Un drama t¨®pico sobre la Guerra Civil: no pod¨ªa faltar Lorca
El autor australiano Andrew Bovell y el director espa?ol Juli¨¢n Fuentes Reta tejen una rocambolesca historia familiar demasiado obvia y agotadora por la acumulaci¨®n de dramas
Este espect¨¢culo parece querer condensar todos los traumas que dej¨® la Guerra Civil espa?ola. Un republicano fusilado, una viuda amordazada, el exilio, la memoria enterrada, una ni?a robada, un franquista sin escr¨²pulos, una respetable familia de fachas podrida por dentro, la represi¨®n de la homosexualidad, incesto, abusos sexuales. No falta de nada. Tampoco Federico Garc¨ªa Lorca: el t¨®pico de los t¨®picos. La acumulaci¨®n de desgracias es tal que acaba produciendo un efecto rebote y cierto distanciamiento. Quiz¨¢ tenga que ver en ello la manera en que fue concebido el texto. El autor es Andrew Bovell, respetado dramaturgo australiano al que conocemos bien en Espa?a por los exitosos montajes que ha hecho el director Juli¨¢n Fuentes Reta de sus obras Cuando deje de llover (2014) y Las cosas que s¨¦ que son verdad (2019). Fuentes Reta es tambi¨¦n el responsable de este tercer estreno, Canci¨®n del primer deseo, pero en este caso no se trata de la puesta en escena de una pieza ya existente como las dos anteriores, sino de un trabajo de nueva creaci¨®n a la carta, nacido de la colaboraci¨®n entre ambos creadores y los actores de la producci¨®n a partir de ¡°numerosos testimonios, de nuestras propias historias y las de nuestros mayores, m¨¢s los cientos que, desgraciadamente, se parecen entre s¨ª¡±, explica el director en el programa de mano. Es decir, una suma de dramas que exige una destilaci¨®n bien medida para que el resultado no derive en melodrama. Por ah¨ª naufraga este trabajo.
Bovell es un maestro del drama familiar. Los construye como laberintos emocionales y desarrolla en paralelo varios planos temporales hasta que al final el puzle se resuelve. No feliz ni infelizmente: lo que hace es llevarnos a un viaje por el pasado para que entendamos por qu¨¦ los personajes act¨²an como act¨²an en el presente. As¨ª eran Cuando deje de llover y Las cosas que s¨¦ que son verdad y ahora tambi¨¦n Canci¨®n del primer deseo. Empieza en el patio de una casa con pozo con una mujer que parece haber perdido la memoria. Es una met¨¢fora de la Espa?a que perdi¨® la suya voluntariamente con la esperanza de que as¨ª desapareciera el dolor. A partir de ah¨ª, la obra va desenterrando todo lo que la familia de esa mujer ha ido echando al pozo con el paso de los a?os y ha hecho que sus hijos sean unos desgraciados. Hay otras met¨¢foras evidentes. Por ejemplo, dos pares de gemelos que reflejan las dos Espa?as. O el personaje del homosexual que se identifica con Lorca. Pero el poeta fusilado no es solo un tropo, sino que se alude directamente a ¨¦l y hasta el t¨ªtulo de la obra deriva de su poema Cancioncilla del primer deseo.
Todo est¨¢ muy bien entrelazado, ya hemos dicho que Bovell es un experto tejedor de historias familiares: la protagonista aqu¨ª es la propia Espa?a, reflejada en la familia de la mujer sin memoria. Pero en muchos momentos la obra resulta demasiado obvia y adem¨¢s todos los dramas de un pa¨ªs no pueden caber en una sola estirpe. O s¨ª, pero m¨¢s destilados. En este caso, la acumulaci¨®n resulta rocambolesca y agota.
La puesta en escena de Fuentes Reta, por suerte, es bastante contenida y rebaja el melodrama. Pero el tono solemne impuesto a los actores, en cambio, hace que pierdan naturalidad y verdad.
Canci¨®n del primer deseo
Texto: Andrew Bovell. Versión: Jorge Muriel. Dirección: Julián Fuentes Reta. Reparto: Consuelo Trujillo, Pilar Gómez / Olga Díaz, Borja Maestre y Jorge Muriel. Teatro de la Abadía. Madrid. Hasta el 14 de mayo.
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