El peronismo pone sus ¨²ltimas esperanzas electorales en la provincia de Buenos Aires

¡°?Hoy es un d¨ªa peronista!¡±, grit¨® con todas sus fuerzas la animadora. Se refer¨ªa al sol primaveral que acompa?¨® el cierre de campa?a del candidato presidencial del Gobierno argentino, Sergio Massa, en un estadio de f¨²tbol en Avellaneda, en la periferia de Buenos Aires. Desde all¨ª partieron el 17 de octubre de 1945 los obreros hacia la Plaza de Mayo para pedir por la libertad de Juan Domingo Per¨®n, preso por los militares del Gobierno que integraba. La fecha se celebra desde entonces como el d¨ªa de la Lealtad Peronista, efem¨¦rides fundacional del movimiento; lo del ¡°d¨ªa peronista¡± naci¨® a?os despu¨¦s, cuando Luis El¨ªas Sojit, un locutor deportivo especializado en automovilismo, alentaba a la multitud celebrando los d¨ªas despejados y radiantes. Las miles de personas que este martes acompa?aron a Massa comprendieron el mensaje. El peronismo hab¨ªa desplegado toda su iconograf¨ªa para celebrar al candidato y al gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, confiados en que en ese basti¨®n electoral est¨¢n las pocas esperanzas de triunfo que tiene el peronismo el 22 de octubre, cuando se celebra la primera vuelta electoral para las presidenciales.

Massa es el aspirante del peronismo y tambi¨¦n ministro de Econom¨ªa. Tiene poco para ofrecer. La inflaci¨®n se acerca al 140% interanual, la pobreza ronda el 40% y el desempleo crece. Ning¨²n candidato en su sano juicio tendr¨ªa esperanza alguna de triunfo, pero el peronismo es un hueso duro y a¨²n da batalla. Parte de sus esperanzas est¨¢n puestas en la provincia de Buenos Aires, donde se concentra el 37% del censo electoral. Es la provincia m¨¢s rica y tambi¨¦n la que tiene m¨¢s pobres.

El gobernador Axel Kicillof, el hombre elegido por Cristina Kirchner en 2019 para domesticar ese monstruo de mil cabezas, fue el candidato m¨¢s votado en las primarias de agosto y ahora va por su reelecci¨®n. Si Massa tiene alguna posibilidad de sobrevivir a la primera vuelta es por Buenos Aires. El estadio de Arsenal en Avellaneda fue una muestra de ello. Las distintas agrupaciones que integran eso que se llama peronismo llenaron el predio con unas 20.000 personas, desplegaron sus banderas y dejaron de lado, por una tarde, que Massa no es el hombre que ellos esperaban como candidato.

Paradojas de la pol¨ªtica, Massa fue ungido en el D¨ªa de la Lealtad luego de haber roto con el peronismo en 2009 y haber prometido que meter¨ªa presa a Cristina Kirchner, la l¨ªder del movimiento. La familia dej¨® de lado la traici¨®n y acogi¨® al candidato como un hijo pr¨®digo. Todo sea por entrar el pr¨®ximo domingo a la segunda vuelta, aunque sea por detr¨¢s de Javier Milei, el economista ultraliberal que hoy lidera los sondeos con la promesa de terminar de una vez por todas con ¡°la casta pol¨ªtica¡±, es decir, el peronismo. ¡°Se escucha a la militancia peronista. Si esto no es un d¨ªa peronista, ?qu¨¦ es?¡±, preguntaba a la multitud la locutora. ¡°No necesitamos de las redes sociales, sabemos como peronistas que somos el movimiento m¨¢s grande y lo estamos demostrando. Es la m¨ªstica de decir ¡®soy peronista¡±, celebraba. La ¨¦pica estaba servida.

El peronismo est¨¢ en un claro proceso de renovaci¨®n, aunque todav¨ªa no tenga claro de qu¨¦ se trata. En el d¨ªa m¨¢s importante del movimiento qued¨® fuera Cristina Kirchner, ausente del mitin en Avellaneda y tambi¨¦n de la campa?a. La vicepresidenta est¨¢ recluida en el Senado y apenas participa de las sesiones. Ha dejado la pelea por la presidencia en manos de Massa, lo mismo que Alberto Fern¨¢ndez, un presidente en clave testimonial que una semana antes de las elecciones est¨¢ de gira por China.

Si Massa es la apuesta para la presidencia, Kicillof es la ¨²ltima esperanza de un gran triunfo provincial. ¡°Lo que proponen es exterminar al peronismo¡±, dijo el gobernador, que va por su reelecci¨®n, en referencia a Javier Milei, el ultra que ha puesto contra las cuerdas al partido m¨¢s poderoso de Argentina. ¡°Pero qu¨¦ democracia es esa, cuyo extremo de violencia fue el atentado de Cristina. Ac¨¢ no respondemos con odio, respondemos con propuestas¡±, dijo. Fue una de las pocas referencias a Kirchner en un mitin donde volvi¨®, como nunca antes, a hablarse de ¡°peronismo¡±.

Massa tiene claro que vive de votos prestados. ¡°Vengo a ratificar mi lealtad y compromiso con esa provincia que es la locomotora de la Argentina, que hace cuatro a?os tiene un gobernador que va al frente. El domingo el triunfo ser¨¢ en parte el trabajo de los compa?eros y compa?eras de la provincia de Buenos Aires¡±, dijo el candidato ante Kicillof. Para cerrar el mitin son¨® a todo volumen la marcha peronista. Fue un regreso a las fuentes cuando la hegemon¨ªa est¨¢, por primera vez en muchos a?os, en peligro.

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