¡®El Ni?o¡¯ le pasa factura al modelo de energ¨ªas limpias de Costa Rica

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El fen¨®meno clim¨¢tico de ¡®El Ni?o¡¯ golpea el flanco ambiental de Costa Rica y la buena fama ganada con la generaci¨®n energ¨¦tica que en la ¨²ltima d¨¦cada logr¨® casi llegar al 100% de fuentes limpias. La fuerte reducci¨®n de lluvias y una inusual alteraci¨®n en los vientos han obligado a las autoridades del pa¨ªs centroamericano a abrirle m¨¢s la puerta a la importaci¨®n de electricidad basada en hidrocarburos o directamente a la compra de combustibles f¨®siles para operar las plantas t¨¦rmicas. El costo se calcula en 145 millones de d¨®lares, pero en la imagen internacional puede ser mayor para esta naci¨®n que ha sabido aprovechar su cartel verde para atraer turismo, inversiones y financiamiento.

Despu¨¦s de rondar el 99% de energ¨ªas renovables en el pastel de la generaci¨®n de energ¨ªa el¨¦ctrica, bas¨¢ndose sobre todo en fuentes h¨ªdricas, la realidad clim¨¢tica ha obligado a Costa Rica a reducir sus ambiciones. Ahora la proyecci¨®n puede bajar hasta 93% para este a?o, un porcentaje que supera por mucho al resto de los pa¨ªses pero que se aleja de las metas gubernamentales y del mensaje ideal en los foros internacionales.

¡°Tenemos una matriz de energ¨ªa el¨¦ctrica 100% renovable libre de emisiones de carbono¡±, dijo en julio el presidente Rodrigo Chaves, en la asamblea plenaria de la III Cumbre UE-Celac, en Bruselas, a pesar de que la realidad ya era otra. La lluvia se ha reducido un 30% comparado con el promedio desde los a?os 90 y en algunas cuencas la p¨¦rdida ha llegado al 70%; una parte considerable de la energ¨ªa que Costa Rica estaba abasteciendo con hidroelectricidad ahora se ha sustituido por importaciones de energ¨ªa tradicional o con generaci¨®n t¨¦rmica local mediante combustibles f¨®siles que necesariamente debe comprar en el exterior, reporta el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE).

¡°No podemos firmar un contrato de compra de energ¨ªa con la madre naturaleza¡±, dice con met¨¢fora Marco Acu?a, presidente del ICE, en entrevista con EL PA?S. Se refiere a la vulnerabilidad que implica basar el modelo de generaci¨®n el¨¦ctrica en plantas hidroel¨¦ctricas como ha ocurrido en Costa Rica (64%), que en d¨¦cadas recientes tambi¨¦n ha propiciado los parques geot¨¦rmicos (14%) o e¨®licos (17%), con un problema en estos ¨²ltimos: el calentamiento oce¨¢nico provoca condiciones atmosf¨¦ricas an¨®malas que merman la potencia del viento.

Esto es lo que han explicado a los responsables del ICE los meteor¨®logos y cient¨ªficos cuyo criterio pesa como quiz¨¢s en ninguna otra empresa el¨¦ctrica. El monitoreo clim¨¢tico es constante para poder proyectar la producci¨®n energ¨¦tica necesaria en el pa¨ªs, ahora que las din¨¢micas pospand¨¦micas han vuelto a elevar la demanda el¨¦ctrica. La variabilidad es alta y ning¨²n dinero sirve para comprar servicios de lluvia ni viento. La urgencia obliga a optimizar las plantas solares y los proyectos de geotermia, pero nada es tan r¨¢pido ni suficiente. Por eso la decisi¨®n de acceder a la generaci¨®n t¨¦rmica a un costo de casi 150 millones de d¨®lares en este a?o, un monto que el Estado puede cubrir, pero que mete presi¨®n a los presupuestos y las tarifas.

¡°Es complejo manejar esta variabilidad. Hace unos a?os, en 2014, tuvimos algo parecido, pero lo que se prev¨¦ es que con el cambio clim¨¢tico, la variabilidad hace que estos per¨ªodos de Ni?a (exceso de lluvia) y Ni?o (escasez) se junten m¨¢s y puede ser que tengamos apuros con m¨¢s frecuencia. Eso nos obliga a ser m¨¢s resilientes y le agrega complejidad, m¨¢s a¨²n para el futuro y las inversiones que debemos hacer¡±, agrega Acu?a durante una ma?ana soleada y de brisa propia de la ¨¦poca seca en San Jos¨¦, a pesar de que agosto suele ser uno de los meses m¨¢s lluviosos.

El recurso de hidrocarburos, sin embargo, s¨®lo debe ser complementario, advierte Acu?a. ¡°Un mal torneo no hace mal jugador de tenis a Rafa Nadal. Estamos pasando una situaci¨®n coyuntural que m¨¢s bien queremos aprovechar para afirmar nuestra estrategia basada en fuentes renovables para seguir siendo l¨ªderes, quiz¨¢s con ajustes en los tipos de tecnolog¨ªas para no depender tanto de si llueve o no¡±, explica en referencia al margen de crecimiento de la energ¨ªa extra¨ªda de los volcanes o del sol.

En el contexto nacional, sin embargo, crecen las opiniones a favor de abrirse a combustibles f¨®siles, incluso dentro del Gobierno. Lo ha dicho el ministro de Obras P¨²blicas y Transportes al manifestarse en favor de explorar gas natural, con el respaldo del propio presidente Chaves, tentado por la posibilidad de generar dinero con esta industria extractiva, con el argumento de que se puede hacer de manera sostenible, como Noruega. Se desconoce si hay yacimientos suficientes, pero el mandatario asegur¨® haber pedido ayuda a un ¡°pa¨ªs amigo¡± para calcular el valor de las posibles reservas.

El problema es que la necesidad es inmediata, independientemente del tipo de energ¨ªa que se desarrolle. ¡°Estamos en proceso de adaptaci¨®n, porque esto ya nos alcanz¨®¡±, advierte Acu?a antes de se?alar el crecimiento de la demanda el¨¦ctrica a un ritmo de 5% cada a?o en el pa¨ªs que recibe cada vez m¨¢s inversi¨®n extranjera para industrias de manufactura sofisticada, donde la energ¨ªa es clave.