Un mes de Milei en Argentina: el presidente apuesta por sacar adelante su reforma del Estado mientras retiene el respaldo de las urnas

Javier Milei ha cumplido esta semana un mes al frente del poder en Argentina. Presidente de un pa¨ªs en crisis cuya inflaci¨®n ya sobrepasa la de Venezuela como la peor de Am¨¦rica, Milei se ha propuesto desmantelar el Estado amparado en el ¨²nico poder pol¨ªtico tiene hasta ahora: la legitimidad en las urnas. Las vacaciones del verano argentino han sido interrumpidas por las casi mil medidas que el presidente busca imponer mediante un decreto y una megaley que ya est¨¢ discutiendo el Congreso en sesiones extraordinarias, y el Gobierno, minor¨ªa en ambas c¨¢maras, conf¨ªa en presionar al poder pol¨ªtico con el respaldo popular que tiene. Est¨¢ por verse: las encuestas m¨¢s recientes le dan a Milei entre un 35% y un 39% de imagen positiva, menor que el 55% con el que lleg¨® al Gobierno en una segunda vuelta el pasado 19 de noviembre, pero algo mejor que su voto duro, el 29% con el que qued¨® segundo en la primera ronda electoral de octubre.

En un mes, el nuevo Gobierno argentino devalu¨® la moneda un 50%, alcanz¨® niveles de inflaci¨®n r¨¦cord en tres d¨¦cadas (25,5% solo para diciembre), y entre liberalizaciones o ajustes, hizo escalar los precios de los alimentos, la salud privada y el transporte p¨²blico hasta un 30%. Hay desaz¨®n en un pa¨ªs que es m¨¢s caro todos los d¨ªas, y donde para pertenecer al 10% m¨¢s rico solo hace falta ganar unos 490 d¨®lares al mes, pero Milei todav¨ªa no ha visto ese malestar ejercer mucho m¨²sculo en la calle. Ha habido protestas cada semana, pero los ojos est¨¢n puestos en el pr¨®ximo 24 de enero, d¨ªa en el que la Central General de los Trabajadores (CGT) ha llamado a un paro general y una marcha al Congreso que pondr¨¢ a prueba otra vez el protocolo de mano dura contra los cortes de ruta impulsado por el Gobierno.

Milei ha celebrado Januc¨¢ con la comunidad jud¨ªa de Buenos Aires, enviado una carta al Papa para invitarlo a viajar el pa¨ªs, visitado la Ant¨¢rtida, donde se abraz¨® a las bases militares que lo votaron en mayor¨ªa, y hasta paseado por el balneario de Mar del Plata, donde se subi¨® al escenario de su pareja, la artista F¨¢tima Florez, con quien comparti¨® un beso lascivo que dio la vuelta al mundo y tuvo m¨¢s repercusi¨®n que muchas de sus decisiones pol¨ªticas. Su Gobierno tambi¨¦n anunci¨® la desarticulaci¨®n de una ¡°posible c¨¦lula terrorista¡± formada por un profesor de tenis de mesa, un peluquero y un tercer hombre que se present¨® como ¡°agente inorg¨¢nico de la embajada de Estados Unidos¡± ¡ªla causa acumula m¨¢s dudas que pruebas, seg¨²n investigaciones de medios nacionales¡ª y releg¨® al encargado de redes sociales de la Casa Rosada, un militante de 22 a?os que hab¨ªa difundido fotograf¨ªas personales en las cuentas oficiales.

Tras su asunci¨®n, el 10 de diciembre, las primeras medidas tardaron en llegar. Fueron dos d¨ªas, pero la expectativa era alta. Fue el ministro de Econom¨ªa, Luis Caputo, quien anunci¨® un dec¨¢logo de medidas econ¨®micas que incluyen la devaluaci¨®n de la moneda un 50% y la quita de subsidios a la energ¨ªa y el transporte. La devaluaci¨®n deb¨ªa acercar la cotizaci¨®n del d¨®lar oficial, que pas¨® de 400 pesos por d¨®lar a 820, al que opera en la bolsa o se vende en la calle. El efecto, una se?al del buen recibimiento que tuvieron las decisiones de Caputo en los mercados, dur¨® unas pocas semanas. La brecha cambiaria se hab¨ªa reducido a menos del 20%, pero estos d¨ªas ha vuelto a subir hasta un 40%.

El fuerte ajuste estuvo acompa?ado de otros dos avisos. Un combo. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, present¨® un protocolo para reprimir las protestas y Sandra Petovello, la ministra de Capital Humano ¡ªel ministerio que condensa las antiguas carteras de Educaci¨®n, Trabajo y Desarrollo Social¡ª, amenaz¨® a los beneficiarios de planes sociales con no dar las ayudas a quienes protestaran en las calles. ¡°El que las hace, las paga¡± y ¡°el que corta, no cobra¡±, fueron sus m¨¢ximas.

Despu¨¦s, las medidas vinieron todas juntas. Milei impuso por decreto m¨¢s de 300 cambios normativos y derogaciones. La ciudadan¨ªa sali¨® a los balcones a protestar con cacerolas y los sindicatos reunieron en las calles a m¨¢s de 20.000 manifestantes, seg¨²n sus c¨¢lculos, contra un decreto que consideran ¡°inconstitucional¡±. No se hab¨ªa desconcentrado la manifestaci¨®n cuando el Gobierno envi¨® al Congreso una iniciativa con m¨¢s de 600 art¨ªculos que declara al pa¨ªs en ¡°emergencia p¨²blica¡± y transfiere al Ejecutivo facultades legislativas en cuestiones econ¨®micas, financieras, previsionales, fiscales, sanitarias y hasta electorales. Entonces, la CGT, el principal sindicato del pa¨ªs, convoc¨® una huelga.

El megadecreto ya entr¨® en vigencia, pero a¨²n puede ser rechazado por el Congreso y hay partes que han sido frenadas por la justicia: al menos dos fallos han suspendido la reforma laboral inclu¨ªda en el texto y decenas de amparos se acumulan en los juzgados. La ley ¨®mnibus, llamada as¨ª por su extensi¨®n y variedad de temas, est¨¢ siendo tratada en sesiones extraordinarias por el Parlamento. El Gobierno asegur¨® que el contenido de las medidas ¡°no se negocia¡±, pero los ministros del Gabinete dieron las primeras se?ales de flexibilidad al reconocer ¡°errores¡± en la redacci¨®n del texto y al asegurar que analizar¨¢n las ¡°inquietudes¡± de los legisladores de la oposici¨®n para que la ley pueda ser aprobada. Milei solo cuenta con 38 diputados y siete senadores en el Congreso, y necesita el apoyo de otras bancadas si pretende avanzar.

Miguel De Luca, doctor en Ciencia Pol¨ªtica, se?ala que los presidentes que llegan al poder con minor¨ªa en el Congreso tienen dos opciones: ampliar la coalici¨®n de Gobierno para construir una mayor¨ªa o elegir una estrategia de choque. El an¨¢lisis pol¨ªtico ha mostrado que en el segundo caso el enfrentamiento entre el Legislativo y el Ejecutivo escala hasta que los presidentes clausuran los Congresos o los Parlamentos eyectan al mandatario. ¡°Las primeras medidas de Milei son casi calcadas de los presidentes que buscan imponerse. El contexto de grave crisis econ¨®mica, pero lo cierto es que Milei ni siquiera ensay¨® un intento de negociaci¨®n con el Congreso¡±, se?ala De Luca. Para el polit¨®logo y consultor pol¨ªtico Pablo Salinas, eso responde a un Gabinete con poca experiencia: ¡°Pensaron que ser¨ªa f¨¢cil avanzar con el proyecto sin modificaciones y se encontraron con una c¨¢mara en la que se negocia todo porque es la din¨¢mica del Poder Legislativo desde hace m¨¢s de cien a?os en Argentina¡±.

Hasta el FMI, que esta semana celebr¨® el ¡°ambicioso plan de estabilizaci¨®n¡± que impulsa el Gobierno y le otorg¨® fondos por 4.700 millones de d¨®lares para que Argentina pueda pagar su deuda con el propio organismo, le ha pedido ¡°construir apoyo pol¨ªtico¡± para que su reforma sea avalada en el Congreso. Esta semana, tras casi dos meses sin noticias, el Fondo y Argentina acordaron continuar con el plan de pagos pactado por el peronismo en 2022 para que el pa¨ªs devuelva los 44.000 millones de d¨®lares otorgados al conservador Mauricio Macri en 2018. El peronismo no hab¨ªa logrado cumplir sus metas y termin¨® pagando sus vencimientos con otros pr¨¦stamos, como el intercambio de monedas con China. La situaci¨®n de Milei es diferente: Argentina ha acordado ahora llevar el d¨¦ficit del 3% anual a un super¨¢vit del 2%, y acumular reservas por 10.000 millones de d¨®lares.

El FMI espera que la implementaci¨®n del ajuste presentado ante el Congreso sea ¡°continuo y duradero¡± para garantizar las metas comprometidas, y el Gobierno oscila entre el di¨¢logo y las amenazas. ¡°En la medida que la ley no pase, las medidas van a ser m¨¢s duras¡±, advirti¨® el mi¨¦rcoles por la noche el ministro de Econom¨ªa, Luis Caputo, tras anunciar su acuerdo con el Fondo. Caputo, que fue uno de los funcionarios encargados del pr¨¦stamo pedido por Macri en 2018 y que volvi¨® al Gobierno con Milei como rostro visible de las medidas de shock econ¨®mico que han elevado los precios en las ¨²ltimas semanas, celebr¨® que Milei hab¨ªa tenido el ¡°coraje¡± de ajustar la econom¨ªa y que la sociedad lo hab¨ªa acompa?ado con el voto. ¡°La pregunta es si los pol¨ªticos van a estar a la altura de las circunstancias¡± dijo.

Los elogios entre el presidente y su ministro han sido mutuos. Agitando el fantasma de una hiperinflaci¨®n desde que asumi¨® la presidencia, Milei areng¨® estos d¨ªas a Caputo mientras esperaban el ¨ªndice de precios de diciembre, la primera medici¨®n de la inflaci¨®n de su Gobierno. El presidente hab¨ªa advertido de que si la cifra era menor al 30% era un ¡°numerazo¡± y que hab¨ªa que ¡°llevar en andas¡± a su ministro si lo lograba. Diciembre cerr¨® con el 25,5% de aumento promedio en el IPC, y dej¨® la inflaci¨®n interanual en el 211,4%, la m¨¢s alta del mundo a la espera de que L¨ªbano revele sus cifras del ¨²ltimo mes de 2023.

La apuesta fuerte para levantar la econom¨ªa est¨¢ puesta en la reforma que hoy discute el Congreso, pero esa discusi¨®n no es el ¨²nico desaf¨ªo del Ministerio de Econom¨ªa. La pol¨ªtica exterior de Milei ha puesto en riesgo la relaci¨®n del nuevo Gobierno con sus principales socios comerciales, Brasil y China, despu¨¦s de que el Gobierno desistiera a ¨²ltimo momento de integrar las BRICS, el bloque de econom¨ªas emergentes fundado por Brasil, China, Rusia, India y Sud¨¢frica. La Canciller¨ªa de Milei, seg¨²n reportes de la prensa local, ha cruzado una l¨ªnea roja con China, el segundo socio comercial del pa¨ªs y su gran prestamista del ¨²ltimo a?o para cumplir con el FMI, al acercarse a Taiw¨¢n. La canciller china, Mao Ning, admiti¨® el jueves que hab¨ªa le¨ªdo ¡°reportes relevantes¡± sobre el tema y que el Gobierno argentino le hab¨ªa aclarado que eran mentira. Este viernes, la canciller argentina, Diana Mondino, recibi¨® por primera vez al embajador chino en Buenos Aires para limar asperezas.

Desde el atril del que habla a los periodistas cada ma?ana, el portavoz presidencial, Manuel Adorni, no ha negado esa informaci¨®n, pero ha estado ocupado desmintiendo otros rumores sobre las fisuras internas dentro del Gabinete, una de ellas entre el presidente y la vicepresidenta, Victoria Villarruel. ¡°Es absolutamente falso¡±, asegur¨®.

Villarruel, que obtuvo su primer triunfo como presidenta del Senado al lograr imponer a un candidato libertario como presidente provisional de la C¨¢mara alta, no tiene todav¨ªa un despacho en la Casa Rosada, la sede del Ejecutivo argentino. Algunos medios especulan con que la vicepresidenta qued¨® desplazada dentro del Gabinete por otras figuras, como la hermana del presidente, Karina Milei, secretaria de la Presidencia, o Patricia Bullrich, ministra de Seguridad, un ¨¢mbito que en la campa?a fue terreno de Villarruel. Una publicaci¨®n en el Financial Times, compartida por la vicepresidenta en redes sociales y despu¨¦s eliminada, aliment¨® las dudas. El texto cierra con la cita de un diplom¨¢tico que sugiere que Villarruel podr¨ªa ¡°montar su propio proyecto pol¨ªtico¡± y est¨¢ ¡°dispuesta a todo¡±. Villarruel despej¨® las dudas en el primer aniversario del ultraderechista en la Casa Rosada. ¡°Nuestros esfuerzos para el ¨¦xito de su gesti¨®n¡±, escribi¨® en Instagram.

Tras un mes de Gobierno, Milei se mud¨® finalmente esta semana a la Quinta de Olivos, la residencia oficial de los presidentes argentinos desde 1955. Los primeros meses del mandato vivi¨® en el Hotel Libertador, que fue tambi¨¦n el centro de operaciones durante la campa?a. El Gobierno a¨²n tiene pendiente dar explicaciones sobre el pago de la estad¨ªa. La mudanza se retras¨®, en parte, por la construcci¨®n de habit¨¢culos para los cuatro mastines del presidente, seg¨²n argument¨® el Gobierno. ¡°La idea era poder adaptar algunas estructuras para que mis hijitos puedan estar lo mejor posible¡±, dijo el presidente. Los dichos de una periodista, que inform¨® falsamente que los perros ya hab¨ªan sido trasladados a la residencia oficial, enfureci¨® al presidente. ¡°Escandalosa la impunidad con la que inventan y operan¡±, escribi¨® en redes sociales y el agravio le vali¨® el repudio de entidades period¨ªsticas.

Milei ha moderado sus formas desde que lleg¨® a la Presidencia. Pero cada tanto, y sobre todo en las redes, se quita el traje de presidente y vuelve a ser el hombre irascible e histri¨®nico que lo llev¨® desde los estudios de televisi¨®n a la Casa Rosada.

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