La campa?a electoral argentina se irrita: ¡°Si gana la oposici¨®n habr¨¢ calles regadas de sangre¡±

El Gobierno y la oposici¨®n pol¨ªtica de Argentina compiten por ver quien lo hace peor. El primero advierte sobre la inminencia de ¡°calles regadas de sangre y muertos¡±; la segunda llama a ¡°semi dinamitar todo¡± como ¨²nica soluci¨®n a la crisis que devasta al pa¨ªs. Faltan tres meses para las elecciones primarias y seis para las generales y la campa?a escala en virulencia. A juzgar por los primeros indicios, ser¨¢ mucho m¨¢s dura que en a?os anteriores, cuando al menos se hab¨ªan guardado las formas. El discurso incendiario del candidato antisistema Javier Milei, que escala en los sondeos inspirado en Jair Bolsonaro y Donald Trump, est¨¢ intoxicando, finalmente, el debate p¨²blico.

La primera piedra la tir¨® el expresidente Mauricio Macri durante un encuentro con empresarios, el 12 de abril pasado. Macri ya imagina al candidato presidencial del Gobierno, cualquier sea, en tercer lugar en octubre, fuera de la segunda vuelta. El desaf¨ªo, dice, ser¨¢ entonces enfrentar a Javier Milei. Y convencer al votante ¡°enojado¡± que pondr¨¢ su papeleta por el cambio por demolici¨®n que propone el libertario. ¡°Enfrentarlo es complicado¡±, dijo. ¡°Cada vez m¨¢s gente se enoja y que cree que hay que dinamitar todo, yo creo que hay que semi dinamitar todo¡±. Macri no ser¨¢ candidato -en marzo se autoexcluy¨® de la carrera presidencial- pero marca el tono, siempre m¨¢s af¨ªn a su preferida, la exministra de Seguridad Patricia Bullrich, que al alcalde de Buenos Aires, Horacio Rodr¨ªguez Larreta, de perfil m¨¢s moderado.

Apenas un pu?ado de altos funcionarios dan la cara por el Gobierno en los medios. Una es la vocera presidencial, Gabriela Cerruti. El otro es el ministro Fern¨¢ndez, un todoterreno reconocido por su discurso encendido. Consultado por el escenario electoral, Fern¨¢ndez carg¨® contra Macri y Milei, a quienes insiste en meter en la misma bolsa del extremismo de derecha. ¡°Vemos un grupo de gente que tiene cero formaci¨®n, con vocaci¨®n por el agravio y por lastimar, y lo que propone saldr¨ªa ¨²nicamente por represi¨®n. Las calles regadas de sangre y muertos van a producir si tuvieran la posibilidad de ser Gobierno¡±, dijo.

Agitar el fantasma de Milei es el principal objetivo de la Casa Rosada. Entre las medidas de este economista ultraliberal est¨¢ dolarizar para bajar la inflaci¨®n, cerrar los ministerios de Educaci¨®n, Salud y Desarrollo Social para reducir el d¨¦ficit y hasta clausurar para siempre el Banco Central. Tambi¨¦n propone terminar con los planes de ayuda social y hasta las prestaciones m¨¦dicas para los m¨¢s pobres, en un pa¨ªs donde cuatro de cada diez personas no gana lo suficiente para comer.

A Macri, en tanto, le preocupa que ese discurso radical est¨¢ prendiendo entre los m¨¢s j¨®venes y le saca votos a su sector. Por eso ahora propone dinamitar casi todo, sin aclarar que dejar¨ªa en pie.

El ministro An¨ªbal Fern¨¢ndez recogi¨® el guante de Macri, aunque con desmesura. Fue la vocera Cerruti la que este viernes tuvo la amarga tarea de defenderlo. Dijo que no compart¨ªa el estilo de su colega en el Gabinete, pero que asum¨ªa como propia la cuesti¨®n de fondo. ¡°Van a dinamitar todo, van a romper todo. Lo ha dicho el expresidente Mauricio Macri, diciendo ¡®esta vez no voy a tener la paciencia o la lentitud que tuve la vez anterior¡¯. A eso se estaba refiriendo el ministro An¨ªbal Fern¨¢ndez¡±, dijo.

Las declaraciones del ministro tuvieron dos efectos inmediatos. Sumaron sin demoras el repudio generalizado de la oposici¨®n y, al mismo tiempo, lograron que por un momento pasasen a un segundo plano las peleas internas que la desangra. Esta semana, el jefe de Gobierno de Buenos Aires, Horacio Rodr¨ªguez Larreta, decidi¨® que en su distrito se votar¨ªa por separado a presidente y alcalde, una jugada que puede beneficiar a los candidatos de los partidos m¨¢s chicos de la coalici¨®n. Macri y Bullrich lo acusaron de traici¨®n y hasta se temi¨® una ruptura en el coraz¨®n de la alianza opositora. Hasta que lleg¨® An¨ªbal Fern¨¢ndez y les regal¨® un motivo para la unidad.

Mientras los pol¨ªticos discut¨ªan sobre muertos en las calles y dinamita, este viernes se conoci¨® en Argentina el ¨²ltimo ¨ªndice de inflaci¨®n: 7,7% en marzo, el m¨¢s alto para un solo mes desde la crisis del corralito de 2001. Es all¨ª, muy lejos de las urnas, donde est¨¢ puesta la atenci¨®n de los argentinos.

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