NFTs en el lujo y el arte digital: ?hasta d¨®nde pueden llegar?
El mercado del arte atraviesa por uno de sus momentos m¨¢s at¨ªpicos, pero tambi¨¦n uno de los m¨¢s esperados y evidentes, en donde todo su potencial especulativo se ha encontrado de forma plena con las posibilidades del ecosistema digital. ?Estamos ante un punto de inflexi¨®n o s¨®lo es un grito desesperado m¨¢s del capitalismo?
Uno de los principales pilares sobre los cu¨¢les a¨²n reposa y se codicia una obra de arte es, adem¨¢s su valor y trascendencia dentro de su contexto y discurso, es el sentido ¨²nico que posee, o bien todo aquello que puede hacer de una pieza distinta al resto de otras. No obstante, con los a?os este elemento se ha expandido, reconfigurado y tambi¨¦n desfigurado para especular en los mercados sobre el posible valor, o ausencia de, en una pieza, instalaci¨®n, arte objeto y, recientemente, el arte digital.
Al ritmo voraz que marca el mercado y las ¨²ltimas tendencias digitales, y a¨²n cuando buena parte de la poblaci¨®n no sabe bien a bien sobre t¨¦rminos como tokens no fungibles o cadenas blockchain, la moda del NFT se ha acelerado de forma impensable durante los ¨²ltimos dos a?os, alcanzando al arte y a los mercados del arte.
Entre los cada vez m¨¢s frecuentes problemas y especulaciones por pagos justos, regal¨ªas y detalles contractuales, el blockchain se proyecta como un m¨²sculo y herramienta potencial para desarrollar y eliminar engorrosos intermediarios dentro de distintas industrias, incluyendo la del lujo, empezando por solucionar conflictos asociados a los pagos, e incluso a llegar a un involucramiento mayor por parte de creadores, productores y artistas con sus p¨²blicos o consumidores finales.
Y si bien no todas las voces involucradas o con conocimiento de causa se encuentran a favor de los NFTs, este instrumento digital ha demostrado un poder m¨¢s all¨¢ de una moda caprichosa m¨¢s por parte de los grandes emporios del mercado.
Los llamados non-fungible-tokens o NFT no son otra cosa que tokens creados en una Blockchain espec¨ªfica que poseen un contenido ¨²nico e irrepetible (imaginemos una fotograf¨ªa digital que no se puede compartir, replicar, hacer captura de pantalla, ni nada por el estilo). Esta posibilidad puede ser o bien una obra de arte, un art¨ªculo o pieza coleccionable, poderes en un juego, el t¨ªtulo de propiedad de una casa real, o pr¨¢cticamente cualquier cosa que podamos pensar.
Al estar alojados en Blockchains como las criptodivisas Binance Smart Chain, el Bitcoin o el Ethereum, estos tokens no pueden ser duplicados o falsificados, por lo que nuestra compra podr¨¢ estar asegurada en cuanto a su original se refiere.
Y si bien el experimento era prometedor, curioso y fascinante hace dos a?os, en julio de 2021 alarm¨® a los analistas financieros, cuando durante una subasta en la afamada casa de pujas, Christie¡¯s, de forma remota, sin la ya ic¨®nica escena de una sala llena y el martillazo final, un lote de collages de im¨¢genes digitales titulado Todos los d¨ªas: los primeros 5000 d¨ªas, alcanz¨® la suma de 69 millones de d¨®lares, pagados con el equivalente en Etherum.
Fue el mismo autor de la pieza, Beeple, quien calific¨® los NFT como una potencial burbuja especulativa, ya que, en cuanto cambi¨® sus Ethers a d¨®lares, se sorprendi¨® con la volatilidad: ¡°No soy ni remotamente un criptopurista¡±, asegur¨® el artista digital.
Los clubes deportivos, la industria musical, el ecosistema art¨ªstico que lleva d¨¦cadas probando suerte con el arte digital o Net Art, y todo aquel segmento susceptible del coleccionismo han sido los primeros en arriesgarse con los NFT. Pero la industria del lujo no se ha quedado atr¨¢s.
Recientemente, la casa de moda italiana Dolce & Gabbana lanz¨® una venta de NFT muy lucrativa, Collezione Genesi, que recaud¨® m¨¢s de seis millones de d¨®lares en un modelo h¨ªbrido f¨ªsico/NFT, compuesto por nueve piezas, uniendo el aspecto f¨ªsico de la moda y los aspectos metaf¨ªsicos de las NFT. ?Qu¨¦ compran ¡°realmente¡± los interesados? El art¨ªculo f¨ªsico y el NFT juntos.
Givency, Gucci y Louis Vuitton tambi¨¦n est¨¢n en la ruta del NFT, aunque de forma m¨¢s ¡°tradicional¡±, al poner al alcance NFT basados en dise?os gr¨¢ficos de una colecci¨®n, una pel¨ªcula que presenta su moda y un videojuego que lanzaron al mercado, respectivamente. Este experimento s¨®lo gener¨® 159,000 d¨®lares para Givency y 25,000 para la pel¨ªcula NFT de Gucci.
Una de las voces cr¨ªticas dentro de los alcances y posibles escenarios en torno al arte y los NFT ha sido el m¨²sico, productor y creador de la m¨²sica ambient, el brit¨¢nico Brian Eno, quien vislumbra ¡°un mundo inundado de especuladores y dinero f¨¢cil, porque los gobiernos mundiales, reacios a hacer verdaderos cambios estructurales que pongan en peligro el status quo, han decidido que la soluci¨®n para cualquier problema es imprimir m¨¢s dinero. Esa es probablemente la raz¨®n de que la Bolsa se dispare cuando se produce una emergencia como la covid, porque los especuladores saben que una nueva emergencia significa m¨¢s dinero y que gran parte de ¨¦l acabar¨¢ en sus manos¡±.
Del primer tuit de la historia, al meme del gato volador, pasando por portadas ic¨®nicas del Time, o el primer disco en NFT, algunos analistas ven la llegada de este instrumento intangible como la antesala de la reimaginaci¨®n del dinero, en donde los a¨²n incipientes campos sem¨¢nticos en torno al metaverso y las criptomonedas definir¨¢n el rumbo de las cosas.
Preguntamos a un analista financiero y a un curador de arte para dibujar el futuro de los NFT en el mundo del arte. ?Cu¨¢nto es lo m¨¢s caro que podr¨ªa llegar uno?, ?c¨®mo puede sumar a las fortunas del artista, del comprador o al patrimonio de un museo?, ?especulaci¨®n o un instrumento de expresi¨®n de los nuevos tiempos?