Humanamente libre
¡®Pancartas escolares¡¯ re¨²ne sentencias, aforismos y ense?anzas que el escultor ?ngel Ferrant usaba en sus clases de modelado
Sol¨ªa decir ?ngel Ferrant (1890-1961) eso de ¡°humanamente¡± cuando hablaba del trabajo manual, su principal herramienta de trabajo, como si la mano estuviera atada a un gesto per se generoso y solidario. Parece redundante, pero no. El escultor tambi¨¦n era un maestro en poner tildes en palabras disonantes, haci¨¦ndolas m¨¢s sonoras si cabe. Como su vocaci¨®n docente, era un tipo que tend¨ªa a dar sin pedir nada a cambio. Es lo que tienen los profesores. ?l lo fue en cuanto se dio cuenta de que el sistema educativo de los a?os treinta y cuarenta del siglo XX deb¨ªa renovarse y salir de esa falta de libertad (tambi¨¦n pol¨ªtica) instalada en la posguerra espa?ola. Y fue lejos en ello. Algunas de sus ideas sobre la ense?anza art¨ªstica revolucionaron las escuelas donde todo giraba en torno al despotismo de la copia y el modelo.
Ferrant ten¨ªa otras cosas en mente. En vez de reproducir la realidad, dio prioridad a todo lo que ten¨ªa que ver con producir, una palabra que a menudo le le¨ªa en sus pizarras de clase. Producir quiere decir crear, inventar, hacer algo que estaba hecho. El futuro, pensaba, estaba en la desviaci¨®n de cualquier punto de vista est¨¢ndar que amplifique la variedad de las especies y la diferencia entre las personas. En la disparidad de opiniones como horizonte. Muchas de las que pensaba o le¨ªa, las escrib¨ªa en folios in¨¦ditos hasta ahora y que ?rdora Ediciones publica de su legado documental y bibliogr¨¢fico, conservado en el Archivo del Museo Patio Herreriano de Arte Contempor¨¢neo Espa?ol de Valladolid. El conjunto se compone de cerca de 200 cuartillas, conservadas en 181 carpetas, de frases del propio Ferrant sobre la creaci¨®n art¨ªstica y otras que fue recopilando de autores con cuyas ideas sintonizaba, entre ellos artistas, fil¨®sofos o escritores como L¨¦ger, Chirino, Manet y Schopenhauer. Consignas que ?ngel Ferrant llamaba Pancartas escolares y que, rotuladas sobre papel, colgaban a modo de avisos en su taller de modelado.
El libro deviene una especie de literatura mural llena de extrav¨ªos y anotaciones, como quien trabaja con diagramas llenos de flechas. Muchas apuntan a la cuesti¨®n clave de la educaci¨®n art¨ªstica: ¡°El arte no se ense?a por la misma raz¨®n que una manzana no se fabrica¡±. Otras suman intensidad a esa m¨¢xima: ¡°Lo m¨¢s dif¨ªcil, de puro f¨¢cil, es acertar empezando de nuevo¡±. Un texto convertido en un suculento c¨®ctel de citas y cavilaciones sobre lo art¨ªstico y lo cotidiano que esconde el empe?o de Ferrant por fortalecer la imaginaci¨®n de sus alumnos. No es casualidad que su publicaci¨®n llegue justo ahora, cuando desde las instituciones culturales se reivindican, cada vez m¨¢s, los ideales de la libre ense?anza. Lo har¨¢ la Fundaci¨®n Juan March con su pr¨®xima exposici¨®n en oto?o sobre el af¨¢n experimental de Bruno Munari, avivado por el actual centenario de Gianni Rodari y su gram¨¢tica de la fantas¨ªa. Y el propio Patio Herreriano ya lo puso en pr¨¢ctica en 2019, cuando invit¨® al artista Antonio Ballester Moreno a dialogar con el ?ngel Ferrant profesor en el espacio del museo. El resultado fue una exposici¨®n sobre pedagog¨ªa, ?nfora, grotesco, armaz¨®n, maniqu¨ª, donde arte y educaci¨®n eran parte del mismo universo.
Pancartas escolares funciona como las novelas de David Markson: un proyecto narrativo sorprendente por la sencillez de sus recursos y revelador en una suerte de exhumaci¨®n po¨¦tica. Mismo perfil de escritor lector, poco convencional, personal¨ªsimo y arriesgado. Instrucciones para un aprendizaje m¨¢s expansivo del arte que encuentra una actualidad apabullante casi un siglo despu¨¦s.
Pancartas escolares
Autor: ?ngel Ferrant.
Editorial: ?rdora, 2020.
Formato: Tapa blanda. 164 p¨¢ginas. 15 euros
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