Maduro avanza en su narrativa electoral paralela ante la falta de pruebas de su triunfo

El presidente de Venezuela, Nicol¨¢s Maduro, ha intensificado desde el lunes la elaboraci¨®n de una narrativa paralela ante la evidencia de que faltan las actas que demuestren que el domingo pasado result¨® vencedor en las elecciones presidenciales. El CNE, el ¨®rgano electoral, no hab¨ªa entregado hasta mediado este jueves los n¨²meros detallados por centro de votaci¨®n, lo que ha generado un enorme escepticismo dentro de Venezuela y en la mayor¨ªa de la comunidad internacional. Cada vez son m¨¢s actores los que dan por hecho que el chavismo cometi¨® un fraude masivo que ocult¨® la victoria opositora. Con la Biblia en la mano, la banda presidencial cruz¨¢ndole el pecho mientras camina de forma rotunda con esos casi dos metros de altura, debajo de un cuadro del libertador Sim¨®n Bol¨ªvar o ante un comando militar en guardia frente a Palacio preparado para enfrentar una invasi¨®n extranjera, Maduro insiste una y otra vez en que el pueblo le refrend¨® en las urnas.

No se ha limitado solo a empe?ar su palabra. El presidente de Venezuela lleva d¨ªas hablando horas y horas frente a las c¨¢maras para presentar una verdad alternativa al mundo. Para afianzar ese relato, se present¨® el mi¨¦rcoles en el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) con una pila de documentos que le entreg¨® a la presidenta de la instituci¨®n, Caryslia Rodr¨ªguez, a la que le pidi¨® investigar todo el proceso y certificar el resultado. Mientras Maduro le daba los papeles, detr¨¢s, de manera solemne, aguardaba la c¨²pula del Estado, incluido el estamento militar. El fallo del TSJ a favor del resultado no resultar¨¢ ning¨²n misterio. El TSJ se encuentra bajo control chavista y, de hecho, Rodr¨ªguez fue hasta hace poco militante del PSUV, el partido oficialista -se trata del mismo ente que inhabilit¨® a la dirigente opositora Mar¨ªa Corina Machado-. Los candidatos han sido citados este jueves en el tribunal a las dos de la tarde.

La misma noche de los resultados, algo parec¨ªa indicar que no iba bien. El presidente del CNE, Elvis Amoroso, dijo que el retraso en proporcionar los datos se deb¨ªa a un hackeo a la instituci¨®n, con el que se pretend¨ªa impedir y ralentizar la totalizaci¨®n del conteo. Horas m¨¢s tarde, el fiscal general de la naci¨®n, Tarek William Saab, acus¨® a varios opositores de estar detr¨¢s de esta confabulaci¨®n, que se hab¨ªa perpetrado desde Macedonia del Norte ¡ªel Gobierno de ese pa¨ªs ha desmentido cualquier operaci¨®n en este sentido¡ª.

La oposici¨®n estaba preparada para algo as¨ª. Hab¨ªa distribuido activistas por toda Venezuela con la instrucci¨®n de que consiguieran una copia o fotografiaran las actas. Buena parte de ellas est¨¢n en su poder: han creado una p¨¢gina web que recoge m¨¢s del 80% de actas que defienden son reales. Si se atiende a esos n¨²meros, Edmundo Gonz¨¢lez, el candidato opositor, result¨® vencedor con claridad, con 7,1 millones de votos (67%) por 3,2 millones (30%) de Maduro.

Las explicaciones acerca de lo que ocurri¨® durante esas horas de cierre de mesas resultan confusas. El CNE, controlado por Amoroso, un amigo personal de Maduro, achaca a estos supuestos ataques del exterior la dificultad para entregar las actas. Sin embargo, la explicaci¨®n resulta rocambolesca. El sistema electoral venezolano est¨¢ 100% automatizado, pero las actas, antes de que se env¨ªen a la central, se imprimen por si ocurriese exactamente esto que se denuncia. Se trata de un sistema muy garantista, dise?ado por el chavismo al poco de llegar al poder, cuando contaba con un apoyo ciudadano masivo. Ahora, le juega en su contra.

Una vez que todas esas actas llegaron el domingo a la sede de la instituci¨®n en Caracas, el escrutinio y el resultado final es autom¨¢tico, no lo puede tocar nadie. Existe incluso una habitaci¨®n donde se procesan todos estos n¨²meros y se arroja un resultado que se imprime para que sea le¨ªdo de inmediato a la opini¨®n p¨²blica. El problema es que, de acuerdo a expertos consultados, el comunicado que ley¨® Amoroso dando por ganador a Maduro no hab¨ªa surgido de ese lugar, sino en su propio despacho.

El CNE tiene ahora 30 d¨ªas para publicar en una gaceta los resultados, disgregados mesa por mesa, como ha hecho hist¨®ricamente. Los expertos tambi¨¦n se?alan que, por las particularidades del proceso, las certificaciones que lo acompa?an, los testigos y los observadores no hay posibilidad de que se falsifiquen unas actas, el enga?o ser¨ªa muy evidente. ¡°Est¨¢bamos preparados para un fraude, pero no tan burdo y obvio¡±, cuenta una fuente de la oposici¨®n que particip¨® en el recuento durante la noche electoral.

La sospecha de que se ha alterado el escrutinio de votos crece y crece a medida que pasan las horas. Los l¨ªderes de las potencias de izquierda que todav¨ªa tienen alguna influencia sobre Maduro, entre los que se encuentran el colombiano Gustavo Petro, el brasile?o Lula Da Silva y el mexicano Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, no verbalizan todav¨ªa que el chavismo ha cometido un fraude, pero le exigen al presidente que presente cuanto antes las actas, primero para despejar cualquier duda, y segundo, para evitar m¨¢s protestas en las calles que generen m¨¢s muertos. Si con esas pruebas confirma que gan¨®, que siga en el poder, aunque garantiz¨¢ndole sus derechos a los opositores, que ahora mismo est¨¢n siendo perseguidos y encarcelados.

El gran elefante en la habitaci¨®n es el escenario que se presentar¨ªa en el caso de que no haya ning¨²n g¨¦nero de duda de que Maduro perdi¨®. En ese caso, de acuerdo a fuentes que participan en esas negociaciones al m¨¢ximo nivel, habr¨ªa que negociar una salida para el chavismo. Maduro, por el momento, no parece darse por aludido y levanta con la mano derecha un tomo de las escrituras. A los que creen que se van a rendir, les dijo: ¡°Soy guerrero del amor¡±.

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