Francisco Monaldi: ¡°El actual pragmatismo econ¨®mico de Maduro se debe al ciclo electoral y no es viable¡±
Chevron y Repsol lograron licencias para producir petr¨®leo en el pa¨ªs latinoamericano, pero sin un cambio en el Gobierno venezolano un mayor desarrollo del sector es inviable, asegura el especialista
Como muchos de sus compatriotas venezolanos en el extranjero, Francisco Monaldi (Caracas, 54 a?os) habla de las elecciones en su pa¨ªs con mucha cautela. El investigador, profesor y director del Programa Latinoamericano de Energ¨ªa del Instituto Baker de la Universidad Rice (Texas) ha registrado desde la academia el dram¨¢tico colapso del sector petrolero venezolano. En los comicios de este domingo, por primera vez en m¨¢s de dos d¨¦cadas, hay una esperanza de dar vuelta en U.
¡°De confirmarse la participaci¨®n esperada, Maduro est¨¢ en un tremendo problema¡±, dice Monaldi en entrevista con EL PA?S desde Houston. El plan del presidente venezolano era ¡°relegitimarse¡± ganando estas elecciones frente a observadores electorales estadounidenses para que la Casa Blanca eliminara las sanciones petroleras. Pero el mandatario ¡°cometi¨® un error de c¨¢lculo¡±, dice Monaldi, y ahora, el candidato opositor lleva una ventaja considerable.
Para regresar el que alguna vez fue uno de los sectores petroleros m¨¢s productivos del mundo a su potencial completo, se requerir¨¢ una inversi¨®n anual de hasta 10.000 millones de d¨®lares durante, por lo menos, ocho a?os, estima Monaldi. A pesar de que el mundo busca migrar a energ¨ªas limpias, sigue existiendo una oportunidad para Venezuela, pa¨ªs con las mayores reservas petroleras del mundo. ¡°Si se dan las condiciones¡ cambios legales, estabilidad pol¨ªtica, un consenso nacional de la apertura a la inversi¨®n privada, yo creo que s¨ª puede llegar la inversi¨®n¡±, asegura el especialista.
Pregunta. ?C¨®mo llega el sector energ¨¦tico de Venezuela a estas elecciones?
Respuesta. Rescatemos primero que durante el per¨ªodo de Ch¨¢vez la historia petrolera de Venezuela es de acelerada declinaci¨®n en la empresa estatal, aunque no fue en ese momento que colaps¨®, porque el precio del petr¨®leo era tan alto que el sector privado sigui¨® invirtiendo a pesar de las expropiaciones. No fue hasta 2014 que cay¨® el precio del petr¨®leo que el colapso fue brutal y obviamente las sanciones lo hicieron todav¨ªa peor. El piso lo toc¨® en el 2020, un a?o de pandemia, de m¨¢xima presi¨®n de Donald Trump en Estados Unidos y de precios m¨ªnimos. Esto gener¨® que algunos compradores, como India, por ejemplo, dejaran de comprar y Venezuela se vio obligada a vender a menores precios en el mercado negro. Eso hizo que cerraran parte de su producci¨®n: no es que no ten¨ªan la capacidad de producir, sino simplemente no la pod¨ªan vender. Pero luego llega la invasi¨®n de Rusia a Ucrania, que hace que EE UU y Europa empiecen a ver geopol¨ªticamente a Venezuela diferente. Empiezan a pensar ¡®bueno, sancionamos a Rusia, tercer mayor productor de crudo del mundo, tenemos sancionado a Ir¨¢n, que es otro actor muy importante, ?nos podemos dar el lujo de tambi¨¦n tener completamente sancionado a Venezuela?¡¯ Eso llev¨® a la Casa Blanca a cambiar su pol¨ªtica y en 2022 otorgaron una licencia para producir petr¨®leo a Chevron, cuyos proyectos en Venezuela los estaba operando PDVSA (Petr¨®leos de Venezuela). Y PDVSA le deb¨ªa un dineral a Chevron. Entonces, con la licencia, Chevron puede hacer cosas que antes no pod¨ªa, como controlar el flujo de caja y la operaci¨®n del proyecto. Eso empieza una recuperaci¨®n adicional a la recuperaci¨®n inicial, que es la que hemos visto estos dos ¨²ltimos a?os cuando se reabre parte de esa capacidad que estaba cerrada. El 80% del aumento de producci¨®n de Venezuela es producto de Chevron.
P. Tambi¨¦n estamos viendo otros cambios, como una ca¨ªda en la inflaci¨®n y una dolarizaci¨®n parcial. ?A qu¨¦ atribuye esto?
R. Es una combinaci¨®n de cosas. El chavismo hab¨ªa llegado a unos niveles incre¨ªbles de control de la econom¨ªa. Me refiero a controles de precios y un control de cambio que hab¨ªan generado unas distorsiones colosales y una escasez brutal. La econom¨ªa se contrajo 80% fundamentalmente por el colapso de la industria petrolera, que llev¨® a que hubiera hiperinflaci¨®n y a una situaci¨®n de dolarizaci¨®n de facto porque la gente no quer¨ªa tener bol¨ªvares ni por casualidad. Eso llev¨® a que, de repente, el Gobierno decidiera ser m¨¢s pragm¨¢tico. Recurrieron a unos asesores ecuatorianos que hab¨ªan trabajado con Rafael Correa y lo que les esta gente les propuso es dolarizar m¨¢s la econom¨ªa de facto para tratar de controlar la inflaci¨®n. Para eso, es muy importante conseguir d¨®lares y ah¨ª es donde Chevron se transform¨® en un elemento muy importante de la estrategia. Ellos han anclado el tipo de cambio del bol¨ªvar con respecto al d¨®lar para controlar la inflaci¨®n. Cosa que, por cierto, va a explotar en alg¨²n momento porque sabemos que eso lleva siempre a una apreciaci¨®n de la moneda, por lo que Venezuela es, en este momento, un pa¨ªs muy caro. Pero ciertamente ese pragmatismo ha sido muy significativo. Ahora, ha tenido sus costos importantes. Para contener la inflaci¨®n, han restringido el cr¨¦dito de manera brutal. En Venezuela, la banca es diminuta. Esta no es una pol¨ªtica econ¨®mica viable. Este pragmatismo yo creo que es porque esto es un ciclo electoral y est¨¢n haciendo todo esto para tratar de llegar lo menos mal a las elecciones posible en t¨¦rminos de aprobaci¨®n.
P. No fue solo Chevron. El Gobierno recientemente firm¨® contratos petroleros con una empresa nacional y otra de la India.
R. As¨ª es y eso es interesante porque la ley venezolana dice que la ¨²nica manera de que un privado participe en el sector petrolero es como accionista minoritario de una empresa controlada por PDVSA. Eso le deja bastantes limitaciones al socio minoritario en la operaci¨®n adem¨¢s del hecho particular de que PDVSA es la que tiene derecho a vender el petr¨®leo. Es decir, estas empresas, que se llaman empresas mixtas, no pueden vender su petr¨®leo. Esto ha llevado al Gobierno a hacerle cosas ins¨®litas a las empresas petroleras venezolanas. Les debe miles de millones de d¨®lares, por ejemplo, una situaci¨®n que hab¨ªa llevado a que nadie quisiera invertir en el sector privado. Cuando se da la oportunidad para Chevron, ¨¦sta pide como condici¨®n controlar el flujo de caja, entre otros requisitos. Despu¨¦s de que Chevron logr¨® una licencia, todo el mundo quer¨ªa un contrato tipo Chevron. Fue as¨ª como Maurel & Prom, subsidiaria de la empresa estatal de Indonesia, y Repsol, reciben una licencia similar. Adem¨¢s de eso, ha habido una serie de acuerdos con Jindal, empresa de la India, con una empresa brasilera, una venezolana y otras m¨¢s que son m¨¢s peque?as. Aunque es totalmente opaco y ninguno de estos contratos se conocen de manera p¨²blica, todo indica que van en la direcci¨®n de contratos parecidos al de Chevron. El problema con estos es que no tienen licencia, por lo que, para m¨ª, son altamente inviables. Implica que los privados tienen que invertir y producir para que PDVSA despu¨¦s pueda salir a vender en el mercado negro con todas las dificultades para cobrar que eso implica. Mientras no haya licencias, no es viable.
P. Que EE UU suspenda las sanciones por completo, permitiendo a todas las empresas operar en el mercado, depender¨¢, en gran parte, de los resultados de la elecci¨®n del domingo.
R. Maduro ten¨ªa un plan que fall¨®. Primero, intent¨® dividir a la oposici¨®n financiando algunos candidatos supuestamente de oposici¨®n y seleccionando a otros para permitirles competir. Cometi¨® un error de c¨¢lculo al pensar que las primarias de oposici¨®n iban a ser un fracaso y, por el contrario, no solamente fueron un ¨¦xito, sino que Mar¨ªa Corina Machado tuvo m¨¢s del 90% de los votos. Eso le dio a Machado la legitimidad pol¨ªtica y democr¨¢tica de convertirse en el gran elector de la oposici¨®n e hizo que los partidos de oposici¨®n se alinearan, entendieran que sin su apoyo no ir¨ªan a ning¨²n lado. No creo que Maduro imagin¨® que Machado se iba a transformar en este l¨ªder que est¨¢ teniendo un apoyo inmenso. Despu¨¦s ocurrieron todos estos eventos bien conocidos que no dejaron competir a la candidata que Machado trat¨® de poner y finalmente cay¨® este candidato, llam¨¦moslo el candidato accidental, Edmundo Gonz¨¢lez Urrutia, quien hoy lleva 20 puntos de ventaja. El problema para Maduro es que la oposici¨®n est¨¢ movilizada, unificada y dispuesta a votar. Esta es, en mi opini¨®n, la elecci¨®n con menos garant¨ªas electorales en la historia, con menos auditor¨ªas, con menos capacidad de garantizar que sean limpias. Pero son, a la vez, las elecciones en que la gente est¨¢ diciendo ¡®no importa c¨®mo, vamos a votar¡¯. De confirmarse la participaci¨®n esperada, Maduro est¨¢ en un tremendo problema, porque su plan era relegitimarse para que le levantaran las sanciones. Su plan estaba respaldado por parte del sector privado en Venezuela que lo ve¨ªan como una oportunidad para regularizar la situaci¨®n econ¨®mica. Esa era la l¨®gica, pero se le cay¨® el plan a Maduro.
P. Entonces la gran pregunta es, ?qu¨¦ va a pasar el d¨ªa de la elecci¨®n?
R. Yo veo tres escenarios. El primero es que Maduro logre una abstenci¨®n brutal que le d¨¦ la victoria. Que salgan a votar m¨¢s votantes suyos que de la oposici¨®n. Esto implicar¨ªa que la tasa de participaci¨®n baje a alrededor del 40%, niveles muy bajos. Esto se hace cada vez m¨¢s dif¨ªcil y costoso. El segundo escenario es que Maduro, al ver c¨®mo van saliendo los resultados, tumbe el sistema y anuncien los resultados que ellos quieren. En este caso, la oposici¨®n tendr¨ªa un mont¨®n de actas mostrando que ese no es el resultado, generando una crisis tremenda, interna e internacional, porque ser¨ªa evidente y har¨ªa muy dif¨ªcil pol¨ªticamente, tanto para la Administraci¨®n Biden como para los europeos, normalizar una relaci¨®n con Maduro. Desde el punto de vista del sector petrolero, eso har¨ªa muy improbable que tengamos mayor flexibilizaci¨®n y que todas estas otras empresas que mencion¨¦ obtengan una licencia. Es m¨¢s, en un escenario extremo, imag¨ªnate que eso lleve a violencia pol¨ªtica, a represi¨®n, esto incluso podr¨ªa llevar a que las sanciones se endurezcan. El tercero y ¨²ltimo es que fuerzas internas dentro de la coalici¨®n de Maduro le pongan un alto. Que digan ¡®esto ya va a ser muy costoso, vamos a aprovechar que controlamos todos los poderes, el Congreso, el Consejo Electoral, la Corte Suprema, todo el sistema judicial, PDVSA, y por supuesto, los militares, para negociar una transici¨®n¡¯, pasar a un nuevo cap¨ªtulo y tratar de negociar con los americanos las sanciones y juicios pendientes. A este escenario yo le asigno baja probabilidad, pero dada la magnitud de la ventaja que tiene Gonz¨¢lez Urrutia, no lo descarto.
P. Has estimado que revivir al sector petrolero venezolano a su plena potencia requerir¨ªa una inversi¨®n de entre 8.000 y 10.000 millones de d¨®lares al a?o durante, por lo menos, ocho a?os. Al mismo tiempo, se est¨¢ promoviendo a nivel mundial la transici¨®n de hidrocarburos a energ¨ªas limpias. ?En d¨®nde deja esto a Venezuela?
R. Venezuela tiene un problema desde la perspectiva de transici¨®n energ¨¦tica, que es que la mayor parte de su crudo es extrapesado y genera mayores emisiones de di¨®xido de carbono en su extracci¨®n y transporte. Si el mundo va a poner impuestos al carbono o alg¨²n otro mecanismo que penalice a los pa¨ªses que emiten m¨¢s en la producci¨®n de petr¨®leo, eso ser¨ªa una desventaja. Por ahora, no es el caso. Hay una demanda importante de crudo pesado en EE UU y el crudo extrapesado es competitivo en t¨¦rminos de costos de producci¨®n. Pero, si uno ve un horizonte de largo plazo, hay una luz amarilla en el tablero. Eso se ve en el hecho de que hay empresas internacionales de gran calibre que en el pasado estuvieron interesados en operar proyectos en Venezuela como BP o Shell, que ya no est¨¢n para nada interesados. Por ahora, si se dan las condiciones que menciono, cambios legales, estabilidad pol¨ªtica, un consenso nacional de la apertura a la inversi¨®n privada, yo creo que s¨ª puede llegar la inversi¨®n. Si analizamos las perspectivas econ¨®micas, el crecimiento poblacional, y las pol¨ªticas p¨²blicas actuales, debemos esperar un pico en la demanda de hidrocarburos en los pr¨®ximos diez a?os. Esto presenta una oportunidad para Suram¨¦rica, pa¨ªses como Brasil y Argentina. Para Venezuela es m¨¢s complicado, porque si tardan diez a?os en alcanzar una producci¨®n de 3 millones de barriles diarios, llegar¨¢n justo cuando la demanda empezar¨¢ a caer. Mi sensaci¨®n es que a Am¨¦rica Latina le quedan un par de d¨¦cadas, en casi cualquier escenario de transici¨®n energ¨¦tica, teniendo espacio para para producir m¨¢s petr¨®leo. Venezuela y otros pa¨ªses de la regi¨®n tienen que resolver el problema de las emisiones de metano, que es grav¨ªsimo. Es un tema que, si no resuelven y si no se hacen las inversiones necesarias, el mundo los va a castigar.
Sigue toda la informaci¨®n de Econom¨ªa y Negocios en Facebook y X, o en nuestra newsletter semanal
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.