¡®El amor de los hombres solitarios¡¯, de Victor Heringer: adi¨®s a una voz l¨ªrica, inteligente y personal

La segunda y ¨²ltima novela de Victor Heringer se titula O amor dos homens avulsos, y la interpretaci¨®n del matiz en avulso, el adjetivo, representa un desaf¨ªo. La edici¨®n italiana habla de uomini soli; la elecci¨®n, en ingl¨¦s y en catal¨¢n, ha sido ¡°singular¡± ¡ªen el sentido de unicidad, aclara Cec¨ªlia Brandi, traductora y amiga, pues avulso no abarca en portugu¨¦s la cualidad de extraordinario o raro¡ª. La propuesta de Francisco Cardemil P¨¦rez, en la traducci¨®n que publica Sexto Piso, ha sido titular el texto El amor de los hombres solitarios.

Del brasile?o Victor Heringer (1988-2018) se sabe que fue poeta, que dedic¨® una tesina a Enrique Vila-Matas y que result¨® laureado en el salto a la prosa. Se sabe, tambi¨¦n, que ¨¦l mismo se consider¨® avulso, pues as¨ª se declara en la p¨¢gina final de la novela. Apareci¨® sin vida poco antes de los 30.

¡°Siempre he sabido que no hab¨ªa venido a este mundo para estar en ¨¦l¡±, confiesa Camilo, el protagonista, ¡°sino para haber estado, haber sido, haber hecho. Nac¨ª p¨®stumamente¡±. Al cumplir los 50 regresa al barrio ficticio de Que¨ªm ¡ªun suburbio de fundaci¨®n m¨ªtica, al norte de R¨ªo¡ª para morir donde naci¨®. All¨ª rememorar¨¢ dos semanas de felicidad adolescente.

El amor de los hombres solitarios es un tratado sobre el odio y la ternura, una novela de aprendizaje con tintes noir que se sit¨²a en la ¨¦poca de la dictadura militar en Brasil y dialoga con el Zambra de Formas de volver a casa, al principio, y con el de Poeta chileno, al final. Sobreprotegido hasta los 13, Camilo recuerda: ¡°Viv¨ªamos bajo la extra?a dictadura de la infancia: ve¨ªamos sin ver, escuch¨¢bamos sin entender¡±. Investido de esa melancol¨ªa incurable que despierta la p¨¦rdida en combinaci¨®n con la intensidad de un cielo pl¨¢cido, el texto a¨²na belleza y tragedia, como la fruta madura donde el dulzor no puede existir sin podredumbre.

La novela empieza con una nota meteorol¨®gica que, a modo de didascalia, establece el tono de una obra donde el calor y la humedad se perciben sin esfuerzo. ¡°El mar¡±, se?ala el narrador, ¡°est¨¢ muy lejos de este libro¡±. La autorreferencialidad del texto premia al lector atento, confiriendo a sus p¨¢ginas la condici¨®n de universo aut¨®nomo, invita a buscar simetr¨ªas e incita al juego: como Melville en su despliegue sobre cetolog¨ªa, el narrador clasifica nuestra especie, con humor, en 40 tipos destinados a describir la humanidad. Con Sophie Calle comparte el gusto por las historias de amor ajeno, a las que da voz en la novela procurando, al contrario de Drummond de Andrade en su Quadrilha, que nadie quede fuera.

La novela crece junto con la intuici¨®n de estar asistiendo al descubrimiento de una obra redonda

Las mejores p¨¢ginas de Heringer se benefician de la imaginaci¨®n y rebeld¨ªa de quien sigue siendo capaz de renovar la mirada diaria en su aproximaci¨®n al mundo. Es de envidiar la inteligencia del autor en la elecci¨®n del detalle significativo, que supo usar con eficacia en la construcci¨®n de las im¨¢genes que colonizan el texto. La novela crece ¡ªramas verdes escapando a la fachada que oculta el solar abandonado donde todo sucede¡ª junto con la intuici¨®n de estar asistiendo al descubrimiento de una obra redonda. No lo es: en el ¨²ltimo tercio la novela pierde fuelle y la intensidad decae en favor de la angustia, sin que eso menoscabe la rotundidad de su inter¨¦s.

Cabe preguntarse por la decisi¨®n de sustituir, en las p¨¢ginas que clausuran el texto, una voz narrativa que con tanta personalidad lo sosten¨ªa hasta entonces. Y, pese a todo, parece destinado a convertirse en uno de esos raros ¨¦xitos cosechados de boca en boca que, muy de vez en cuando, reciben las novelas que lo merecen.

El amor de los hombres solitarios

Victor Heringer
Traducci¨®n de Francisco Cardemil P¨¦rez
Sexto Piso, 2024
152 p¨¢ginas. 17,90 euros

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