Caviar & coca¨ªna
Javier Guerrero ha situado el caso de los ERE a la altura de los calzoncillos de Rold¨¢n
Lo que le faltaba al s¨®rdido asunto de los ERE era una dosis de coca¨ªna. Ya la tiene. El ch¨®fer del ex director general de Empleo de la Junta ha declarado que gast¨® fondos p¨²blicos en ¡°coca¨ªna, fiestas y copas¡±.
La declaraci¨®n de Juan Francisco Trujillo, que recibi¨® para s¨ª y un socio hasta 1,3 millones de euros, dinero que le entregaba graciosamente su jefe Javier Guerrero, ha situado el caso de los ERE a la altura de los calzoncillos de Rold¨¢n, aquel golfo que saque¨® las arcas de la Guardia Civil.
Casualmente, el mismo d¨ªa que supimos de la coca¨ªna, escuchamos una grabaci¨®n, en sede judicial, en la que el ex secretario general del PP valenciano, Ricardo Costa, le ped¨ªa a un turbio personaje apodado El Bigotes que le comprara 100 gramos de caviar.
Caviar & Coca¨ªna. ?Vaya c¨®ctel pagado con el dinero sucio de la corrupci¨®n!
El asunto de los ERE es lamentable. A?adan todos los adjetivos que quieran, que los suscribo. Y m¨¢s lamentable a¨²n es el hecho de que durante nueve a?os (2001-2010) nadie diera la voz de alarma ante la extravagante conducta de un director general que manejaba cuantiosos fondos p¨²blicos desde la mesa camilla de un bar, con un gin-tonic delante.
Con la desmesura que le caracteriza, Javier Arenas ha dicho que el presidente Jos¨¦ Gri?¨¢n ha convocado las elecciones auton¨®micas para el 25 de marzo, para ¡°desviar la atenci¨®n sobre el grav¨ªsimo esc¨¢ndalo de los ERE y de la coca¨ªna¡±. O sea: ?si no hubiera coca¨ªna, no habr¨ªa elecciones?
Mientras, Arenas ignor¨® los juicios que se siguen contra sus dos admirados expresidentes, Francisco Camps y Jaume Matas, m¨¢s el sibarita Costa.
Los casos no son comparables. La causa de los ERE afecta a una treintena de imputados. El m¨¢ximo responsable ten¨ªa nivel de director general. Dispuso de 647 millones de euros para subvenciones a empresas en crisis. De ellos, por lo sabido hasta ahora, unos nueve millones fueron cobrados irregularmente por 72 intrusos, seg¨²n investigaciones de la Junta, trasladadas a la juez Mercedes Alaya.
Se sabe pues donde est¨¢ el dinero y se podr¨¢ recuperar en su pr¨¢ctica totalidad. La Junta fue la primera que denunci¨® el fraude a la fiscal¨ªa, y bajo el lema de caiga quien caiga, no ha dudado en pedir la imputaci¨®n de cualquier implicado. Por ejemplo, de un hermano del expresidente Jos¨¦ Rodr¨ªguez de la Borbolla.
Por el contrario, el juicio de los trajes contra Camps es el primero de una serie que juzgar¨¢ delitos de mayor calado, como la financiaci¨®n ilegal del PP en varias comunidades, con presidentes, consejeros, diputados, senadores, alcaldes, y concejales del PP implicados. La Generalitat, con Federico Trillo de asesor, no hizo m¨¢s que entorpecer y retrasar la investigaci¨®n.
En Palma de Mallorca, otro expresidente y exministro del PP, Jaume Matas, iniciaba, la misma semana del caviar & coca, la primera estaci¨®n de su largo calvario judicial: tiene 25 causas abiertas. Un caso que ha salpicado al mism¨ªsimo yerno del Rey.
El tema de los ERE, como reconoce Gri?¨¢n, tendr¨¢ un efecto ¡°grande¡± en las elecciones auton¨®micas. Y m¨¢s si, como temen algunos, dados los antecedentes, la juez Alaya realiza alg¨²n movimiento en las v¨ªsperas del 25-M. Ya lo hizo en las municipales y en las generales.
Porque mientras la izquierda castiga severamente la corrupci¨®n, a la derecha le da lo mismo. ?C¨®mo explicar si no la mayor¨ªa absoluta de Camps conseguida el pasado mes de mayo, cuando ya se conoc¨ªa casi todo lo que se est¨¢ escuchado ahora en el juicio?
La pregunta es qu¨¦ habr¨¢n pensado esos votantes valencianos al o¨ªr a Camps, en su propia voz, no en una transcripci¨®n escrita, llamar ¡°amiguito del alma¡± a El Bigotes, y como ¨¦ste le devuelve esas cari?osas palabras con un contundente ¡°gilipollas¡±.
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