Casi la mitad de las plazas hoteleras andaluzas ha cerrado en invierno

El buen comportamiento de la actividad tur¨ªstica durante el a?o 2011, en el que ha sido principal pilar de sostenimiento de la econom¨ªa andaluza, presenta sin embargo algunos claroscuros. La recuperaci¨®n del bache de 2010, favorecida en buena parte por la ca¨ªda de los mercados competidores del norte de ?frica debido a la inestabilidad pol¨ªtica y social, no se ha traducido en un reparto equilibrado del movimiento hotelero durante el a?o, y de nuevo han vuelto a aumentar el n¨²mero de plazas hoteleras cerradas en invierno.

La alta estacionalidad es la principal debilidad de la actividad, seg¨²n coinciden en apreciar empresarios y sindicatos, alarmados por las consecuencias que tiene en la rentabilidad de las empresas y en la estabilidad laboral.

Las pernoctaciones en establecimientos hoteleros aumentaron el a?o pasado un 3,2% y superaron en total los 42,2 millones. Especialmente interesante resulta el incremento del 12,6% de la estancias de clientes extranjeros, por lo que supone confirmar la tendencia de reactivaci¨®n de los mercados internacionales tras varios a?os de estancamiento. El verano de 2011 es ya el de mayor movimiento hotelero en Andaluc¨ªa, por encima incluso de la temporada alta del a?o 2007, el que hasta ahora es mejor ejercicio de la historia. Sin embargo, en los meses fuera de temporada la evoluci¨®n no ha tenido el mismo alcance.

Desde aquel ejercicio hist¨®rico, el descenso de la actividad ha ido aparejado de un aumento de la estacionalidad. As¨ª, las pernoctaciones que registraron los hoteles entre junio y septiembre de 2011 (20.539.198) suponen casi el 49% del total del a?o. En 2007, la concentraci¨®n de estancias en los cuatro meses de verano no lleg¨® al 46% del total anual.

Una de las consencuencias es que en estos a?os ha vuelto a aumentar paulatinamente el n¨²mero de plazas hoteleras cerradas en temporada alta, un fen¨®meno que lleg¨® a reducirse notablemente en la d¨¦cada de los 90, cuando en las principales zonas litorales como la Costa del Sol apenas descansaba el 20% de las plazas. Este a?o en la costa malague?a las camas cerradas superan el 40% del total, y el fen¨®meno afecta a hoteles de todas las categor¨ªas, incluso los m¨¢s lujosos como Los Monteros o VillaPadierna, el emblem¨¢tico establecimiento donde se aloj¨® Michelle Obama el verano de 2010.

La consejer¨ªa de Turismo, Comercio y Deportes cuestiona estos datos, que confirman sindicatos y patronal y sostiene que las plazas cerradas apenas alcanza el 10% de la oferta. Pero seg¨²n el secretario de hosteler¨ªa de CC OO, Gonzalo Fuentes, lo que ocurre es que s¨®lo comunican el cierre los establecimientos que habitualmente eran de temporada, y no los que no sol¨ªan tomarse vacaciones.

La proporci¨®n es aun mayor en Huelva, donde seg¨²n CC OO ha cerrado el 90% de las plazas hoteleras ubicadas en la costa, mientras que en Almer¨ªa rondar¨ªa el 60%, y en C¨¢diz entre el 40% y el 50%.

¡°Cada vez hay m¨¢s establecimientos que cierran en temporada baja y adem¨¢s aumenta el tiempo que permanecen cerrados¡±, se queja Fuentes. El dirigente sindical denuncia ello implica un deterioro de las condiciones de trabajo y los derechos de los trabajadores, puesto que los fijos discontinuos pierden prestaciones por desempleo al no cumplir el cupo de d¨ªas trabajados necesarios para tenerlas, con el problema a?adido de que ahora no hay alternativas laborales para los meses de invierno como ocurr¨ªa antes con la construcci¨®n.

CC OO se queja de la alta tasa de temporalidad laboral en la hoteler¨ªa andaluza, con un 45,2% de contratos temporales, nueve puntos m¨¢s que en el conjunto de Espa?a.