¡®Fundamentalmente fantas¨ªas para la resistencia¡¯: una parodia sin armon¨ªa ni concierto

Teatralizar la actualidad sangrante entra?a riesgos que Alfredo Sanzol no ha sabido arrostrar en esta ocasi¨®n. Su obra Fundamentalmente fantas¨ªas para la resistencia, estrenada en el Teatro Valle-Incl¨¢n de Madrid, es un caj¨®n de sastre en el que una trama pretendidamente tr¨¢gica sobre la guerra de Ucrania y otra par¨®dica en extremo se entremezclan sin armon¨ªa ni concierto. Por un lado, el autor y director navarro cuenta la peripecia de Patricia, autora kievita que est¨¢ escribiendo para su compa?¨ªa una comedia titulada Pim, pam, Putin; mientras que por el otro escenifica dicha comedia. La parte seria de su espect¨¢culo es prolija en consideraciones metateatrales (Patricia explica que sus actores son todos fruto de su imaginaci¨®n), pero la parte c¨®mica es puramente caricatural.

A trav¨¦s de su criatura, Sanzol no cesa de preguntarse: ¡°?Qu¨¦ sentido tiene hacer ahora una obra c¨®mica?¡±, quiz¨¢ porque es dif¨ªcil encontrarle un sentido art¨ªstico funcional a esta, que est¨¢ en la ant¨ªpoda de su divertid¨ªsima y luminosa comedia optimista El bar que se trag¨® a todos los espa?oles, estrenada dos a?os ha. En ella, ficcionaliza la historia de su padre con un conocimiento de causa que se transmit¨ªa al p¨²blico con la inmediatez de una descarga el¨¦ctrica. En cambio, en Fundamentalmente fantas¨ªas¡­ casi todos los personajes dram¨¢ticos resultan librescos por m¨¢s que el mon¨®logo inicial de Patricia pretenda conmover mediante un hilv¨¢n de lugares comunes.

A trav¨¦s de su criatura, Sanzol no cesa de preguntarse: ¡°?Qu¨¦ sentido tiene hacer ahora una obra c¨®mica?¡±

Arthur Miller, Wajdi Mouawad, el israel¨ª Ilan Hatsor y el olvidado Lev Birinskij (jud¨ªo de Lysianka, hoy territorio ucranio) han hablado en caliente sobre la actualidad b¨¦lica en piezas inolvidables: Todos eran mis hijos (sobre el negocio armament¨ªstico durante la II Guerra Mundial), Incendies (la Guerra del L¨ªbano), Re¡¯ulim (la represi¨®n de la primera Intifada) y Narrentanz (Mascarada), cr¨®nica bufa de la Revoluci¨®n Rusa de 1905. Acaso esta ¨²ltima, sat¨ªrica sin concesiones, podr¨ªa haberle marcado un camino m¨¢s decidido a Fundamentalmente fantas¨ªas¡­, donde Patrushev, consejero de Putin, parece difusamente inspirado en la figura del fil¨®sofo Aleksandr Duguin.

Jos¨¦ Antonio Lumbreras, int¨¦rprete de Putin, no parodia su figura ni su actitud, lo que podr¨ªa haber dado lugar a una interpretaci¨®n m¨¢s interesante, sino que se lanza a tumba abierta por la pendiente de su acreditado histrionismo, con el que se mete al p¨²blico en el bolsillo. La funci¨®n contiene alguna reflexi¨®n sugestiva y alg¨²n di¨¢logo digno del mejor Sanzol, pero cada vez que coge velocidad surge alguna nueva reflexi¨®n metateatral que la frena. Entre los int¨¦rpretes, destacan la verdad que Pepe Sevilla y Javier Lara le imprimen a sus personajes caricaturales, y las facultades canoras de Julia Rubio.

Al contrario que los autores antedichos, que se adentran en territorio minado, Sanzol en esta funci¨®n no se hace ninguna pregunta inc¨®moda ni se asoma a abismo alguno. Su trama avanza a base de trampas, alguna de ellas buena ley, y sus protagonistas se dan entre s¨ª explicaciones que parecen dirigidas al p¨²blico. Si la intenci¨®n del director del Centro Dram¨¢tico Nacional era abrir una reflexi¨®n pertinente sobre la guerra en Ucrania podr¨ªa haber hecho una indagaci¨®n dramat¨²rgica de m¨¢s calado o, sencillamente, haber llevado a escena La guardia blanca, novela y pieza teatral en las que Mijail Bulg¨¢kov pas¨® revista desde Kiev a la guerra que vivi¨® Ucrania entre 1917 y 1921, que aporta no poca luz hist¨®rica sobre los acontecimientos b¨¦licos actuales.

¡®Fundamentalmente fantas¨ªas para la resistencia¡¯. Texto y direcci¨®n: Alfredo Sanzol. Teatro Valle-Incl¨¢n. Madrid. Hasta el 16 de abril.

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