¨¦rdida de biodiversidad¡±, comenta Ninel Escobar, directora de Cambio Clim¨¢tico de WWF M¨¦xico.

Tener biodiversidad es un arma de doble filo. Las ¨¢reas protegidas y conservaci¨®n de especies, y lo que se conoce en el mundo clim¨¢tico como ¡®soluciones basadas en la naturaleza¡¯, ha demostrado estar entre las estrategias m¨¢s eficientes para la adaptaci¨®n. Pero como lo record¨® el informe Planeta Vivo 2022 de WWF, Latinoam¨¦rica y el Caribe es tambi¨¦n la zona donde se observ¨® una mayor p¨¦rdida de mam¨ªferos, aves, anfibios, reptiles y peces, con un promedio de 94% entre 1970 y 2018. Adem¨¢s, porque de forma similar a lo que sucede con el aumento de temperatura y la adaptaci¨®n, la p¨¦rdida de biodiversidad tambi¨¦n est¨¢ en mayor riesgo con temperaturas solo 0,1¡ãC m¨¢s altas.

A esto se suman los otros retos de desarrollo que tiene Latinoam¨¦rica y que se cruzan con los impactos del calentamiento global: la pobreza, la brecha de g¨¦nero, la inequidad, los conflictos de tierras y vivienda. ¡°La adaptaci¨®n tambi¨¦n tiene que ver con lo socioecon¨®mico, con garantizar que se haga y que llegue especialmente a las poblaciones m¨¢s marginalizadas¡±, cuenta Daniel Morchain, director global de Adaptaci¨®n al Cambio Clim¨¢tico de The Nature Conservancy (TNC). ¡°La idea de progreso de un pa¨ªs, de un continente, est¨¢ vinculada a la realidad. Y con el calentamiento se trata de una realidad cambiante. Entonces el progreso hay que ajustarlo a lo que sabemos hoy¡±, agrega. Por esto ¨¦l lanza una idea que podr¨ªa servirle a los negociadores que se reunir¨¢n durante las pr¨®ximas dos semanas para saber c¨®mo medir la adaptaci¨®n: que todo proyecto que se haga desde el principio se pregunte: ¡°?Se est¨¢ teniendo en cuenta el g¨¦nero? ?Aumenta las inequidades?¡±. Ese ser¨ªa un buen camino para empezar.