El PSC rechaza el grupo propio y busca abrirse con consultas a la militancia

Arrastrados por las circunstancias unos y m¨¢s convencidos, otros, si algo han intentado los socialistas catalanes en el Congreso que hoy concluye es quitarse de encima la etiqueta de partido-apisonadora al¨¦rgico al debate. El ¡°nuevo PSC¡± no solo podr¨¢ presumir de haber asumido por primera vez los riesgos de votar en secreto la gesti¨®n del l¨ªder. Tambi¨¦n ser¨¢ el que instaure las elecciones primarias para elegir su candidato a la Generalitat m¨¢s all¨¢ de los muros del partido y de la militancia.

Las caracter¨ªsticas de esas futuras primarias se fijar¨¢n no antes de medio a?o en un Consejo Nacional que deber¨¢ decidir los entresijos de un proceso que debe permitir que todos los ciudadanos de Catalu?a de sensibilidad progresista puedan votar a qui¨¦n quieren como cabeza de cartel del PSC. Los riesgos que entra?a esta pr¨¢ctica se tendr¨¢n que salvar en el futuro reglamento. Algunos sectores del partido apuestan porque se cobre una cifra simb¨®lica ¡ªun euro¡ª para participar, al estilo de lo que ya se hizo en Francia para elegir el candidato socialista a presidir la rep¨²blica. Tambi¨¦n se deber¨¢ decidir si los interesados en participar deben o no suscribir antes de votar una declaraci¨®n en la cual manifiestan su compromiso con los valores de la izquierda.

En el cambio de reglamento aprobado ayer tambi¨¦n se apost¨® por acabar con las votaciones vigiladas en el seno del partido. Los cargos electos e internos ya no se elegir¨¢n por asentimiento ni en votaci¨®n a mano alzada, sino en listas abiertas y de forma secreta.

El entorno de Chac¨®n, aliviado por la renuncia a distanciarse del PSOE

Otras medidas aprobadas que quieren abrir las fronteras del partido son consultas a la militancia sobre temas clave si lo piden el 10% de los militantes o un tercio de las federaciones; que todos los cargos p¨²blicos deban rendir cuentas.

La apertura del partido a los ciudadanos que todos los candidatos hab¨ªan prometido tambi¨¦n se visualizar¨¢ en el llamado Consejo Abierto, que peri¨®dicamente convocar¨¢ a ciudadanos sin afiliaci¨®n para consultarles sobre actuaciones de futuro. En este consejo participar¨¢n a partes iguales una representaci¨®n del Consejo Nacional del PSC y personalidades de movimientos sociales de la cultura y de ¨¢mbitos progresistas.

Los delegados fuerzan

El equipo de Pere Navarro, en un intento de atraerse a los seguidores de Joan Ignasi Elena, de la corriente Nou Cicle, tambi¨¦n se ha abierto a liderar una alianza con todos los progresistas para las elecciones catalanas de 2014. No se tratar¨ªa de repetir el tripartito, aclara Elena, sino de una suma previa para acudir a las elecciones con amplios sectores de la izquierda catalanista.

Estas medidas quedaron en parte eclipsadas ayer por el eterno debate sobre la relaci¨®n que deben tener PSC y PSOE y si los socialistas catalanes deben tener grupo parlamentario como lo tuvieron los primeros a?os de la democracia. No lo tendr¨¢n y todo seguir¨¢ m¨¢s o menos como hasta ahora pese a que el congreso ha dado el mandato a la nueva ejecutiva para que ¡°renueve¡± su marco de relaciones con el PSOE. El objetivo es que el PSC tenga voz en Madrid y le arrebate a CiU el casi monopolio de la representaci¨®n de Catalu?a. ?C¨®mo lo har¨¢n sin romper con el PSOE? Por 130 votos a favor y 27 en contra, los delegados socialistas votaron una enmienda que abre la puerta a que los socialistas catalanes puedan votar en sentido diferente al los representantes del PSOE en cuestiones referentes a Catalu?a, pero no contempla el grupo propio, una de las demandas hist¨®ricas de los sectores m¨¢s catalanistas del partido.

El texto aprobado insta a que la nueva ejecutiva del PSC negocie con el PSOE la creaci¨®n de una comisi¨®n de seguimiento paritaria en el seno del grupo parlamentario Socialista para negociar el posicionamiento sobre los asuntos de m¨¢s inter¨¦s para Catalu?a. En caso de desacuerdo se abre la puerta a que PSC y PSOE voten en distinto signo: ¡°Los diputados y diputadas del PSC observaran una disciplina com¨²n de acci¨®n, voz y voto salvo en casos excepcionales relativos a asuntos de especial inter¨¦s para Catalu?a y su autogobierno en los que no haya habido acuerdo en la comisi¨®n de seguimiento¡±. Eso s¨ª, deber¨¢n votar lo mismo en el Parlament y en el Congreso. Sectores pr¨®ximos a Carme Chac¨®n entienden que esta enmienda aleja los fantasmas de ruptura entre PSOE y PSC y que esto la puede favorecer en un eventual intento para liderar el PSOE.